Dos testigos afirman que Juan Guerra estaba detr¨¢s de la empresa Comasa

Las acusaciones particulares en el tercer juicio contra Juan Guerra y dos de sus socios incrementaron ayer las penas solicitadas en sus conclusiones iniciales. El abogado del Estado elev¨® al grado de delito consumado el que, en su opini¨®n, cometieron contra Hacienda Juan Guerra, L¨®pez Mart¨ªn y Garrido L¨®pez al obtener una subvenci¨®n falseando las condiciones requeridas, y pidi¨® para ellos la pena m¨ªnima de prisi¨®n menor. Dos testigos vincularon directamente a Guerra con la inmobiliaria que proyectaba construir un hotel en Sevilla.

Izquierda Unida y el Partido Andalucista retiraron los cargos por maquinaci¨®n para alterar el precio de las cosas, pero imputaron el. delito contra Hacienda a los tres acusados y reclamaron penas de dos a?os y cuatro meses de prisi¨®n menor. Por su parte, el fiscal Alfredo Flores y las defensas de los tres acusados mantuvieron la petici¨®n de absoluci¨®n, si bien el letrado de L¨®pez Mart¨ªn solicit¨® a la. juez que en la sentencia se aprecie "la temeridad de las acusaciones", que estima "infundadas y carentes de prueba".La ¨²ltima sesi¨®n del tercer juicio contra Juan Guerra se celebrar¨¢ hoy. En la de ayer, dos testigos afirmaron que tras el proyecto de construcci¨®n en Sevilla de un hotel de lujo por parte de la sociedad Construcci¨®n Modular Andaluza (Comasa) estaba Juan Guerra, aunque no figurara como accionista.

El primero en testificar fue Jer¨®nimo Garrote Nogu¨¦s, un licenciado en empresariales, al que Comasa y Juan Guerra, seg¨²n su declaraci¨®n, le deben dinero por la realizaci¨®n de un estudio de mercado sobre el hotel destinado a conseguir la subvenci¨®n oficial; 250.000 pesetas de un viaje de Jos¨¦ Garrido a Par¨ªs que ¨¦l pag¨®, y un mill¨®n y medio de un pr¨¦stamo que aval¨® a Guerra y que le reclam¨® el banco tras su impago.

Garrote dijo que visit¨® a Juan Guerra en su despacho de la Delegaci¨®n del Gobierno en Sevilla para reclamarle la deuda de Comasa "porque ¨¦l era el eslab¨®n m¨¢s alto". A?adi¨® Garrote que para la toma de decisiones importantes, Garrido y L¨®pez Mart¨ªn consultaban con Juan Guerra y se reun¨ªan con ¨¦l. "Mi ¨²nico inter¨¦s", concluy¨®, "es que se me quite la cara de tonto que se me ha quedado".

El otro testigo que declar¨® contra los acusados fue V¨ªctor Renedo, quien dijo que en Madrid se ofreci¨® "el hotel de Juan Guerra en Sevilla en al menos 20 oficinas de inmobiliarias de La Castellana", por 800 millones de pesetas. Renedo -quien jur¨® su declaraci¨®n "por Dios y por mi honor"-, dijo que el hermano mayor de Juan Guerra, Antonio, y un asesor de ¨¦ste, Francisco Medina Vadillo, estuvieron en el Hotel WeIlington de Madrid siete d¨ªas ofreciendo la venta "del hotel de mi hermano Juan".