Imaginaci¨®n y fidelidad
Las Juventudes Musicales de Madrid iniciaron en el Auditorio Nacional su serie de conciertos extraordinarios que, por la categor¨ªa de los actuantes, gozan de gran prestigio y poder de convocatoria. Esta vez, un egregio visitante habitual "de la casa", el pianista Ivo Pogorelich, triunf¨®, sin el menor asomo de pol¨¦mica, en el Concierto n¨²mero 3 en do mayor, de Prokofiev, p¨¢gina de un virtuosismo irresistible pero obediente a la sustancialidad musical. Escrito con rara perfecci¨®n, este concierto, diez a?os anterior a los de Ravel, parece anticiparlos por la uni¨®n de sensibilidad refinada y de reflexi¨®n intelectual, as¨ª como por la perfecci¨®n de escritura.La versi¨®n de Pogorelich es, literalmente, indescriptible. Si la t¨¦cnica mec¨¢nica no tiene el menor secreto para ¨¦l, el pensamiento que la gobierna es, a la vez, imaginativo y rigurosamente fiel. La gama din¨¢mica del pianista de Belgrado no parece conocer l¨ªmites, pues es tan amplia y rica de color como variado su repertorio de ataques y bello su ideal sonoro. Estuvo Pogorelich asistido por la Sinf¨®nica Nacional de Rusia, una orquesta espl¨¦ndida, creada por su actual director, Mija¨ªl Pletnev, premio Chaikovsky de piano en 1978, compositor y orquestador de talento. Eran los d¨ªas de la glasnost y antes de que la URSS dejara de ser, Pletnev y el violinista Alexei Bruni, anticipaban la independencia musical de Rusia. El resultado fue fant¨¢stico, como pudo conocerlo Espa?a durante la primera gira de la orquesta en 1990. Por una vez, el lema de la publicidad responde a una verdad: "Una orquesta comparable a la de Leningrado".
Conciertos extraordinarios de
JJ MMOrquesta Sinf¨®nica Nacional de Rusia. Director: M. Pletnev. Pianista: 1. Pogorelich. Obras de Chaikovsky, Prokofiev y Rimsky. Auditorio Nacional. Madrid, 7 de octubre.
Por su parte, el talento de Pletnev es evidente y si los vientos le son favorables como hasta ahora, podr¨ªa convertirse en el Barenboim del Este. La elegancia de su criterio, la finura de su o¨ªdo, la renuncia a la menor demagogia expresiva o din¨¢mica se conjugaron en versiones nada tradicionales pero limpias, justas e incisivas del aludido concierto y de otras dos p¨¢ginas ?c¨®nicas de la m¨²sica rusa: Romeo y Julieta, de Chaikovski -la acci¨®n dram¨¢tica objetivada en sinfonismo- y la feria colorista de Sherezade, de Rimsky, en una visi¨®n m¨¢s cercana a la traducci¨®n espa?ola de Cansinos Assens que a la de Blasco Ib¨¢?ez. El ¨¦xito tuvo matices de excepci¨®n y las danzas de Dvorak y el Vals de las flores remataron una jornada de gran elevaci¨®n musical.
Isabel Falabella, presidenta de Juventudes, y sus patrocinadores -Banco Santander de Negocios y El Corte Ingl¨¦s- pueden estar satisfechos. Adem¨¢s, la bolsa de becas de las JJ MM obtuvo una importante recaudaci¨®n, con lo que el dinero que da la m¨²sica vuelve a ella. No siempre sucede.
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