Gonz¨¢lez se conforma con la Oficina de Marcas

I. CEMBRERO ENVIADO ESPECIALEl presidente espa?ol, Felipe Gonz¨¢lez, no gan¨® por goleada como en anteriores cumbre comunitarias. Tuvo que renunciar a las dos sedes de nuevas instituciones comunitarias que esperaba traer a Espa?a, la Agencia e Evaluaci¨®n de los Medicamentos y la Agencia de Medio Ambiente, pero obtuvo a cambio un lote de consolaci¨®n: la Oficina de Marcas, rebautizada Oficina de Armonizaci¨®n del Mercado Interior, y la Oficina de Seguridad e Higiene en el Trabajo.

El jefe del Gobierno rehus¨® precisar en qu¨¦ ciudad espa?ola se instalar¨ªan ambas, aunque Madrid present¨® hace seis a?os su candidatura para acoger la Oficina de Marcas. En contra de lo que esperaba la diplomacia espa?ola, el primer ministro belga y presidente de turno del Consejo Europeo, Jean Luc Dehaene, no modific¨® su propuesta. Puso sobre el tapete de la cumbre extraordinaria de jefes de Gobierno de la CE un reparto que otorgaba al Reino Unido la Agencia de Medicamentos y a Dinamarca la de Medio Ambiente mientras Espa?a recib¨ªa la Oficina de Marcas. Gonz¨¢lez dio finalmente su brazo a torcer no sin antes haber obtenido algunas compensaciones.La discusi¨®n fue agria o, dicho en el lenguaje del jefe del Ejecutivo espa?ol, 'Tranca y abierta". Gonz¨¢lez se enfrent¨® especialmente con el primer ministro brit¨¢nico, John Major, cuando se quej¨® de que los pa¨ªses que m¨¢s trabas ponen al proceso de integraci¨®n europea, como es el caso del Reino Unido, resultan despu¨¦s premiados en la atribuci¨®n de sedes. Gonz¨¢lez se pregunt¨® incluso si Espa?a no saldr¨ªa beneficiada si cambiase de actitud.

Tambi¨¦n argument¨® Gonz¨¢lez que Espa?a era el ¨²nico gran pa¨ªs de la CE que carec¨ªa de sedes comunitarias mientras el Reino Unido contaba ya en Londres con el Banco Europeo de Reconstrucci¨®n y Desarrollo. Su hom¨®logo brit¨¢nico le respondi¨® que estaba dispuesto a renunciar al banco y a la Agencia de Medicamentos si recib¨ªa a cambio el Instituto Monetario Europeo (IME).

Para hacer ceder a Gonz¨¢lez, Dehaene tuvo que ofrecerle una segunda sede de car¨¢cter menor, la de Seguridad e Higiene en el Trabajo. Ampli¨® las competencias de marcas hasta incluir el dise?o y la moda. Logr¨¦, por ¨²ltimo, levantar todas las hipotecas que reca¨ªan sobre la Oficina de Marcas: El desacuerdo sobre las lenguas de trabajo que imped¨ªan redactar el reglamento que la regir¨¢ y el derecho de Luxemburgo a acoger a todas las instituciones con car¨¢cter jur¨ªdico. La Oficina de Marcas cuenta con un ¨®rgano de arbitraje.

Por primera vez una instituci¨®n comunitaria no tendr¨¢ nueve idiomas de trabajo, sino cinco. En la Oficina de Marcas las lenguas oficiales ser¨¢n, adem¨¢s del ingl¨¦s y del franc¨¦s, el alem¨¢n, el italiano y el espa?ol.

Gonz¨¢lez aparent¨® estar contento por la decisi¨®n. Reconoci¨® que la Agencia de Medio Ambiente era la m¨¢s atractiva pol¨ªticamente, pero insisti¨® en que la de Marcas, una vez despejadas las incertidumbres, pod¨ªa ser la m¨¢s rentable desde un punto de vista econ¨®mico porque atraer¨¢ a empresas y bufetes de abogados y ser¨¢ la que contar¨¢ con el mayor n¨²mero de funcionarios. Para Espa?a, a?adi¨® despu¨¦s refiri¨¦ndose a la Oficina de Seguridad en el Trabajo, "es interesante una agencia con dimensi¨®n social'.

Ante la prensa Major hizo el razonamiento opuesto. Para el primer ministro brit¨¢nico, la Agencia de Medicamentos, que colocar¨¢ en Londres, "contribuir¨¢ a que Gran Breta?a mantenga su posici¨®n de liderazgo precisamente en materia de alta tecnolog¨ªa y de industria manufacturera con un fuerte componente cient¨ªfico que el Reino Unido necesita". Supondr¨¢ un espaldarazo a la industria farmac¨¦utica brit¨¢nica.

Ciudades a decidir

A diferencia de otros jefes de Gobierno, que indicaron d¨®nde colocar¨ªan la sede reci¨¦n obtenida, Gonz¨¢lez se abstuvo de hacerlo porque, explic¨®, prefer¨ªa conservar "la libertad de decidir de acuerdo con lo que el Gobierno considere m¨¢s interesante para el pa¨ªs". Mencion¨® la posibilidad de dividir alguna instituci¨®n para crear as¨ª una subsede tem¨¢tica.

En c¨ªrculos diplom¨¢ticos de la delegaci¨®n espa?ola se especulaba con que las dos sedes ser¨ªan divididas entre Madrid, Barcelona y, acaso Sevilla, en la que ya se pens¨® en su d¨ªa colocar parte de la Agencia de Medio Ambiente. Se dar¨ªa as¨ª un poco de vida a Cartuja 93, el parque tecnol¨®gico de la capital andaluza.