Los suizos aprueban en refer¨¦ndum la detenci¨®n prolongada de 'extranjeros ¨ªndeseables'
La Confederaci¨®n Helv¨¦tica va a dejar de ser el para¨ªso so?ado para los demandantes de asilo. El 72,8% de los votantes en elrefer¨¦ndum de ayer dijeron s¨ª a una nueva ley de extranjer¨ªa que pone mayor poder en manos de la polic¨ªa para actuar contra los que buscan asilo y los emigrantes detenidos que no lleven consigo el permiso de residencia. Con este resultado, los suizos han dejado claro que no est¨¢n dispuestos a aceptar a cualquier extranjero en casa.
Unos cuatro millones de suizos ten¨ªan derecho a votar ayer en el refer¨¦ndum, aunque la participaci¨®n alcanz¨® s¨®lo a un 43%. Es decir, 1,9 millones de personas acudieron a las urnas, y de ellas el 72,8% dijo s¨ª a las nuevas medidas contra la inmigraci¨®n extranjera. Suiza cuenta con un total de 7 millones de habitante s, de los cuales entre el 18% y el 20% son extranjeros.La nueva ley federal sobre extranjer¨ªa se va a convertir en instrumento de detenci¨®n y expulsi¨®n para aquellos que lleguen sin papeles a Suiza en busca de asilo pol¨ªtico, aunque en un principio fue concebida para luchar contra los traficantes de droga que operan en el barrio de Letten en Z¨²rich y que pululan sin documentaci¨®n para escapar a la c¨¢rcel y a la expulsi¨®n amparados por la Convenci¨®n Internacional de la No Expulsi¨®n.
A partir de enero, las consecuencias para los indocumentados, sean delincuentes o no, ser¨¢ la c¨¢rcel por un periodo de hasta un a?o, frente a los 30 d¨ªas que autorizaba la legislaci¨®n actual. Con ello se pretende castigar a aquellas personas que no colaboren con las autoridades. Afecta sobre todo a los demandantes de asilo, familias incluidas, que no se han presentado a una cita; a aqu¨¦llos que han. solicitado el asilo con diferentes nombres, o aqu¨¦llos de quienes se sospecha que han escondido su documentaci¨®n o no han abandonado el pa¨ªs cuando se les ha ordenado. Aproximadamente el 66% de las ¨®rdenes de expulsi¨®n son burladas.
El diputado del Partido Liberal Charles Poncet considera que con esta ley "se instaura el delito de la mala pinta y se permite la detenci¨®n de personas en condiciones que no respetan las garant¨ªas que un Estado de derecho debe ofrecer".
Algunos piensan que se trata de una estrategia electoral de tres de los cuatro partidos m¨¢s representados en el Gobierno (radicales, democristianos y socialistas) ahora que se aproximan las elecciones de 1995. Poncet vuelve a la carga al afirmar: "Tenemos que admitir un poco de desorden si queremos salvaguardar' la libertad. Prefiero aceptar algunos ilegales que aprobar, la detenci¨®n de personas que no han cometido ning¨²n delito".
C¨¢rcel para 7.000 al a?o
Pero para meter en la c¨¢rcel a los miles de demandantes de asilo que llegan a Suiza cada a?o en detenci¨®n preparatoria (m¨¢ximo de tres meses), y en detenci¨®n con vistas a la expulsi¨®n (m¨¢ximo nueve meses), ser¨¢ preciso ampliar las plazas penitenciarias. En los pr¨®ximos meses se realizar¨¢n obras para acoger anualmente 7.000 extranjeros. Estas medidas afectar¨¢n sobre todo a yugoslavos, kurdos y tamiles.
Lo que muchos defensores de la libertad temen es que esta ley no va a solucionar el problema que naci¨®, ya que los
ma para e, traficantes buscar¨¢n nuevas v¨ªas para introducir en el mercado helv¨¦tico su mercanc¨ªa.
Los suizos, que ayer aprobaron tambi¨¦n con un 51,8% la reforma del seguro de enfermedad, que pretende luchar contra el alza de los gastos sanitarios, han reducido las grandes diferencias entre las comunidades del pa¨ªs surgidas en otros plebiscitos.
S¨®lo el cant¨®n de Ginebra ha dado el s¨ª m¨¢s t¨ªmido con algo m¨¢s del 52% a la ley de Extranjer¨ªa. El m¨¢s contundente procede de Apenzell Rhodas Interior con el 82,4%, seguido de Saint Gall y Z¨²rich. La fosa entre alemanes y franceses sigue siendo importante.
Las ¨²ltimas votaciones celebradas en la Confederaci¨®n Helv¨¦tica han puesto sistem¨¢ticamente de manifiesto estas dl]Ferencias, que llevan impl¨ªcitas tambi¨¦n el grado de tolerancia y de apertura al exterior. La aprobaci¨®n el pasado mes de septiembre de la Convenci¨®n contra la Discriminaci¨®n Racial -en contra de todo pron¨®stico y gracias a los votos de las mujeres y de los cantones franceses-, fue precedida de los rechazos a la adhesi¨®n a la ONU, en 1986, al Espacio Econ¨®mico Europeo (antesala de la Uni¨®n Europea), en 1992, y al env¨ªo de cascos azules en junio pasado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.