Grito de alarma del Worldwatch Institute ante la disminuci¨®n de los recursos naturales

El prestigioso instituto estadounidense, Worldwatch, dedicado al estudio del medio ambiente, ha lanzado un grito de alarma sobre la magnitud de la disminuci¨®n de los recursos naturales en el mundo, problema que comienza a tener, seg¨²n afirma, impactos negativos sobre la econom¨ªa. "Una pesca a ultranza, una tala desmesurada de ¨¢rboles y una extracci¨®n desmedida de aguas subterr¨¢neas han destruido los: recursos naturales y han aumentado las filas de parados", subray¨® ayer el director del instituto, Lester Brown, en la presentaci¨®n de su informe anual en Washigton.

"La inestabilidad medioambiental" est¨¢ conduciendo a problemas econ¨®micos y pol¨ªticos y "el dilema no es medio ambiente o empleo, sino medio ambiente y empleo", subray¨® Lester Brown, que hizo un llamamiento a la comunidad internacional para enfrentar este desaf¨ªo del siglo XXI. La destrucci¨®n de la fauna acu¨¢tica ha alcanzado un nivel alarmante. La pesca de centuriones (productores del caviar) en el mar Caspio ha pasado de 700.000 toneladas hace 10 a?os a 100.000 toneladas en el momento actual.

El mismo fen¨®meno se constata en el mar Negro, en el Danubio y en la bah¨ªa de la Chesapeake, en la embocadura del Potomac (Maryland), donde la pesca de moluscos no lleg¨® apenas a las 1.000 toneladas en 1994, contra las 100.000 toneladas de principios de siglo, precisa el informe de 250 p¨¢ginas publicado en 20 lenguas.

Por la aceleraci¨®n de la deforestaci¨®n, el Worldwatch. cita el ejemplo de Costa de Marfil (?frica), que s¨®lo exporta productos forestales por valor de 30 millones de d¨®lares, cuando sus ricos bosques tropicales les proporcionaban 300 millones de d¨®lares en los a?os setenta. Esta baja de exportaciones en uno de los sectores clave de la econom¨ªa costamarfile?a ha contribuido a una baja del 50% de las compras dom¨¦sticas entre 1980 y 1994.

Filipinas y Nigeria

La destrucci¨®n forestal ha hecho, asimismo, perder empleos y lleva a una falta de riqueza para Filipinas, que no exporta ya madera hoy, cuando este pa¨ªs manejaba 217 millones de d¨®lares en este sector a comienzos de los setenta. La situaci¨®n es todav¨ªa mas catastr¨®fica para Nigeria, obligada a importar productos forestales por valor d¨¦ 100 millones de d¨®lares en 1988, cuando era uno de los principales pa¨ªses exportadores africanos.

El nivel de las capas acu¨¢ticas ha tenido una bajada significativa en numerosos pa¨ªses, especialmente en China, donde 300 pueblos conocen ya la penuria de agua.

En India, el nivel de los cursos de agua disminuye al ritmo. de un metro por ano en el norte del pa¨ªs, por una cultura intensiva de cereales para alimentar a la poblaci¨®n de m¨¢s de 900 millones, y que deber¨¢ alcanzar 1.000 millones en los seis pr¨®ximos a?os, seg¨²n el documento.

Para los responsables del Worldwatch Institute, la degradaci¨®n de los recursos naturales, el declive econ¨®mico y la desintegraci¨®n social actual no pueden ser parados m¨¢s que por "una r¨¢pida ralentizaci¨®n del crecimiento demogr¨¢fico". El objetivo de estabilizar la poblaci¨®n mundial en 9.800 millones en el a?o 2050, decidido en la Conferencia de El Cairo el pasado septiembre de 1994, constituye un elemento positivo, ha se?alado Hilary French, coautora del informe.

Pero, seg¨²n French, hace falta que los Gobiernos manifiesten una clara voluntad y acuerden los fondos necesarios para poner en pr¨¢ctica este proyecto. French preconiza igualmente un papel creciente de Naciones Unidas en esta batalla para evitar que la "amenaza militar" no se transforme un d¨ªa en "amenaza alimentar¨ªa".

La Carta de Naciones Unidas escrita hace medio siglo no contiene ni la palabra "medio ambiente" ni la palabra "poblaci¨®n", y ser¨ªa simb¨®lico in cluir estos t¨¦rminos en la mis ma con ocasi¨®n del 50 aniversario de la organizaci¨®n, concluye French.