Mueren en Mogadiscio dos 'cascos azules' italianos

Rossano, Visioli y Giorgio Righetti, dos j¨®venes italianos de 20 a?os que cumpl¨ªan su servicio militar y, hab¨ªan sido enviados comocascos azules en el marco de la misi¨®n de la ONU en Somalia, murieron tiroteados ayer en Mogadiscio, cuando hac¨ªan gimnasia en el puerto nuevo de la capital somal¨ª. Los soldados eran unos de los pocos de su pa¨ªs que quedaron en la ciudad para proteger la embajada tras la retirada del contingente italiano, que conclu¨ªa ayer, a zonas rurales.

Fabio Fabbri, el ministro italiano de Defensa, que anunci¨® anoche la muerte de los dos soldados como "un gran luto para el pa¨ªs y las Fuerzas Armadas", dio tambi¨¦n a entender que se mantienen las- diferencias sobre la manera en que se lleva a cabo la misi¨®n de paz de la ONU en Somalia, lo que motiv¨® la decisi¨®n de Roma de sacar sus tropas de la capital somal¨ª."Denunciamos desde un comienzo el peligro de que Mogadiscio se convirtiera en una guerrilla permanente. Debido a las divergencias de puntos de vista [con el mando de la ONU, bajo presi¨®n norteamericana], decidimos trasladarnos fuera de la ciudad", record¨® anoche Fabbri.

El ministro destac¨® tambi¨¦n que los dos j¨®venes no fueron tiroteados por ser italianos. "No cayeron en un acto de guerra, sino mientras hac¨ªan gimnasia durante un periodo de descanso", dijo Fabbri.

Visioli y Righetti corr¨ªan, en efecto, vestidos con ropa deportiva, por una zona del puerto custodiada por la polic¨ªa somal¨ª y el contingente de cascos azules de los Emiratos ?rabes, cuando fueron abatidos. Visioli cay¨® primero y muri¨® en el instante, mientras que Righetti falleci¨® camino del hospital, tras ser gravemente herido mientras trataba socorrer a su compa?ero. De acuerdo con las noticias la televisi¨®n estatal italiana, algunas dudas s¨®bre el origen de los disparos que segaron sus vidas, a¨²n cuando la hip¨®tesis predominante era que proced¨ªan de francotiradores rebeldes.

El ministro Fabbri desminti¨® formalmente que los disparos que segaron la vida de los italianos fueran realizados por un helic¨®ptero de Estados Unidos.