Turqu¨ªa, una potencia fustrada
La crisis econ¨®mica impide a Ankara ganar influencia en Asia central y el c¨¢ucaso
De la euforia a la frustraci¨®n en menos de dos a?os. La desintegraci¨®n de la URSS despert¨® en Turqu¨ªa el sue?o de convertirse en la gran potencia regional bajo cuyo paraguas caminar¨ªan las nuevas rep¨²blicas cauc¨¢sicas y centroasi¨¢ticas. La crisis econ¨®mica y el conflicto con los separatistas kurdos imponen una cruda realidad que impide al Gobierno de Ankara ejercer una influencia efectiva sobre las cinco rep¨²blicas de habla t¨²rquica: Azerbaiy¨¢n, Kazajst¨¢n, Turkmenist¨¢n, Uzbekist¨¢n y Kirguizist¨¢n.El avance de las tropas armenias sobre Azerbaiy¨¢n ha venido a agravar el sentimiento de impotencia turco. Azerbaiy¨¢n, enclavado en el Caucaso, es el pa¨ªs cultural y ¨¦tnicamente m¨¢s cercano a Turqu¨ªa, que volc¨® todo su apoyo en el derrocado presidente Albufaz Elchib¨¦i, considerado un hombre af¨ªn a los principios seculares y democr¨¢ticos que gobiernan Ankara.
"La ca¨ªda del Alto Karabaj y otros territorios azerbaiyanos en manos armenias y el ascenso al poder del general Surat Guseinov y del antiguo dirigente comunista Heidar Al¨ªyev han sido una aut¨¦ntica bofetada para Turqu¨ªa, que no ha podido evitarlo", se?ala el columnista sefard¨ª Sami Kohen.
Las advertencias del fallecido presidente Turgut Ozal a Armenia no cristalizaron en ninguna acci¨®n concreta. En la pol¨ªtica exterior m¨¢s realista del Gobierno turco, tanto del anterior que encabezaba el ahora presidente de la rep¨²blica, Suleim¨¢n Demirel, como del actual, dirigido por Tansu Ciller, no caben aventuras militares m¨¢s all¨¢ de sus fronteras.
El mayor Ej¨¦rcito
El Ej¨¦rcito turco es, sin duda, el mayor de la zona. Cuenta con 560.300 hombres; 4.042 carros de combate; 4.235 piezas de artiller¨ªa; 766 aviones de combate y 323 helic¨®pteros artillados, entre otras armas. Pero ya sufre un fuerte des gaste en el sureste del pa¨ªs, donde tiene destacados 140.000 hombres, que se enfrentan a la guerrilla se paratista kurda, que inflige p¨¦rdidas cuantiosas tanto de personal como de equipo a las fuerzas armadas turcas. Adem¨¢s, aunque nadie teme una nueva incursi¨®n de los militares en la pol¨ªtica del pa¨ªs, despu¨¦s de tres golpes de Estado, se considera primordial la modernizaci¨®n y reestructuraci¨®n del Ej¨¦rcito."El Gobierno tiene conciencia de que ¨¦sta es una de las reformas pendientes m¨¢s urgente. La necesidad de adaptar el Ej¨¦rcito a los tiempos actuales es, tal vez, el motivo m¨¢s importante para no embaucarlo en la guerra armenioazerbaiy¨¢na", indican fuentes diplom¨¢ticas.
Basti¨®n contra el comunismo durante la guerra fr¨ªa, Turqu¨ªa pretende ser en los tiempos que corren la fortaleza contra el integrismo. Para ello, ofrece a las antiguas rep¨²blicas de la Uni¨®n Sovi¨¦tica un modelo laico, democr¨¢tico y de econom¨ªa de mercado. Carece, sin embargo, de los fondos necesarios que estas rep¨²blicas demandan para hacer efectiva la transici¨®n y la implantaci¨®n pac¨ªfica del nuevo modelo.
"No instigamos a esas rep¨²blicas a que cambien del socio ruso al turco, pero queremos ayudarles", declara el catedr¨¢tico de Relaciones Internacionales de la Universidad de Ankara Turkkaya Ataov. Fuentes diplom¨¢ticas tachan de "puro nacionalismo" sus palabras e insisten en que "Turqu¨ªa no est¨¢ en condiciones de prestar otro apoyo que no sea moral o puramente simb¨®lico".
Con una inflaci¨®n end¨¦mica cercana al 70% anual, un enorme d¨¦ficit presupuestario y una deuda exterior que, aunque controlada, se aproxima a los 58.000 millones de d¨®lares, Turqu¨ªa no est¨¢ en condiciones de desembolsar las sumas que requieren las econom¨ªas de ¨¦sas cinco rep¨²blicas para remontar el colapso en que se sumieron tras la independencia de la desaparecida Uni¨®n Sovi¨¦tica. ?iller lo tiene muy claro e insta a las econom¨ªas m¨¢s fuertes de la Comunidad Europea a convertirse en socias capitalistas de Turqu¨ªa en esos pa¨ªses.
A pesar de todo esto, no se puede negar que Ankara est¨¢ haciendo un tremendo esfuerzo por apoyar la transici¨®n de los cinco pa¨ªses hacia reg¨ªmenes democr¨¢ticos y aceptables para Occidente. De ah¨ª, la puesta en marcha de amplia pol¨ªtica cultural que pasa por la concesi¨®n de 10.000 becas anuales y un canal de televisi¨®n por sat¨¦lite que emite 24 horas al d¨ªa.
Turqu¨ªa ha dado tambi¨¦n un fuerte impulso a la cooperaci¨®n regional entre esas cinco rep¨²blicas t¨²rquicas y las del mar Negro, su ¨¢rea preferida desde los tiempos del imperio otomano y la m¨¢s ansiada de la era moderna. ?sta se canaliza a trav¨¦s de la Zona de Cooperaci¨®n Econ¨®mica del Mar Negro, que incluye a todos los Estados ribere?os de ese mar -Rusia, Ucrania, Bulgaria, Rumania, Georgia y Turqu¨ªa-, adem¨¢s de otros con intereses en la zona como Grecia, Albania, Armenia y Moldavia.
"Los intentos de Turqu¨ªa de convertirse en potencia regional no significan que haya renunciado a entrar en la Comunidad Europea, sino que, por el contrario, ofrece su influencia en la zona como una baza m¨¢s para que se le abran las puertas comunitarias", a?aden las fuentes diplom¨¢ticas.
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