Tarragona rechaza el traslado de piezas arqueol¨®gicas a la terraza de un centro comercial

La Real Sociedad Arqueol¨®gica Tarraconense lo considera "inadmisible"; el ¨¢rea de Historia Antigua de la Universidad Rovira i Virgili est¨¢ en "absoluto desacuerdo"; la Comisi¨®n de Entidades de Tarragona se opone rotundamente, y el Ayuntamiento est¨¢ asustado del precedente que puede suponer. En Tarragona nadie se atreve a defender la autorizaci¨®n que la Comisi¨®n Territorial del Patrimonio Cultural de la Generalitat de Catalu?a ha dado a la empresa Eroski para trasladar los restos de una villa romana y de una bas¨ªlica paleocristiana a la terraza de un centro comercial.

La empresa vasca ha hecho una cuantiosa inversi¨®n para iniciar la construcci¨®n de un hipermercado y un centro comercial en Tarragona. Al hacer las exploraciones arqueol¨®gicas preceptivas, en los terrenos donde el Ayuntamiento promov¨ªa desde hace a?os la construcci¨®n de un centro comercial se encontraron restos del siglo I al IV. La empresa propuso trasladarlos unos metros para poder hacer su proyecto. La comisi¨®n territorial, que debe autorizar cualquier actuaci¨®n que afecte al patrimonio, rechaz¨® dicha soluci¨®n. Eroski present¨® una nueva propuesta y consigui¨® que la comisi¨®n la aceptara. La nueva soluci¨®n result¨® de lo m¨¢s sorprendente: trasladar los restos a la terraza del nuevo edificio.

En todo este tiempo el Ayuntamiento ha mantenido silencio. Ha sido el ¨²ltimo en pronunciarse pero, finalmente, y con la unanimidad de todos los grupos municipales, ha decidido recurrir ante el consejero de Cultura contra la autorizaci¨®n del traslado. El Ayuntamiento, desea consensuar un proyecto que mantenga los restos en su sitio y visitables, y permitir que la construcci¨®n se eleve un piso para compensar a Eroski el espacio perdido.

Precedente

M¨¢s all¨¢ de la importancia de los restos de la llamada zona del gas, donde va a construir Eroski, el alcalde, Joan Miquel Nadal considera inaceptable "el precedente que se crear¨ªa en una ciudad donde cada nueva construcci¨®n implica un problema arqueol¨®gico". El problema ser¨ªa c¨®mo parar despu¨¦s la solicitud de todo constructor para trasladar a la terraza la ciudad romana encontrada en el subsuelo.Los restos forman parte del conjunto de la necr¨®polis romana de Tarragona, junto a la antigua carretera de Valencia. Entre ellos est¨¢ la planta completa de una bas¨ªlica paleocristiana, la ¨²nica que se conserva de la necr¨®polis. Seg¨²n la Universidad Rovira i Virgili, el traslado "provocar¨ªa una distorsi¨®n de la comprensi¨®n global del conjunto arquitect¨®nico, funerario y arqueol¨®gico".

Eroski est¨¢ a la espera de la concesi¨®n de la licencia municipal para iniciar las obras del centro comercial y quiere abrir sus puertas dentro de un a?o. Los directivos, muy prudentes en sus declaraciones, parecen no entender nada. Mientras, en Tarragona, pol¨ªticos, entidades y medios acad¨¦micos se preguntan a qu¨¦ criterio responde la decisi¨®n de la Comisi¨®n del Patrimonio, compuesta por nueve representantes de la Generalitat y tres miembros independientes nombrados por el director general de Patrimonio.

Entretanto, ni la prensa ni los concejales de la oposici¨®n han podido visitar los restos sobre el terreno. La empresa lo impide, con el silencio de la Administraci¨®n.