Cuando canta el urogallo

La m¨²sica de ra¨ªz celta est¨¢ saliendo de las catacumbas a las que fue enviada durante la pasada d¨¦cada por la supuesta modernidad. De ah¨ª, ¨¦xitos recientes como los de la canadiense Lorena McKennit o el de la irlandesa Enya. Ahora son los escoceses de Capercaillie quienes irrumpen. En 1984, unos amigos formaron el grupo en una peque?a poblaci¨®n de la costa oeste de Escocia y le pusieron el nombre de una especie de urogallo que habita aquellos bosques. Cuatro a?os m¨¢s tarde se consolidaban definitivamente, y en 1991, su disco Delirium obten¨ªa una calurosa acogida.Los siete m¨²sicos que forman Capercaillie empezaron su actuaci¨®n algo desangelados, como si no confiasen en sus posibilidades ante una plaza que les era nueva. Alguien que los ha tratado afirm¨® que en contra de lo que se supone de la mayor¨ªa de los escoceses, ¨¦stos, no beben whisky. As¨ª que por ese lado tampoco. Pero la cosa se arregl¨® en cuesti¨®n de unos cuantos temas; alternaron el idioma ga¨¦lico y el ingl¨¦s, composiciones actuales con obras que tienen varios siglos de antig¨¹edad, canciones cantadas y piezas instrumentales.

Con la espectacular voz de Karen Matheson en primer plano, los Capercaillie apuestan por una aproximaci¨®n renovadora: del folclor de su tierra. Arreglos e instrumentaciones elegantes con un tratamiento t¨ªmbrico que les acerca a la m¨²sica pop. Cada vez que Donald Shaw se colgaban el acorde¨®n y dec¨ªa lo de "all¨¢ vamos", las palmas echaban humo. En un tris estuvieron de convertir el patio de butacas del vetusto local en uno de aquellos salones enfebrecidos de las pel¨ªculas del Oeste. Al final, Shaw se dirigi¨® a los asistentes en estos t¨¦rminos: "Estais locos". Quiz¨¢ si, pero por culpa de un peculiar urogallo escoc¨¦s.