El bal¨®n, como sola herramienta
Valdano cambia casi al completo el modelo de entrenamiento del Madrid
No hace mucho, Michel se entrenaba un rato despu¨¦s de cada partido; y acud¨ªa dos o tres veces por semana a escuchar los consejos de un psic¨®logo; y deb¨ªa asistir a sesiones de v¨ªdeo; y comprobaba como su t¨¦cnico se serv¨ªa de una pizarra para explicar sus consignas; y alternaba los ejercicios f¨ªsicos, con t¨¦cnicos y con t¨¢cticos... Ya no. El Madrid se encomend¨® a un nuevo preparador, Jorge Valdano, y sus futbolistas tuvieron que amoldarse a sus particulares teor¨ªas: un solo escenario (el campo de f¨²tbol) y una sola herramienta (el bal¨®n).Sobre el c¨¦sped de uno de los campos de la Ciudad Deportiva, Valdano hace todos sus ejercicios. El equipo ya no acude a sitios muy frecuentados, por ejemplo, en la ¨¦poca de Benito Floro. Ni al gimnasio (s¨®lo en casos individuales concretos), ni a la sala de v¨ªdeo (los t¨¦cnicos s¨ª los ven, pero nunca obligan a seguirlos a la plantilla). Ni siquiera hay charlas t¨¢cticas en los vestuarios (las instrucciones del cuerpo t¨¦cnico, tanto individual como colectiva, se comunican en el campo de entrenamiento).
El trabajo psicol¨®gico se cuida "desde el di¨¢logo, la naturalidad y la convivencia", comenta Alberto Gir¨¢ldez, el preparador f¨ªsico del equipo. "La idea es fomentar la autoconfianza, lograr que cada uno pueda hacer eso que sabe. Hay una frase que se les suele repetir a los jugadores: nunca se te va a juzgar por lo que ha salido, sino por lo que has intentado".
Con todo, la caracter¨ªstica fundamental del manual de Jorge Valdano y su equipo es el valor que se le concede al trabajo con ¨¦l bal¨®n. Una f¨®rmula de moda en el f¨²tbol desde hace cuatro a?os y que trata de darle a la pelota la importancia que merece. La siguen, entre otros, V¨ªctor Fern¨¢ndez (Zaragoza), Johan Cruyff (Barcelona) o Francisco Maturana (Atl¨¦tico). Y choca con la que imper¨® hace diez a?os y que m¨¢s de uno sostiene a¨²n) de magnificar la importancia del apartado f¨ªsico: una buena preparaci¨®n f¨ªsica puede solucionar las limitaciones t¨¦cnicas de un equipo.
Otra de las caracter¨ªsticas del nuevo modelo de entrenamientos, es el trabajo globalizado. "Casi nunca", dice Gir¨¢ldez, "se trabaja por separado el aspecto f¨ªsico, el t¨¢ctico y el t¨¦cnico. Cada ejercicio tiene parte de al menos dos de ellos".
En suma, Michel (o cualquier otro futbolista del Madrid) ha modificado su rutina de entrenamientos. Ahora, salvo excepciones, no vuelve a entrenar hasta 24 horas despu¨¦s de jugar un partido. Es la sesi¨®n que los t¨¦cnicos denominan como de vuelta al trabajo: no muy dura, con carga media, basada en juegos con bal¨®n.
Hay sesiones en las que Michel s¨®lo se ejercita con la gente de su edad y otras en las que s¨®lo lo hace con los dem¨¢s centrocampistas del equipo (f¨®rmula que ha llevado a su grado extremo Maturana, el entrenador del Atl¨¦tico: entrena por l¨ªneas y a horas diferentes. Con los defensas, a las 10.00; con los centrocampistas, a las 11.00, y con los delanteros, a las 12.00).
El d¨ªa antes de cada partido, Valdano tambi¨¦n divide a su plantilla. Lo hace entre los que van a jugar al d¨ªa siguiente y los que no. Con los primeros, se trabaja paso a paso: con los cuatro defensas; con los cuatro defensas m¨¢s el medio centro; con los centrocampistas; con todo el equipo ... Los suplentes, mientras, realizan ejercicios fisico-t¨¦cnicos diferentes y acaban por trabajar m¨¢s carga que los titulares. Otra diferencia con respecto a otros manuales es la ausencia del cl¨¢sico partidillo de los jueves. Valdano rara vez recurre a esta f¨®rmula (aunque ayer, s¨ª).
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