Un motor del avi¨®n israel¨ª que se estrell¨® en Holanda sufri¨® un incendio hace tres meses

Uno de los motores del Boeing 747 israel¨ª que se estrell¨® el domingo contra un edificio de apartamentos en Amsterdam y mat¨® a unas 250 personas se incendi¨® en el aire el pasado mes de julio, cuando se dispon¨ªa a aterrizar en el aeropuerto de Schiphol, seg¨²n inform¨® ayer la portavoz del aeropuerto, Mariona van der Goot. En esa ocasi¨®n, el fuego fue apagado por el sistema de extinci¨®n del aparato antes de tomar tierra.

Parte de la caja negra del avi¨®n fue hallada ayer entre los escombros de los dos edificios contra los que se estrell¨®, en el barrio de Bijlmermeer. La caja contiene los detalles del vuelo, pero no las conversaciones. Los expertos albergan pocas esperanzas de obtener informaci¨®n alguna dado su lamentable estado. En un lago situado no lejos del accidente apareci¨® tambi¨¦n uno de los motores del avi¨®n, destrozado, pero sin rostro de haber sufrido ning¨²n incendio. Aunque contin¨²a la b¨²squeda del segundo motor, los expertos no descartan ahora que el aparato s¨®lo perdiera uno durante el vuelo. No obstante, una foto del avi¨®n siniestrado tomada por un aficionado, dada a conocer ayer, muestra que el aparato pudo perder los dos motores del ala derecha.Seg¨²n los expertos en cat¨¢strofes a¨¦reas, las conversaciones entre el piloto y la torre de control, la otra parte de la caja negra, s¨ª podr¨ªan ayudar a comprender mejor las causas del siniestro. El n¨²mero de cad¨¢veres recuperados asciende ya a 40, y el Ayuntamiento mantiene la cifra de 250 posibles v¨ªctimas y desaparecidos. Los equipos de rescate esperan encontrar a giran n¨²mero de cad¨¢veres en los s¨®tanos, ya que en un club juvenil all¨ª enclavado se celebraba una reuni¨®n en el momento del accidente.

Muchos residentes ilegales del barrio afectado siguen sin comparecer ante la polic¨ªa por miedo a las consecuencias. Algunas comunidades afectadas han mostrado adem¨¢s su malestar sin reparos. Muchos inquilinos de origen gan¨¦s no quieren o¨ªr hablar de las instituciones p¨²blicas holandesas. Este mismo a?o, la polic¨ªa sugiri¨® que la mayor¨ªa de sus compatriotas se dedicaba en Amsterdam al tr¨¢fico de drogas.