Amato cambia de parecer y pide la confianza del Parlamento italiano

El presidente del Gobierno italiano, el socialista Giuliano Amato, anunci¨® ayer que ma?ana pedir¨¢ al Parlamento la confianza para el Gabinete que reajust¨® ligeramente el domingo. Amato hab¨ªa sostenido s¨®lo 24 horas antes que ese paso no ser¨ªa necesario. En su cambio de opini¨®n influyeron las cr¨ªticas que su propio partido formul¨® el lunes contra el nuevo Gabinete, as¨ª como el anuncio de que el ministro de Industria, Giuseppe Guarino, seguir¨¢ dificultando las privatizaciones.

"Es necesario que el Gobierno retome su tarea con seguridad", dijo Amato, reconociendo impl¨ªcitamente la debilidad del Ejecutivo. La trayectoria del primer ministro parece haber entrado en el c¨ªrculo del eterno retorno. Apenas han pasado tres semanas desde que, el 3 de febrero, superara un voto de censura en el Parlamento y cuatro d¨ªas desde que un debate parlamentario sobre la dimisi¨®n del ministro Claudio Martelli derivara en otro voto de confianza impl¨ªcito, forzado por la imposibilidad de formar otra mayor¨ªa distinta de la que sustenta al Gabinete.Pero la crisis avanza y sigue debilitando a Amato, que parece determinado a agotar su destino. Durante el fin de semana, Amato sali¨® mal parado del intento de lograr de los partidos una soluci¨®n de fondo para las contradicciones del Gabinete, privado de otros dos ministros investigados por presunta corrupci¨®n. Y el lunes, los mismos partidos que le impidieron tomar decisiones m¨¢s firmes, criticaron la incoherencia de un reajuste que no ha satisfecho a nadie.

Dentro de la Democracia Cristiana (DC), mayoritaria en la coalici¨®n de Gobierno, el rechazo se expresaba en sus segundos niveles, contrarios a la privatizaci¨®n de las empresas p¨²blicas, que sustentan el poder econ¨®mico de los partidos.

La protesta era, en cambio, casi generalizada en el Partido Socialista Italiano (PSI) -el de Amato-, pues la izquierda institucional que ha apoyado la elecci¨®n del nuevo secretario general, Giorgio Benvenuto, un¨ªa su voz, contraria a las privatizaciones, a la corriente minoritaria que favorecer¨ªa una aproximaci¨®n a los ex comunistas del Partido Democr¨¢tico de la Izquierda (PDS). Incluso los fieles del ex secretario Bettino Craxi criticaban a Amato por mantener como ministro a Carlo Ripa di Meana, que ha dejado el PSI.

Sin poderes

La remodelaci¨®n hab¨ªa logrado convencer a la opini¨®n p¨²blica de que, al menos, Amato vender¨ªa el patrimonio empresarial del Estado, seg¨²n demostr¨® la Bolsa el lunes. Pero incluso el ministro de Industria, que se neg¨® a dimitir como le ped¨ªa Amato, convoc¨® una conferencia de prensa para reafirmar que se queda en el Gobierno y que sigue teniendo fuerza para oponerse a las privatizaciones. Guarino asegur¨® que el ministerio que Amato ha creado para ese objetivo "no tiene apenas poderes" y es un c¨²mulo de errores jur¨ªdicos contra los que recurrir¨¢.Otro foco de conflicto se insinuaba al caer la noche. El presidente del Gobierno hablaba al PSI de una soluci¨®n pol¨ªtica a la corrupci¨®n, que estar¨ªa basada en una ley que distinga entre el que ha robado para s¨ª y el que ha robado para el partido. Pero el ministro de Justicia, Giovanni Conso, lo m¨¢s que admitir¨ªa es la posibilidad de pactar la pena para los implicados.

Durante la jornada, se registraron decenas de detenciones en, toda Italia por estos asuntos (s¨®lo en Verona fueron 26 los empresarios y pol¨ªticos detenidos). Adem¨¢s, un alto funcionario p¨²blico relacionado con la desaparici¨®n de documentos p¨²blicos relativos a la fallida fusi¨®n del grupo qu¨ªmico del En? con Montedison, investigada en busca de comisiones, desapareci¨® tras dejar unas cartas que inducen a pensar en un suicidio.

Tal es el transfondo de la confianza que Amato pedir¨¢ al Parlamento que impide asegurar que el primer ministro pueda viajar la pr¨®xima semana a Madrid, como tiene previsto.

Entretanto, la lira segu¨ªa mal y los t¨ªtulos de Fiat se recuperaban ligeramente de la ca¨ªda provocada por la noticia de la detenci¨®n, vinculada al esc¨¢ndalo de la corrupci¨®n, de dos altos ejecutivos, que ayer negaron todas las imputaciones. Il Coriere della Sera, el principal diario del grupo que preside Giovanni Agnelli, coment¨® positivamente esas detenciones, que, dec¨ªa, "acreditan la imparcialidad de los jueces".