El radicalismo argentino debate c¨®mo volver a ser una alternativa de poder
Romos los espolones, desparramada y aparentemente al pairo, la Uni¨®n C¨ªvica Radical (UCR) comienza este viernes su Convenci¨®n Nacional con varios asuntos fundamentales en el orden del d¨ªa: relaci¨®n con el Partido Justicialista (en el poder con Carlos Menem), futuras alianzas electorales y recuperaci¨®n del papel opositor y de alternativa de Gobierno del hist¨®rico movimiento argentino, peligrosamente desdibujado desde, que el presidente y Raul Alfons¨ªn, por la UCR, suscribieron el Pacto de Olivos. En la ¨²ltima d¨¦cada, el radicalismo nunca hab¨ªa sufrido una crisis semejante.La cercan¨ªa de los comicios presidenciales, previstos para el pr¨®ximo 14 de mayo, apremia los trabajos, impulsa ambiciones e intrigas y pone de manifiesto, nuevamente, la distancia entre la realidad y las pretensiones del partido. La meta de algunos ya no es ganar sino impedir que lo consiga de nuevo Menem; ni siquiera este objetivo parece factible. La ¨²ltima encuesta confirma que la tendencia del voto favorece abrumadoramente las aspiraciones del actual jefe de gobierno, que repetir¨ªa mandato sin necesitar de segunda vuelta.
La tradicional alternancia entre el justicialismo y los radicales se interrumpe, a juzgar por los sondeos de opini¨®n, en beneficio del Frente Grande, agrupaci¨®n de centro izquierda liderada por Carlos Chacho ?lvarez, tambi¨¦n a la baja, por confusa y dividida, despu¨¦s de haber sorprendido a todos con una ascensi¨®n en flecha en las constituyentes.
Las pugnas intestinas por la candidatura presidencial, con soterrados o abiertos asaltos al sill¨®n de Alfons¨ªn, ocupan los esfuerzos de los principales espadas y retrasan el agrupamiento de unas filas maltratadas en todas las consultas desde 1983, y sin atisbos a¨²n de recobrar a corto plazo el aliento perdido. "No tenemos nada que hacer en las elecciones de 1995", confesaba a este peri¨®dico un cuadro radical, m¨¢s c¨®modo en el anonimato temiendo ser tachado de derrotista. "El abrazo de Menem en Olivos nos hizo mierda".
Abrazo letal
Una de las razones fundamentales del declive y desorientaci¨®n observados en la Uni¨®n C¨ªvica Radical fue el apret¨®n de manos de noviembre de 1993 de un jefe de Estado especialmente h¨¢bil en la utilizaci¨®n del poder, que transform¨® el peronismo en menemismo y promovi¨® la enmienda de la Constituci¨®n para optar a la reelecci¨®n. El abrazo de Menem, aprovechado por Alfons¨ªn para incorporar a la Carta Magna transformaciones pol¨ªticas valiosas, ya se hab¨ªa manifestado fulminante con otros interlocutores en el estamento castrense, el sindicalismo, los medios de comunicaci¨®n o el aparato del Estado. La estabilidad econ¨®mica alcanzada por su equipo y otros avances hacia la gobernabilidad de un pa¨ªs frecuentemente a sobresaltos, hicieron el resto.Aunque no es descartable que otros les salgan al paso, dos radicales, con enfoques diferentes sobre cual deba ser el rumbo del centenario partido, se han situado con rapidez en la parrilla de salida de la carrera hacia la designaci¨®n de la UCR para la presidencia: Horacio Massacessi y Federico Storani. El primero, gobernador de R¨ªo Negro, cuenta en la Convenci¨®n Nacional con el respaldo de la gran mayor¨ªa, controlada por Ra¨²l Alfons¨ªn y el radicalismo de la provincia de C¨®rdoba. Le apoyan los sectores m¨¢s comprometidos con el Pacto de Olivos.
Federico Storani encabeza con otros notables la corriente cr¨ªtica de la UCR y pedir¨¢ a su Convenci¨®n Nacional un mayor distanciamiento respecto al justicialismo y el poder y el claro refrendo de una estrategia de alianzas electorales del centro, que se encamine hacia posiciones de izquierda.
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