"No lograr¨¢n desestabilizarnos"
D¨ªas atr¨¢s, la prensa mexicana recog¨ªa una fotograf¨ªa de Ernesto Zedillo lustr¨¢ndole el calzado a un joven en Guadalajara. El detalle formaba parte de la campa?a electoral, pero las dotes con las que manejaba el cepillo, dejaban entrever que al candidato se le daba bien la profesi¨®n. Y es que Ernesto Zedillo, doctorado en Econom¨ªa por la Universidad de Yale (EEE UU), se echaba a la calle de joven como bolero (limpiabotas) para poder ayudarse en sus estudios.La entrevista con EL PA?S se desarrolla en la capital mexicana en la sede del Partido Revolucionario Institucional (PRI), la organizaci¨®n que gobierna M¨¦xico desde hace 65 a?os. Todav¨ªa en este edificio, lo m¨¢s parecido a un ministerio, lucen fotograf¨ªas del malogrado Luis Donaldo Colosio, la mayor¨ªa acompa?adas de crespones negros.
Zedillo, pese a la frialdad del escenario, convierte en informal el encuentro confesando su devoci¨®n hacia el rock y revel¨¢ndole a este corresponsal los numerosos amigos que, tanto en la pol¨ªtica como en el mundo de los negocios, posee en Espa?a. Identificado con el presidente Carlos Salinas de Gortari, el hombre que inici¨® la modernizaci¨®n de M¨¦xico, el candidato del PRI a las elecciones del 21 de agosto es muy taxativo al decir que va a ganar. Y respeta, aunque no le preocupa, a su m¨¢s inmediato contrincante: el ya hist¨®rico l¨ªder opositor Cuauht¨¦moc C¨¢rdenas.Pregunta. Desde el mes de enero est¨¢n pasando muchas cosas en M¨¦xico: guerrilla, secuestros y un crimen con tantos interrogantes como el que acab¨® con la vida de su amigo Colosio.
Respuesta. Es cierto que M¨¦xico est¨¢ conociendo hechos hasta ahora in¨¦ditos y que tienen un rasgo en com¨²n: que no sabemos qui¨¦n est¨¢ detr¨¢s de cada cosa. Esto nos preocupa mucho, pero yo tengo la enorme confianza de que, en la medida en que pase el tiempo, estos he chos se van a ir aclarando y, por consiguiente, la gente volver¨¢ a recuperar la confianza. Pese a ello, la preocupaci¨®n no ha impedido que el pa¨ªs siga su marcha.
P. Aunque cada uno de estos sucesos aparenta ser de naturaleza distinta, parece que el objetivo final es el mismo: la desestabilizaci¨®n del Gobierno.
R. Yo no puedo asegurar que haya una conjura, pero la sensaci¨®n que muchos mexicanos tenemos es que hay alguien que tiene como prop¨®sito desestabilizar el pa¨ªs. Yo puedo asegurar en este momento que no van a lograr desestabilizarnos. Hechos aislados no pueden afectar a un pa¨ªs de la fortaleza de M¨¦xico.
P. Usted pertenece a la generaci¨®n del cambio, la que inici¨® la transformaci¨®n de M¨¦xico, ?esto va a seguir si llega a ser presidente?
R. El pa¨ªs, por sus problemas y circunstancias, requiere seguir avanzando en su transformaci¨®n. Ya he dicho que mi Gobierno mezclar¨¢ la continuidad en ciertos aspectos, el fortalecimiento y la renovaci¨®n en otros, y el cambio donde sea necesario. No podemos utilizar un solo adjetivo para caracterizar cu¨¢l ser¨¢ la intenci¨®n pol¨ªtica de mi futuro Gobierno. Lo que s¨ª est¨¢ claro es que pondremos especial ¨¦nfasis en la estabilidad macroecon¨®mica y fortaleceremos la pol¨ªtica social para hacerla m¨¢s ambiciosa. Tengo previsto tambi¨¦n hacer importantes reformas en el ¨¢mbito de la justicia y la seguridad del pa¨ªs.
P. ?No cree que existe cierto contraste entre un partido conceptualmente viejo como el PRI y ustedes, los tecn¨®cratas, que se han enfrentado a la modernizaci¨®n de M¨¦xico?
R. El PRI tiene una enorme capacidad de adaptaci¨®n, y uno de mis mensajes hacia dentro ha sido el de entender al partido como una organizaci¨®n que est¨¢ ya en plena competencia con el resto de las fuerzas pol¨ªticas del pa¨ªs. Han cambiado ya los tiempos en los que el PRI dominaba la vida pol¨ªtica del pa¨ªs y obten¨ªa el triunfo sin hacer grandes esfuerzos. Ahora nos toca intentarlo pulso a pulso y d¨ªa a d¨ªa, porque M¨¦xico es m¨¢s participativo, m¨¢s diverso y m¨¢s exigente.
P. ?Quiere decir que la reforma que el PRI necesita se va a hacer a corto plazo?
R. La reforma debe ser constante. Estoy seguro de que, conforme vayan evolucionando las circunstancias, el PRI sabr¨¢ renovarse para constituirse en la vanguardia del avance democr¨¢tico de M¨¦xico.
P. Usted ahora y antes Colosio han prometido elecciones limpias. ?Qu¨¦ van a hacer para que esto suceda?
R. Muchas cosas. En primer lugar, estamos impulsando a nuestro partido para que construya consensos para una mejor legislaci¨®n electoral, y en segundo, hemos exigido acciones muy concretas, como la auditor¨ªa externa del padr¨®n. Estamos trabajando con el resto de los partidos para que no haya duda sobre los funcionarios electorales. M¨¦xico va a tener una organizaci¨®n electoral de car¨¢cter institucional, en la que el Partido Revolucionario Institucional ser¨¢ una voz m¨¢s, y tambi¨¦n un padr¨®n electoral ejemplar a nivel mundial. Los electores mexicanos, por otro lado, acudir¨¢n por primera vez a unos comicios federales con una credencial donde estar¨¢n identificados por su fotograf¨ªa.
P. Hay un problema de credibilidad en M¨¦xico: ?qu¨¦ puede ocurrir si usted gana las elecciones y un sector importante de la poblaci¨®n no se lo cree?
R. La credibilidad hay que ir construy¨¦ndola progresivamente. No debemos esperar al 21 de agosto para certificar lo que ya ocurri¨® y que estoy seguro de que ser¨¢ el voto mayoritario del electorado hacia nosotros. He alentado p¨²blicamente a que medios de comunicaci¨®n y organizaciones independientes hagan encuestas que vayan reflejando en estos meses las preferencias electorales de los mexicanos para que el d¨ªa de los comicios la gente sepa qu¨¦ hay todo un trabajo y toda una acumulaci¨®n progresiva de preferencias a mi favor.
P. El presidente Salinas ha dicho muchas veces que M¨¦xico ha cambiado ya de mentalidad, pero entre la poblaci¨®n se nota ¨²ltimamente la falta de ilusiones.
R. Tenemos que destacar distintos momentos en la historia reciente de nuestro pa¨ªs. Con el presidente Salinas ha habido una gran renovaci¨®n nacional que trajo consigo un renacimiento de la esperanza en los mexicanos porque se solucionaron los graves problemas econ¨®micos del pa¨ªs. Ahora M¨¦xico vive un momento de preocupaci¨®n que tiene que ver con los hechos violentos que han ocurrido en estos cuatro meses y que han estado totalmente fuera del control del Gobierno. Si algo se puede distinguir realmente en este momento es que la gente quiere la paz social y la unidad de M¨¦xico. Esto lo garantiza el PRI.
P. Dicen que ustedes, los hombres de Salinas, se dedicaron tanto a la macroeconom¨ªa que se olvidaron de que en M¨¦xico hay 16 millones de personas en estado de extrema pobreza.
R. Eso no es cierto. Hace seis anos el problema m¨¢s grave del pa¨ªs era el riesgo de la hiperinflaci¨®n. Esto ¨²ltimo hubiera causado la contracci¨®n de la econom¨ªa, la destrucci¨®n del empleo y, sobre todo, hubiera afectado muy negativamente a los pobres. El primer problema era ¨¦se: acabar con la deuda externa y con el descontrol de las finanzas p¨²blicas. Salinas, cuando impuls¨® su pol¨ªtica de estabilizaci¨®n y modernizaci¨®n econ¨®mica, tambi¨¦n estableci¨® una pol¨ªtica social sumamente ambiciosa. Eso me consta porque, como secretario de Programaci¨®n y Presupuesto entonces, me toc¨® equilibrar el presupuesto nacional y aumentar al mismo tiempo, al ciento por ciento y en t¨¦rminos reales, el gasto social.
P. ?Le teme a Cuauht¨¦moc C¨¢rdenas?
R. En absoluto. Estoy muy confiado en que no s¨®lo le voy a vencer a ¨¦l, sino al resto de los candidatos. Todos los aspirantes presidenciales me merecen el mayor respeto, pero sinceramente creo que la decisi¨®n mayoritaria del pueblo de M¨¦xico ser¨¢ a mi favor.
P. ?Y si no le reconoce la victoria?
R. Ese problema no me compete a m¨ª. El problema de la elecci¨®n es que sea limpia, que cada voto cuente y que cuente bien. Ser¨¢ el pueblo el que d¨¦ el veredicto. De todas formas, tengo confianza en que tanto C¨¢rdenas como los dem¨¢s candidatos se apegar¨¢n a la ley.
P. M¨¦xico es hoy d¨ªa un feliz socio comercial de Canad¨¢ y Estados Unidos. ?No cree que esta nueva relaci¨®n puede acarrear alg¨²n que otro perjuicio cultural?
R. Las influencias culturales rec¨ªprocas que se dan entre los pa¨ªses es un fen¨®meno inherente a las comunicaciones. El Tratado de Libre Comercio (TLC) de Am¨¦rica del Norte no va a acentuar esa circunstancia. Como dir¨ªa Carlos Fuentes, son los norteamericanos los que deber¨ªan preocuparse de que la influencia mexicana no sea demasiado grande.
P. En los ¨²ltimos a?os las relaciones entre Espa?a y M¨¦xico han sido exquisitas. ?Qu¨¦ proyectos tiene de llegar a la presidencia de la Rep¨²blica?
R. Espa?a es un pa¨ªs muy especial para M¨¦xico. Espa?oles y mexicanos mantenemos una gran identificaci¨®n. Los miembros de mi generaci¨®n vemos con gran simpat¨ªa el que nuestras relaciones exteriores, adem¨¢s de atender a Norteam¨¦rica, se hayan ido estrechando cada vez m¨¢s con Espa?a. Por eso me propongo, de ser presidente,. no s¨®lo estrecharlas, sino un mayor esfuerzo para fortalecerlas.
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