Corea del Norte compra a Rusia 40 submarinos de la antigua flota sovi¨¦tica del Pac¨ªfico

El r¨¦gimen comunista norcoreano de Kim Il Sung ha comprado a Rusia, en el m¨¢s absoluto secreto, 40 submarinos de la vieja flota sovi¨¦tica del Pac¨ªfico norte, seg¨²n han detectado funcionarios de Estados Unidos y Corea del Sur, encargados de vigilar los movimientos militares en el, Pacf¨ªco norte. La operaci¨®n, realizada a trav¨¦s de una empresa japonesa, se ha llevado a cabo en un momento especialmente, delicado, tras la negativa de Pyongyang a que los inspectores del Organismo Internacional de la Energ¨ªa At¨®mica revisen sus instalaciones de Yongbyon.

La amenaza de que el Consejo de Seguridad de la ONU ordene toda una serie de sanciones econ¨®micas contra Corea del Norte ha llevado a ese r¨¦gimen estalinista a entablar negociaciones con Washington. De ah¨ª el tremendo malestar que ha supuesto esta venta.Ariyoshi Shibata, director de la Toen Trading Company, la intermediaria, declar¨® que los submarinos fueron trasladados "intactos" desde la base rusa de VIadivostok hasta la norcoreana de Najin, sita en el mar de Jap¨®n. Seg¨²n Shibata, el Gobierno de Kim Il Sung pretende simplemente aprovechar la chatarra de los barcos, ya que la mayor¨ªa son viejos modelos de motor de gas¨®leo, de entre 20 y 30 a?os.

Sin embargo, fuentes de la Marina norteamericana indican que, posiblemente, Pyongyang haya comprado esos submarinos para hacerse con piezas de recambio para los suyos. S¨®lo la mitad de la flota de Corea del Norte es operativa, a?aden las fuentes, que cifran en 24 su n¨²mero de submarinos, casi todos peque?os y de fabricaci¨®n china. Adem¨¢s, cuenta con otros 48 sumergibles diminutos dise?ados para deslizarse sin ser detectados por los puertos. surcorcanos, en caso de nuevas hostilidades.

Tanto Estados Unidos como Corea del Sur han expresado a Rusia su profundo malestar por la venta. El Ministerio de Exteriores surcoreano exigi¨® a Mosc¨² una explicaci¨®n, y el Gobierno de Bor¨ªs Yeltsin se limit¨® a quitar importancia al asunto indicando que eran barcos para chatarra.

La explicaci¨®n no satisfizo y Washington ha ordenado a su Embajada en Mosc¨² que investigue todo lo relativo a la operaci¨®n. Cuando hace una semana se descubri¨® el movimiento de los submarinos, el Gobierno ruso se?al?> que se trataba de la venta de 10 unidades. El Ejecutivo japon¨¦s, por su parte, indic¨® que no existe ninguna medida legal para impedir la transacci¨®n.

La compra, cuyo monto se calcula en unos ocho millones de d¨®lares (145.000 millones de pesetas), muestra, de un lado, que la flota rusa del Pac¨ªfico campa por sus respetos y, de otro, que los militares de ¨¦sta y el r¨¦gimen de Kim Il Sung mantienen buenas conexiones.