Siria se modera y defrauda las esperanzas palestinas
La sorpresa que se llevaron anoche los ministros de Exteriores ¨¢rabes reunidos en El Cairo y esencialmente los 413 palestinos desterrados fue escuchar la propuesta oficial de Damasco. Era ciertamente m¨¢s conciliadora que los editoriales de la prensa controlada por el Gobierno de Siria. Menos de 12 horas despu¨¦s de la publicaci¨®n de un furibundo editorial en el diario gubernamental Tishr¨ªn (Octubre), que criticaba la complicidad de la ONU en el injusto tratamiento hacia los ¨¢rabes, el ministro sirio Faruk el Sharaa impuso la moderaci¨®n que debi¨® satisfacer a EE UU.
No hubo ning¨²n llamamiento a sanciones. Ni una sola referencia a las apocal¨ªpticas consecuencias que los editorialistas ¨¢rabes pronosticaban para el futuro del proceso de paz derivadas del destierro de 413 palestinos acusados por Israel de pertenecer o simpatizar con los movimientos musulmanes que luchan contra la ocupaci¨®n desde 1967.En lugar de enfrentamiento diplom¨¢tico, Damasco opt¨® por la salida pragm¨¢tica. Para los sirios hay que mantener vivo el proceso de Madrid a¨²n si ello implica defraudar las aspiraciones de la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina (OLP) de Yasir Arafat, aspiraciones extra?amente coincidentes con aquella de los sectores mas cr¨ªticos hacia la ductilidad de la organizaci¨®n. El clamor de los palestinos que viven las calamidades y la ignominia del exilio forzoso ha sido simplemente ignorado por Damasco.
Presi¨®n gradual
La f¨®rmula siria para evitar que la crisis de los deportados electrocute el proceso que promete a Damasco una no muy lejana soluci¨®n en los altos del Gol¨¢n, fue una nueva y elocuente manifestaci¨®n del pragmatismo de Assad. Si hay que aplicar presi¨®n a Israel, es mejor utilizar una escala gradual: Primero, suspender las conversaciones multilaterales, el aspecto mas perif¨¦rico del proceso de paz, y luego se ver¨¢ que hacer.Siria nunca tuvo mucho entusiasmo ni fe en el cap¨ªtulo multilateral -aquel que tiene que ver con la cooperaci¨®n econ¨®mica con Israel, un arreglo para compartir los vitales recursos hidr¨¢ulicos de la regi¨®n y otros temas ciertamente de menor envergadura que el tema central del nacionalismo de los palestinos de Gaza y Cisjordania pero en la reuni¨®n de El Cairo le encontr¨® un valor pr¨¢ctico.
Para Siria, la suspensi¨®n de la faceta multilateral "definitivamente representar¨ªa un golpe m¨¢s rudo para Israel que la suspensi¨®n de las negociaciones bilaterales", dijo, Sharaa. Naturalmente no es un criterio compartido por la OLP ni, curiosamente, por sus rivales m¨¢s enconados, los militantes del Movimiento de la Resistencia Isl¨¢mica, o Ham¨¢s. Para comenzar, los integristas isl¨¢micos denuncian el proceso de paz como una capitulaci¨®n y han logrado, en cierta manera, capturar el liderazgo de la rebeli¨®n palestina que ruge en los territorios ocupados desde 1987.
Si la reuni¨®n de El Cairo demostr¨® algo, fue que Siria sigue actuando como factor central de la infinitamente complicada ecuaci¨®n de Oriente Pr¨®ximo.
Dram¨¢tico llamamiento
L¨ªbano, cuyo Gobierno est¨¢ acostumbrado al dictado de Damasco, lideraba la corriente que demandaba sanciones contra Israel. Incluso propuso una cumbre ¨¢rabe. La postura expuesta por Sharaa sugiere, sin embargo, que Beirut va a tener que ser mas d¨®cil.No le estar¨¢n agradecidos los desterrados. En el escu¨¢lido Campo del Retorno donde los 413 palestinos pasaron ayer la jornada mas fr¨ªa, ocho grados bajo cero, ya existe desaz¨®n. Mientras los ministros se reun¨ªan en El Cairo, Abdul Aziz al-Rantisi, el portavoz de los desterrados, hab¨ªa hecho el mas dram¨¢tico llamamiento a una acci¨®n radical de la Liga ?rabe: Sanciones contra Israel, algo que, al menos de momento, no est¨¢ en el programa pol¨ªtico de Siria y, por ende, del L¨ªbano o Jordania. En todos los flancos gubernamentales del proceso de paz es m¨¢s importante mantener las conversaciones con Israel.
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