Los familiares de los seis catolicos asesinados en, el Uster piden que no haya actos de venganza

La peque?a localidad de Loughinisland, en Irlanda del Norte, y el resto de la provincia intentaban reconciliarse ayer con la tr¨¢gica experiencia sufrida la noche anterior. Una tranquila aldea, habitada predominantemente por cat¨®licos, recibi¨® una visita inesperada y fatal a ¨²ltima hora del s¨¢bado, mientras se disputaba el partido Italia-Irlanda: los forasteros, dos activistas norirlandeses de la Fuerza de Voluntarios del Ulster (UVF, organizaci¨®n paramilitar unionista), dejaron tras s¨ª un saldo de seis muertos y 10 heridos en pocos minutos.Ayer, los familiares y amigos de las v¨ªctimas, una de ellas en estado muy cr¨ªtico, pidieron que no haya venganza. Y el ministro brit¨¢nico de Irlanda del Norte, Patrick Mayhew, insisti¨® en que los autores de la mortandad "no conseguir¨¢n ning¨²n objetivo pol¨ªtico ni ninguna concesi¨®n".El primer ministro brit¨¢nico, John Major, habl¨® de "otro acto diab¨®lico de seres viles" para referirse al ataque contra O'Toole's, el ¨²nico pub de Loughinisland. All¨ª estaban concentradas cerca de 25 personas, tanto cat¨®licos como protestantes, seg¨²n testigos presenciales. El equipo de Irlanda ya hab¨ªa metido su primer gol del mundial de f¨²tbol y los parroquianos segu¨ªan con los nervios a flor de piel la retransmisi¨®n de la segunda parte del encuentro contra Italia.Los exclamaciones de alegr¨ªa por la ansiada victoria irlandesa pronto se tornaron en gritos de terror y sollozos. Cuerpos sin vida cayeron unos contra otros por el ataque de los dos pistoleros del UVF, que dispararon a placer contra la clientela de O'Toole's. Seg¨²n un portavoz del Royal Ulster Constabulary (RUC, polic¨ªa local) fue una casualidad que tan s¨®lo murieran cat¨®licos.

En un comunicado reivindicando el atentado, el UVF aleg¨® que la noche del s¨¢bado un grupo de republicanos irlandeses celebraba una reuni¨®n en el bar de Loughinisland. El portavoz del RUC rechaz¨® la sugeriencia y calific¨® el atentado como sectario, es decir, como una revancha de los paramilitares unionistas contra civiles cat¨®licos. "Es un ejemplo m¨¢s de la escalada de asesinatos por venganza", denunci¨® ayer un responsable del RUC.

Los atentados sectarios se han desatado en Irlanda del Norte a una velocidad vertiginosa. En los ¨²ltimos tres d¨ªas han muerto un total de 10 personas en la provincia.

El jueves, activistas del grupo republicano, Ej¨¦rcito Irland¨¦s de Liberaci¨®n Nacional, (INLA) mataron a dos protestantes e hirieron a otros dos en la calle Shankill, de Belfast, un ¨¢rea dominada por los unionistas. Desde entonces, los observadores y la polic¨ªa tem¨ªan una respuesta brutal e indiscriminada por este atentado en el que muri¨® un dirigente unionista. La noche del s¨¢bado, el UVF insisti¨® en su comunicado que "mientras el INLA contin¨²e atacando a los unionistas, seguir¨¢n pagando su precio".

Sin embargo, en el atentado de Loughinisland murieron ciudadanos que seg¨²n los vecinos del pueblo, nada tienen que ver con la actividad pol¨ªtica. La elecci¨®n del blanco estaba destinada a causar el m¨¢ximo da?o entre los cat¨®licos. Nadie dudaba de que el local estar¨ªa abarrotado durante la retransmisi¨®n del Italia-Irlanda.

Imposible fallar

El partido garantiz¨® a los paramilitares unionistas un golpe que dif¨ªcilmente podr¨ªa fallar. Porque, adem¨¢s, las fuerzas de seguridad apenas patrullan esta rec¨®ndita aldea, que nunca en su historia ha sufrido de un ataque semejante, pues, como dijo un polic¨ªa, "aqu¨ª no existen tensiones entre cat¨®licos y protestantes".La polic¨ªa insiste en la dificultad de proteger a la poblaci¨®n norilandesa en un momento de gran auge en los atentados contra civiles. No es la primera vez que se produce una matanza en un pub frecuentado por cat¨®licos. En octubre hubo un incidente parecido en Derry, cuando paramilitares unionistas dispararon contra quienes celebraban la fiesta de Halloween. Los unionistas dejaron tras de s¨ª un saldo de siete muertos y 10 heridos. Tal ataque fue una represalia por el atentado del IRA en Belfast, que cost¨® la vida a diez personas, nueve protestantes y un miembro del propio IRA.