El psicodrama de palestinos e israel¨ªes
Un coloquio en Londres reaviva los miedos de los dos enemigos hist¨®ricos
"Con el final de la guerra fr¨ªa, hemos pasado del equilibrio de fuerzas al equilibrio de intereses", constat¨® Vladimir Petrovski, subsecretario general de la ONU, al abrir el coloquio palestino-israel¨ª-europeo que se celebr¨® recientemente en Londres, bajo la ¨¦gida de Naciones Unidas.
?Sabr¨¢n los israel¨ªes y los palestinos llegar a un compromiso entre sus intereses vitales? He ah¨ª la cuesti¨®n. Cada encuentro entre palestinos e israel¨ªes fuera de la negociaciones de Washington acaba convirti¨¦ndose, casi siempre, en un psicodrama.En el curso de una reuni¨®n como la de Londres, donde los invitados se pronunciaron sobre la mejor forma de pasar de la "cultura del rechazo mutuo" al "reconocimiento y al respeto rec¨ªprocos", era inevitable que palestinos e ¨ªsrael¨ªes enumeraran sus quejas hist¨®ricas y recordaran sus miedos y recelos. Curiosamente, un hombre abierto y moderado como el general Shlomo Gazith, que siempre ha pedido a los israel¨ªes que comprendan las reivindicaciones palestinas, insisti¨® en Londres sobre los temores de los israel¨ªes por su supervivencia.
Gazith exhort¨® a la OLP y a los palestinos a enmendar la constituci¨®n palestina y a aceptar p¨²blicamente la existencia del Estado de Israel. "Dicen ustedes que la Intifada, su lucha armada, permite la continuaci¨®n de las negociaciones", asegur¨®. "De acuerdo. Comprendo tambi¨¦n que desde T¨²nez o Jerusal¨¦n no puedan controlar a los individuos que hunden cuchillos en el pecho de j¨®venes israel¨ªes. Pero quiero oirles proclamar que, si se llega a un acuerdo en Washington, la lucha armada acabar¨¢ y reconocer¨¢n al Estado de Israel... Necesito sus garant¨ªas para apaciguar mi paranoia. Todo es negociable salvo nuestra existencia. Si se niegan a calmar nuestro miedo, no habr¨¢ acuerdo".
Psique colectiva
Las apasionadas declaraciones de este militar, que ha participado en todas las grandes guerras de Israel, demuestran hasta qu¨¦ punto la desconfianza y el miedo de los israel¨ªes est¨¢n profundamente enra¨ªzados en su psique colectiva. La r¨¦plica no tard¨® en llegar. "El sionismo ha destruido cuatro generaciones de mi pueblo", proclam¨® Afif Safi¨¦, jefe de la misi¨®n de la OLP en Londres. "Viv¨ªamos en un ¨²nico pa¨ªs y ahora estamos dispersos por el mundo. Los jud¨ªos han respondido a nuestros sufrimientos con una insensibilidad reforzada por el holocausto ( ... ) Las persecuciones israel¨ªes que hemos sufrido recuerdan el genocidio jud¨ªo ( ... ) ?Acaso los palestinos no tienen derecho a exigir excusas hist¨®ricas a Israel? ?Por qu¨¦ los jud¨ªos no pueden proclamar quer¨ªamos un Estado en el que fu¨¦ramos mayoritarios y hemos desplazado a los palestinos. Lo lamentamos. Hoy queremos abrir una nueva p¨¢gina en nuestras relaciones con ellos?"
La mayor¨ªa de los israel¨ªes s¨®lo retuvo la comparaci¨®n con el genocidio jud¨ªo. Una periodista sueca, tambi¨¦n jud¨ªa, apuntaba: "Los jud¨ªos han sido perseguidos durante siglos y las v¨ªctimas no se sienten culpables de nada. Ahora que los jud¨ªos tienen un Estado, han alcanzado al resto de la humanidad, corro¨ªda por la culpa".
El intelectual palestino Jalil Hindi pidi¨® a los palestinos que no exijan a Israel que pida perd¨®n y a los israel¨ªes que no pretendan que ¨¢rabes y palestinos reconozcan al Estado jud¨ªo.
Tambi¨¦n apel¨® Hindi a los intelectuales ¨¢rabes y palestinos para que luchen contra el chovinismo, el radicalismo isl¨¢mico y los sentimientos antisemitas presentes en la sociedad ¨¢rabe. "Si, en los dos campos, se primara lo racional y lo razonable, la paz se instalar¨ªa en las tierras de Israel y de Palestina", concluy¨® Hindi.
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