Investigado el ministro de Defensa italiano por la presunta negociaci¨®n de votos con la Mafia

El socialista Salvo And¨®, ministro de Defensa italiano, nacido en Catania hace 48 a?os, es el sujeto de una petici¨®n de autorizaci¨®n de procesamiento cursada el pasado martes por la magistratura catanesa por presuntos contactos orientados a la consecuci¨®n de votos mafiosos. La apertura de este sumario mina las posibilidades de que siga al frente del Gobierno el tambi¨¦n socialista Giuliano Amato, quien ayer hizo en el Parlamento un balance de su gesti¨®n.

El discurso de Amato no tuvo en modo alguno el tono de la despedida formal que se preve¨ªa, y anoche se consideraba seguro que el primer ministro no dimitir¨¢ al menos hasta que el presidente de la Rep¨²blica, Oscar Luigi Scalfaro, encuentre un candidato para dirigir el nuevo Gabinete.El jefe de Estado ten¨ªa en perspectiva las dos hip¨®tesis de relevo que se han venido barajando en los ¨²ltimos tiempos: encargar a una personalidad como el presidente de la C¨¢mara de Diputados, Giorgio Napolitano, la formaci¨®n de un Gobierno institucional que incluir¨ªa a los ex comunistas del Partido Democr¨¢tico de la Izquierda (PDS); o intentar un Gobierno de t¨¦cnicos dirigido por un independiente de los grandes partidos.

Mario Segni, ex democristiano y promotor del reciente refer¨¦ndum, el radical Marco Panella y Leopoldo Elia, ex presidente del Tribunal Constitucional, son algunos de los nombres que han sonado como presidentes de este segundo tipo de Gabinete que, como el institucional, tendr¨ªa una vida limitada al tiempo necesario para reformar la ley electoral en el sentido que se deduce del refer¨¦ndum y garantizar la gesti¨®n de pa¨ªs hasta la pr¨®xima celebraci¨®n de elecciones generales.

Cualquiera de estas dos hip¨®tesis sigue encontrando dificultades graves y, por esa misma raz¨®n, Amato parec¨ªa todav¨ªa el martes el m¨¢s firme candidato para seguir presidiendo el Gobierno, al menos hasta las elecciones municipales del pr¨®ximo 6 de junio. El sumario contra And¨®, unido a la experiencia previa de que todos los ministros de Amato que hasta ahora han tenido problemas con la justicia han terminado dimitiendo, minan sus posibilidades.

"El voto del refer¨¦ndum hace que se abra una fase profundamente nueva. La indicaci¨®n es clara. Se quiere un nuevo Parlamento, pero ante todo elegido de un modo nuevo. Se trata de un aut¨¦ntico cambio de r¨¦gimen", dijo ayer Amato en su discurso ante la C¨¢mara.

Las diligencias contra And¨® se basan en las declaraciones de Severino Samperi, un arrepentido del clan de Nito Santapaola, el jefe de la Mafia catanesa, que afirma que colaboradores del ministro se han reunido con exponentes mafiosos para conseguir votos en elecciones tanto locales de Catania como generales.

Al parecer, la polic¨ªa encontr¨®, adem¨¢s, unas notas escritas y firmadas por el ministro And¨® en un chalet pr¨®ximo a Catania, que fue allanado con la esperanza de detener a Santapaola. Otros arrepentidos afirman, por otra parte, que un colaborador de And¨® est¨¢ asociado al gestor de un supermercado cantan¨¦s controlado por mafiosos.

Indignado, pero tranquilo

El ministro de Defensa, que por tener Italia la presidencia de turno de la Uni¨®n Europea Occidental (UEO) recibi¨® ayer a los presidentes de las asambleas parlamentarias de la organizaci¨®n paneuropea de defensa, declar¨®: "Estoy indignado, pero tranquilo. Es una sinvergonzada, y no la primera. Estoy seguro de que, como en otros casos, har¨¦ que el responsable me pague los da?os".Otro pol¨ªtico destacado, hasta hace poco socialista, el ex ministro de Justicia Claudio Martelli, recibi¨® tambi¨¦n ayer la notificaci¨®n de apertura de otro sumario relacionado con el cobro de una comisi¨®n ilegal de unos 40 millones de pesetas por un suministro al grupo el¨¦ctrico estatal ENEL.

La intervenci¨®n de Amato oblig¨® a aplazar en el pleno de la C¨¢mara el debate definitivo sobre la autorizaci¨®n para procesar al ex l¨ªder del Partido Socialista Italiano (PSI), Bettino Craxi, que ha sido trasladado a la pr¨®xima semana.

Y mientras Amato pronunciaba su discurso de despedida, lleg¨® la noticia de que Cesare Romiti, el consejero delegado de Fiat, estaba declarando en una comisar¨ªa de Mil¨¢n ante los jueces milaneses de la investigaci¨®n manos limpias. Romiti no declara como implicado sino como simple testigo y por voluntad propia.