"Arma que encuentro la destruyo para siempre"
F. ORGAMBIDES La presidenta Violeta Barrios de Chamorro se ha convertido en la primera figura de respeto en la historia de Nicaragua que no ha tenido que recurrir ni al autoritarismo ni a la imposici¨®n ideol¨®gica para llevar las riendas de este pa¨ªs eternamente dividido. A sus 64 a?os, esta mujer, profundamente cat¨®lica y que no pas¨® del bachillerato, ha logrado la paz donde nunca la hubo. Nicaragua no despega econ¨®micamente, pero hoy es un pa¨ªs reconciliado. Pese a no ser una pol¨ªtica profesional, do?a Violeta ha encontrado, desde el matriarcado, una forma de gobernar la dif¨ªcil Nicaragua con palabras sencillas.
Pregunta. ?ltimamente, en Nicaragua se est¨¢n descubriendo arsenales de armas por todas partes.
Respuesta. Claro que s¨ª. Aqu¨ª antes hab¨ªa mucho ma?oso. Nicaragua se hab¨ªa convertido con los sandinistas en un refugio de internacionalistas de todo el mundo, que yo todav¨ªa no me explico de d¨®nde salieron. Desde luego, ninguno hab¨ªa venido a este pa¨ªs a rezar. Pero, gracias a Dios, en 1990 a la mayor¨ªa se los llev¨® el viento.
P. ?Y las armas?
R. Las armas est¨¢n apareciendo poco a poco. Yo no voy a permitir un desgaste de la soberan¨ªa de mi pa¨ªs para que desde aqu¨ª se distribuyan armas al resto del mundo. Por eso, arma que encuentro, arma que destruyo y entierro para siempre. No las quiero. Demasiado hemos sufrido ya.
P. Por lo que se ve, esto era m¨¢s grave de lo que se supon¨ªa.
R. Esto era horrible. Aqu¨ª a la gente le hac¨ªan un lavado de cerebro dici¨¦ndoles que se acercaba una guerra, que nos iban a invadir. Lo mismo ocurr¨ªa con los ni?os, a quienes introduc¨ªan de repente y sin justificaci¨®n alguna en refugios antia¨¦reos a modo de ensayo. Todo era mentira. Nadie nos quer¨ªa invadir.
P. Ha sido usted muy valiente enviando a los tres etarras a Espa?a.
R. Yo no puedo permitir que en mi pa¨ªs vivan mentirosos. Gente que oculta su verdadera identidad. Espa?a envi¨® un avi¨®n a por ellos, y lo que les ocurra ahora a estos se?ores con los tribunales de su pa¨ªs es cosa que no me importa. Era gente no grata.
P. Se asegura que en Nicaragua hay m¨¢s etarras con documentaci¨®n falsa.
R. En eso se est¨¢. De momento, a la vista de que hemos descubierto la existencia de pasaportes con identidad falsa, lo que estamos haciendo es poner ojos firmes y honrados en los aeropuertos para comprobar qui¨¦n entra o sale del pa¨ªs.
P. Tambi¨¦n a uno de los sospechosos del atentado contra las Torres Gemelas de Nueva York se le intervino un pasaporte nicarag¨¹ense.
R. ?Qu¨¦ me va a decir! Si lo ten¨ªan aqu¨ª unos espa?oles, ?c¨®mo no lo van a tener otros fuera de Nicaragua! Es muy triste lo que nosotros hemos vivido y nadie nos quiere comprender todav¨ªa.P. De los poderes sandinistas que a¨²n subsisten, ?cu¨¢l le ha dado m¨¢s quebraderos de cabeza: el Ej¨¦rcito o la polic¨ªa?
R. Ninguno de los dos. Gracias a Dios, nuestras reformas est¨¢n tambi¨¦n dirigidas hacia el Ej¨¦rcito y la polic¨ªa, que deben de estar sujetos a la sociedad civil. Yo recib¨ª hace tres a?os un Ej¨¦rcito de ochenta y seis mil y pico de personas, que ahora ya no pasa de doce mil quinientos hombres.
Lo mismo ocurre con las fuerzas de seguridad: aqu¨ª, en Nicaragua, hace cuatro a?os todo el mundo era polic¨ªa e iba exhibiendo su rifle por la calle. Esto se ha acabado. Quien quiera ser militar o polic¨ªa tiene que pasar por su respectiva escuela. En esto nos est¨¢ ayudando Espa?a.
P. ?No sospecha, sin embargo, que le pueden estar ocultando cosas?
R. Este pueblo es muy chiquito, y tarde o temprano todo se averigua. En todas partes hay gente mentirosa.
P. Usted no est¨¢ gobernando de acuerdo a los partidos que la auparon al poder.R. En Nicaragua se gan¨® porque mucha gente vot¨® por Violeta Chamorro. Vot¨® por el cambio. Yo soy la presidenta de todos los nicarag¨¹enses, y no de uno, cinco o diez partidos. Todav¨ªa recuerdo a esos muchachos aterrados que con su fusil sal¨ªan como hormiguitas a mi paso para verme en campa?a electoral.
Esos muchachos hastiados de guerra y de muerte y tantos otros nicarag¨¹enses ya desesperados fueron los que me votaron. Una de las cosas que m¨¢s se me ha agradecido es la abolici¨®n del servicio militar obligatorio.
P. El Ej¨¦rcito sandinista quiere autofinanciarse creando empresas privadas. ?No cree que puede convertirse de esta manera en un verdadero contrapoder econ¨®mico?
R. Todo el mundo se queja de que no tiene dinero. Lo que pasa es que ahora el presupuesto del Ej¨¦rcito est¨¢ controlado por el Ministerio de Finanzas y antes no. Aqu¨ª lo primero es la salud y la educaci¨®n. Los ni?os y un vaso de leche. Cada cual tiene derecho a montar sus empresas, siempre que sean de ellos y no del Estado. Ojal¨¢ la administren bien y ojal¨¢ no fracasen.
P. Nicaragua est¨¢ vendiendo sus helic¨®pteros militares y sus misiles de guerra a otros pa¨ªses. ?Ad¨®nde va todo este dinero?
R. No hay duda. Esto va a las arcas del Estado.
P. ?Le molesta que la identifiquen como un ama de casa?
R. Pero si es lo que soy. Yo todav¨ªa hago mi listita con mis cosas para el d¨ªa siguiente. Si una no maneja su casa, las cosas no caminan como debe ser. Y a m¨ª no me gusta poner una persona para que maneje mi casa.
P. ?Por qu¨¦ Nicaragua no acaba de lograr el despegue econ¨®mico?
R. Hay mucha gente incr¨¦dula. Yo recib¨ª este pa¨ªs en bancarrota. A esto hay que unir la baja de los precios de nuestras exportaciones tradicionales, como el algod¨®n, y las desgracias naturales que hemos sufrido. Tambi¨¦n la pol¨ªtica de expropiaciones del Gobierno sandinista.
Ahora se les est¨¢n devolviendo estos cafetales a sus antiguos propietario s, pero los reciben desbaratados, vac¨ªos. La erupci¨®n de un volc¨¢n el a?o pasado arruin¨® toda la cosecha algodonera. Pese a todo esto, que no lo concibo m¨¢s que como un castigo de Dios, la cosa se est¨¢ levantando, y tengo esperanzas de dejar dentro de tres a?os este pa¨ªs mejor de como lo recib¨ª.
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