Tres miembros de la direcci¨®n de UGT se desmarcan de su secretario general, C¨¢ndido M¨¦ndez
El secretario general de UGT, C¨¢ndido M¨¦ndez, ha perdido una parte de los apoyos que en abril le llevaron al frente del sindicato. Su gesti¨®n fue aprobada por 88 votos a favor, 1 en contra -de la federaci¨®n de funcioiarios- y 59 abstenciones. Ello supone un respaldo del 59,7% frente al 75,25% de hace ocho meses. El Pa¨ªs Valenciano, Madrid y la mitad de los delegados de las federaciones de servicios y banca no apoyaron su gesti¨®n y derrotaron ayer una lista alternativa a la oficial para presidir el comit¨¦ confederal del sindicato. Tampoco apoyaron la candidatura de tres miembros del equipo de M¨¦ndez: Jos¨¦ Luis Daza, secretario de acci¨®n sindical; Gustavo Gardey, secretario de acci¨®n social, y Dionisia Mu?oz, vocal de la Ejecutiva.
El sector cr¨ªtico de UGT, aglutinado en torno a Manuel Fern¨¢ndez, Lito, provoc¨® ayer una primera fractura en el comit¨¦ confederal. Present¨® una lista propia para presidir la reuni¨®n que fue votada favorablemente por las cinco federaciones que vienen apoyando a Lito desde el congreso de abril -Metal, Construcci¨®n, Catalu?a, Asturias y Cantabria-. A ellas se sum¨® el sector denominado Grupo de Albarrac¨ªn, formado por Madrid, Valencia y funcionarios, que en el Congreso pact¨® con M¨¦ndez la formaci¨®n de su Ejecutiva a cambio de apoyarle como secretario general en detrimento de Lito. Ese sector ha venido manteniendo desde entonces reuniones al margen de la direcci¨®n pero hasta ayer no hab¨ªa hecho palpable su postura disidente. Daza y los otros dos miembros de la direcci¨®n no votaron con ellos pero tampoco con la lista oficial. Su abstenci¨®n y su ambigua postura provoc¨® un gran malestar en el resto de la Ejecutiva y ayer se hablaba de su posible salida del equipo de M¨¦ndez. El l¨ªder de UGT dijo anoche que esa disidencia "ser¨¢ abordada internamente".Jos¨¦ Luis Daza justific¨® su postura en que no quer¨ªa "romper la mayor¨ªa que sali¨® del congreso" y que por ello hab¨ªa defendido un acuerdo entre los dos grupos enfrentados a causa de la crisis de la federaci¨®n de funcionarios. Los representantes de esta organizaci¨®n (FSP) no participaron finalmente en el comit¨¦ confederal por haber sido elegidos en comit¨¦ federal y no en congreso, como marcan los estautos.
Pese a todo, sali¨® elegida la mesa del comit¨¦ propuesta por la direcci¨®n con 90 votos a favor (58,8%), 63, en contra (41,2%). La preside Jes¨²s Urrutia, l¨ªder de qu¨ªmica y est¨¢ formada tambi¨¦n por los dirigentes de Castilla-Le¨®n, Federaci¨®n de la Tierra y Pa¨ªs Vasco. Esa correlaci¨®n de fuerzas dej¨® claro que el enfrentamiento del congreso de abril se cerr¨® en falso con alianzas poco estables.
La ambigua postura de Daza no s¨®lo fue criticada desde la direcci¨®n, sino que tampoco le, salv¨® de los ataques del sector de Lito. El l¨ªder de Cantabria, Luis ?ngel Ruiz Card¨ªn, le acus¨® de no tener un proyecto de pol¨ªtica sindical y el dirigente de Construcci¨®n, Manuel Garnacho, critic¨® su doble discurso: "Cuando est¨¢ con las federaciones defiende su fortalecimiento y la unidad de la negociaci¨®n colectiva y cuando est¨¢ con las uniones territoriales, aboga por una negociaci¨®n descentralizada".
Manuel Gamacho pidi¨® tambi¨¦n por su parte a C¨¢ndido M¨¦ndez que se desvincule ya de Nicol¨¢s Redondo y empiece a actuar en¨¦rgicamente como secretario general.
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