La capitulacion de la imagen
Existen varios Garc¨ªa M¨¢rquez. El m¨¢s conocido es el Nobel colombiano, demiurgo que dio a luz la magia portentosa de Macondo. Luego est¨¢ el amigo de Fidel Castro, el editor del diario colombiano El Mundo, el director del informativo de la cadena de televisi¨®n QAP... Pero existe, tambi¨¦n, el Garc¨ªa M¨¢rquez del s¨¦ptimo arte, fundador en La Habana de la Fundaci¨®n de Nuevo Cine Latinoamericano e impulsor de varios proyectos para el cine y la televisi¨®n, En 1965 escribi¨® El acoso, un gui¨®n que no pudo llevarse a la pantalla. En 1989, su amor por el cine y por su propia obra le llevaron a descartar la adaptaci¨®n de su obra cumbre, Cien a?os de soledad. Las razones aducidas fueron contundentes: "Los lectores se imaginan a los personajes como quieren, y si la historia fuese reflejada en la pantalla grande, destruir¨ªa esa ilusi¨®n, ese margen de creatividad".La serie Me alquilo para so?ar, que se estrena hoy en La 2, cae de lleno en esa trampa. El brasile?o Ruy Guerra, que hab¨ªa dirigido el episodio F¨¢bula de la bella palomera, de la serie Amores dif¨ªciles, tambi¨¦n de Garc¨ªa M¨¢rquez, capitula ante la fuerza de la prosa magistral. La frialdad de la actriz Hanna Schygulla, su protagonista, contrasta con la calidez de la letra original. La belleza de una fotograf¨ªa de claroscuros y su excelente dise?o de producci¨®n no pueden disimular la labor de unos actores perdidos en la piel de unos personajes err¨¢ticos y fantasmag¨®ricos. La c¨¢mara, como ya le ocurriera a Francesco Rosi en la pat¨¦tica Cr¨®nica de una muerte anunciada, parece incapaz de reflejar el lado fant¨¢stico y on¨ªrico de la obra. Toda la sutileza y la magia de Gabo se transforman en pantalla en un trazo demasiado lineal. El cine y la televisi¨®n no conocen todav¨ªa un verdadero Garc¨ªa M¨¢rquez.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.