El inter¨¦s por el f¨²tbol aumenta un 40%
Madrid, Valencia, Compostela, Atl¨¦tico y Betis, los equipos que suman m¨¢s abonados
Laudrup y Redondo superan a Tren Valencia y Simeone, pero no logran acabar con Stoichkov y Romario. Las estrellas son las que llenan los estadios. Una buena pol¨ªtica de fichajes es el primer requisito para que la econom¨ªa de un club funcione. El inter¨¦s por el f¨²tbol ha aumentado este a?o un 40%. El Madrid ha aumentado la recaudaci¨®n por abonos de 900 millones a 1.500. El Atl¨¦tico ha recuperado cerca de 1.000 decepcionados. Y el Bar?a mantiene un n¨²mero superior a los 100.000. Los reci¨¦n ascendidos Betis, Compostela y Espa?ol vuelven a recuperar cifras de ensue?o.
La mejor manera de solucionar los problemas econ¨®micos es gastar. ?sa ha sido la receta aplicada por el Madrid para salir de la crisis. Los 400 millones de Laudrup y los 525 de Redondo ser¨¢n ampliamente compensados con la venta de abonos de esta temporada. El Madrid esperaba una reacci¨®n de su afici¨®n, pero no cre¨ªa que iba a ser tan espectacular. El presupuesto del club ha quedado sobradamente superado: 1. 500 millones y no 900, se recaudar¨¢n por este concepto. La excelente pretemporada del Madrid es la causa del ¨¦xito. "En julio con el fichaje de Valdano hubo una primera animaci¨®n, pero ahora con el equipo en marcha las cifras se est¨¢n disparando", se?alan los responsables econ¨®micos del club.Al Madrid no le ha hecho falta la publicidad. La del Valencia y el Atl¨¦tico la han realizado sus singulares presidentes. "Que paguen los ricos" ha sido la conclusi¨®n final de Francisco Roig, que ha aumentado un 20% el precio de estas localidades, pero ha construido un palco VIP de 350 localidades a 400.000 pesetas cada una. Mestalla tiene una capacidad para 47.000 espectadores, ahora cada jornada s¨®lo habr¨¢ disponibles 9.000 localidades.
?Unos 22.000 sevillistas contra 25.000 b¨¦ticos? -las cifras proceden de los dos clubes-. Lo cierto es que la Liga ha hecho mella en la moral de las directivas del Sevilla y del Betis. Los b¨¦ticos aseguran -a siete d¨ªas de su presentaci¨®n oficial en el Villamar¨ªn- que de los 18.000 abonados de la pasada temporada se han convertido en 20.000, y que esperan otros 5.000 m¨¢s. Los sevillistas se temen lo peor tras la goleada del s¨¢bado y que las previsiones de 22.000 abonos se queden en 20.000. Al ¨¦xito del reci¨¦n ascendido ha contribuido una campa?a destinada a los mayores de 65 a?os. Si cobran menos de 95.000 pesetas mensuales tendr¨¢n una rebaja.
La solidez del Barcelona alcanza al n¨²mero de socios. La cifra m¨ªtica de los 100.000 se mantiene con creces. Ahora son 102.500, una cifra pr¨¢cticamente id¨¦ntica a la registrada en septiembre del a?o pasado, 103.027, temporada en la que el club azulgrana rompi¨® la tendencia a la baja registrada desde 1986, cuando alcanz¨® el punto m¨¢s alto con 108.928.
El Espa?ol se ha gastado 100 millones en buscar el apoyo de su afici¨®n. Son 16.000 los socios y quieren convertirse en 20.000. El mensaje de la campa?a es claro: "Vamos a jugar al f¨²tbol. ?Te lo vas a perder?". El s¨ªmbolo utilizado como reclamo es un periquito que demuestra su dominio del bal¨®n y que realiza una espectacular chilena antes de pedir: "Hazte socio. No te lo pierdas". Se ha previsto la emisi¨®n de 150 anuncios televisivos de 25 segundos de duraci¨®n cada uno, la inserci¨®n de 200 cu?as radiof¨®nicas, la instalaci¨®n de 250 vallas publicitarias y numerosas inserciones publicitarias en prensa. Pero, al final como siempre lo importante son los resultados. "Si puntuamos en Valladolid, no me extra?ar¨ªa que antes del derby contra el Barcelona tuvi¨¦semos 2.000 nuevos socios", dice Francisco Perell¨®, presidente del Espa?ol. Ni las idas y venidas de Bebeto ni la lesi¨®n de Mauro Silva ha echado para atr¨¢s a los incondicionales de Riazor. En medio de estas circunstancias aparentemente desfavorables, el Deportivo ha ganado 1.500 abonados hasta situarse en 24.000. Ahora uno de cada 10 coru?eses tiene un asiento reservado para ver a su equipo. S¨®lo 5.000 podr¨¢n encontrar una localidad por partido.
El tercer equipo gallego, el reci¨¦n ascendido Compostela, es, como en casi todo, un caso aparte. Cuando se transform¨® en sociedad an¨®nima, la respuesta de la ciudad fue tan ap¨¢tica que el Ayuntamiento compr¨® la mayor¨ªa de las acciones para evitar la liquidaci¨®n. Su presidente, Jos¨¦ Mar¨ªa Caneda, un peque?o industrial propietario de un taller mec¨¢nico, apenas tiene intereses econ¨®micos en la entidad y se limita a representar a la mayor¨ªa del accionariado p¨²blico. El ascenso ha permitido doblar el n¨²mero de abonados hasta situarlo en 7.000, pero los dirigentes del club gallego temen que el estadio de San L¨¢zaro -para 15.000 espectadores- se llenar¨¢ pocos domingos.
El domingo ni siquiera el reclamo hist¨®rico del deb¨² del equipo en Primera reuni¨® a m¨¢s de 10.000 personas en San L¨¢zaro. Los aficionados se quejan de que las entradas son caras -3.000 pesetas la m¨¢s barata-, pero Caneda insiste en que con un presupuesto de 550 millones o se arrima el hombro o no se sobrevive. El presidente trata de presionar a la afici¨®n para que aumente el n¨²mero de abonados con la misma estrategia que emple¨® antes su colega del Deportivo, Augusto C¨¦sar Lendoiro: poniendo por las nubes el precio de los billetes sueltos. Caneda no quiere espectadores ef¨ªmeros. Los que no tengan abono pagar¨¢n entre 10.000 y 15.000 pesetas por ver a los grandes.
El rechazo de la afici¨®n tambi¨¦n se deja notar. En Albacete, la contrataci¨®n de Luis Su¨¢rez provoc¨® la deserci¨®n de 500 abonados.
La llamada de Gil
Desempolv¨® la agenda de socios y se pulo a trabajar. Jes¨²s Gil quiere recuperar a los atl¨¦ticos desencantados. Ellos son su objetivo inicial para ganar adeptos.Su idea es convencer a los aficionados para que vuelvan a contribuir al mantenimiento del club. El mensaje deb¨ªa ser personal. Para ello nada mejor que una llamada telef¨®nica. Una empresa especializada se puso a trabajar siguiendo los consejos de Gil. Como el presidente no pod¨ªa atender tantas gestiones, redact¨® un gui¨®n en el que explicaba todo lo que los interesados querr¨ªan saber: el porqu¨¦ de los fichajes y del entrenador. Pero, m¨¢s que preguntas los mensajeros de Gil se han encontrado con quejas.
Los abonados desencantados no est¨¢n fundamentalmente de acuerdo con la gesti¨®n de Gil, les importan menos los fichajes. El mensaje a los opositores era claro: "Lo importante no es qui¨¦n sea el presidente, sino las necesidades del club". La campa?a ha repescado a 1.000 desertores.
Seg¨²n las cifras facilitadas por Clemente Villaverde, gerente del club, el n¨²mero de abonos esta temporada ha pasado de 15.200 a 17.700, a pesar del incremento de las tarifas: 30.000 la m¨¢s barata y 250.000 la m¨¢s cara, que contrastan, por ejemplo, con los precios del Madrid que oscilan entre las 99.000 y 25.000 pesetas.
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