Niels Jerne, la aventura de la inmunolog¨ªa

En los momentos actuales, en que la ciencia, como gran parte de otras actividades humanas, es m¨¢s una moneda de cambio que un an¨¢lisis profundo del conocimiento de las cosas, quiero recordar la figura y la contribuci¨®n cient¨ªfica de Niels K. Jerne, uno de los padres de la inmunolog¨ªa moderna, recientemente fallecido. Galardonado con el Premio Nobel de Medicina en 1984, Jerne fue uno de los grandes cient¨ªficos, pertenecientes a otra generaci¨®n, que entend¨ªan la ciencia m¨¢s como una continuaci¨®n de su vida que como una actividad independiente.Jerne pose¨ªa un incre¨ªble esp¨ªritu aventurero, sin duda heredado de sus progenitores. Su, abuelo fue capit¨¢n de barco, y, como fruto de los innumerables viajes de su padre, Niels, de nacionalidad danesa, naci¨® en Londres en 1911; se educ¨® en Holanda y estudi¨® medicina en Copenhague. Su vida acad¨¦mica y cient¨ªfica fue extraordinariamente rica y cosmopolita. Form¨® parte del n¨²cleo selecto de cient¨ªficos que en el Instituto Tecnol¨®gico de California contribuyeron a la creaci¨®n de la biolog¨ªa molecular moderna. Fue jefe del Departamento de Microbiolog¨ªa en Pittsburgh (EE UU), director del Instituto Paul Erlich de Francfort (Alemania) y director y fundador del Instituto de Inmunolog¨ªa de Basilea (Suiza).

Desde sus inicios, Jeme contribuy¨® de manera muy significativa a muy distintas ¨¢reas de la inmunolog¨ªa. En la inmunolog¨ªa de los a?os cincuenta, dominada por conceptos lamarckianos, donde el ant¨ªgeno se implicaba en el aporte de informaci¨®n necesaria para la formaci¨®n de anticuerpos, Jeme formul¨® una concepci¨®n radicalmente distinta, darwinista, seg¨²n la cual el ant¨ªgeno solamente selecciona anticuerpos ya preformados y codificados en el patrimonio gen¨¦tico de las c¨¦lulas que lo producen. Esta teor¨ªa que dio origen a la de la selecci¨®n clonal, perfeccionada dos a?os m¨¢s tarde por F. M. Bumet (premio Nobel en 1960), supuso un cambio singular que permiti¨® los extraordinarios avances de la inmunolog¨ªa en los a?os sesenta y setenta.

?dem¨¢s, Jerne contribuy¨® a separar la inmunolog¨ªa de la microbiolog¨ªa (los microorganismos no producen anticuerpos, sol¨ªa decir), acu?¨® nuevos t¨¦rminos en el l¨¦xico del sistema inmune (idiotipo, epitope, etc¨¦tera) y desarroll¨® m¨¦todos experimentales capaces de detectar las c¨¦lulas productoras de los anticuerpos a nivel individual. Final mente sugiri¨® el importante papel que los ant¨ªgenos de histocompatibilidad desempe?an en el sistema inmune y elabor¨® la teor¨ªa de la regulaci¨®n idiot¨ªpica por la que se le concedi¨® el Premio Nobel. Seg¨²n esta teor¨ªa, el sistema inmune, como el sistema nervioso, est¨¢ organizado a partir de interacciones entre sus propios componentes, los linfocitos y las inmunoglobulinas, interacciones que regulan asimismo su propia actividad. De esta manera, el sistema inmune no se constituye como una mera acumulaci¨®n de grupos de c¨¦lulas, sino como un sistema autoorganizado de manera ¨²nica en cada individuo. Esta teor¨ªa tiene profundas implicaciones, no totalmente aclaradas en el momento presente, para la comprensi¨®n de la fisiolog¨ªa del sistema inmune, as¨ª como de sus alteraciones patol¨®gicas, fundamentalmente las enfermedades autoinmunes.

Con Jerme ha desaparecido una cierta manera elegante, culta, solitaria, profundamente original y desinteresada de pensar, entender la vida, hacer ciencia y contribuir al bienestar social. Su vida, que no su obra, desaparecen despu¨¦s de un largo proceso tumoral que le mantuvo, como a ¨¦l le gustaba, apartado de las grandes modas y en la soledad.