Rominger contra Rominger

Jacques Anquetil, hace ya 38 a?os, fue el primero en pasar la barrera de los 46 kil¨®metros; Eddy Merckx puso su nombre a la de los 49 en 1972, pero 12 a?os despu¨¦s Francesco Moser dio el salto de los 50 y los 51 en menos de un mes. Hace poco m¨¢s de un a?o, Christopher Boardman pasaba el primero por el list¨®n de los 52 kil¨®metros, antesala del salto de Miguel Indur¨¢in hasta los 53. Y hoy (14.30, Tele 5), apenas dos meses despu¨¦s, Tony Rominger tiene el convencimiento de que los 54 kil¨®metros por hora en bicicleta llevar¨¢n su apellido. Eso, si no roza los impensables hasta hace poco 55.El optimismo en el cuartel de Tony Rominger -el mismo hotel junto al lago de Burdeos que le alberg¨® hace justamente dos semanas cuando arrebat¨® el r¨¦cord de la hora a Indur¨¢in, dej¨¢ndolo en 53,832 kil¨®metros- es contagioso. Quien m¨¢s quien menos agarra un lapicero y se pone a echar sus cuentas. Unos, como su m¨¢nager Marc Bivert, calculan los francos suizos que engrosar¨¢n sus bolsillos, pero la mayor¨ªa multiplica desarrollos por n¨²mero de pedaladas, calcula ¨¢cidos l¨¢cticos y umbrales anaer¨®bicos, desgaste de la fuerza centr¨ªfuga y n¨²mero de curvas que hay que dar en el ¨®valo de 250 metros de r¨¢pida madera camerunesa. Los datos corren de boca en boca, suministrados con cuentagotas por el m¨¦dico italiano Ferrari, y entresacados de los cinco d¨ªas de entrenamiento.

Por segunda vez en los 101 a?os de historia del r¨¦cord de la hora -un reto m¨¢s antiguo que el Tour- coincidir¨¢n el nombre del desafiado y el desafiante. Antes que Rominger, Francesco Moser, en cuyo equipo de trabajo ya estaba el m¨¦dico Ferrari, super¨® con poco tiempo de separaci¨®n su propio r¨¦cord. Razones muy similares pueden mover hoy al ciclista suizo. Por aquel entonces, enero de 1984, en su primer intento Moser se qued¨® cerca de un n¨²mero redondo, los 51 kil¨®metros, al igual que Rominger hace dos semanas, que se qued¨® frisando la barrera de los 54. Y como Moser, Rominger no acab¨® especialmente cansado despu¨¦s de su tentativa: en ¨¦l mismo y en su entorno exist¨ªa el convencimiento de que hab¨ªa administrado su energ¨ªa de una manera un tanto r¨¢cana, dejando en sus m¨²sculos algunos restos de gasolina que pod¨ªan haber sido consumidos con mayor beneficio horario. Adem¨¢s, los 53,832 kil¨®metros fueron conseguidos por Rominger en una suerte de ensayo general, en el que no pudo sacar el rendimiento econ¨®mico -no hab¨ªa ni p¨²blico ni televisi¨®n ni gran despliegue publicitario- que merec¨ªa el intento.

Desechada la primera idea de intentarlo en altura -muchos factores err¨¢ticos influ¨ªan: la adaptaci¨®n del corredor y, sobre todo, la ausencia de vel¨®dromos cubiertos a m¨¢s de 2.000 metros que pudieran evitar la influencia nunca controlable del viento- resulta del todo l¨®gico que el nuevo intento, cercano en el tiempo, se produjera en el mismo vel¨®dromo, en Burdeos, el templo moderno de la hora: cuatro primados se han logrado en ese recinto -Boardman, Obree, Indur¨¢in y Rominger- en poco m¨¢s de un a?o.

El objetivo

El objetivo de todo el equipo de trabajo -un m¨¦dico-entrenador; un masajista, Marcelino Torrontegui; un mec¨¢nico, Alejandro Torralbo; un director, Juan Fern¨¢ndez; y un constructor de bicicletas, Ernesto Colnago, al margen de productores y administradores- es aprovechar el gran momento de forma del ciclista. Y pese a que lleg¨® a Burdeos el lunes m¨¢s gordo que hac¨ªa dos semanas para su primer intento, Rominger volvi¨® a asombrar a su entorno: las pruebas que le ha hecho Ferrari los ¨²ltimos cinco d¨ªas han dado los mejores resultados de los ¨²ltimos anos, m¨¢s de 51 en el baremo del test Conconi; el mi¨¦rcoles, el d¨ªa de su ensayo serio, rod¨® durante 25 kil¨®metros a una media superior a los 54,6 kil¨®metros por hora. Y ese asombro espera convertirlo en datos bien concretos y definitivos en los 60 minutos de hoy.