Ejercicios espirituales
El Atl¨¦tico se refugia en una miniconcentraci¨®n invernal en busca de la soluci¨®n a sus males
El Atl¨¦tico recurrir¨¢ a los ejercicios espirituales. Jorge D'Alessandro, el entrenador, no pretende salvar el alma d¨¦ sus futbolistas, pero casi. Los jugadores viven un clima de tensi¨®n desproporcionado; soportan un peso psicol¨®gico excesivo, que puede con sus cualidades f¨ªsicas y t¨¦cnicas. Con esta medida, el t¨¦cnico quiere liberar al grupo de esa carga. Se trata de una cura de desintoxicaci¨®n en su sentido m¨¢s literal. El f¨²tbol espa?ol cuenta con precedentes, similares, tampoco muchos, pero siempre en busca de una mejora f¨ªsica, t¨¢ctica o t¨¦cnica de los deportistas. Como terapia an¨ªmica es una receta pr¨¢cticamente nueva.El calendario competitivo del Atl¨¦tico no deja demasiado espacio para encajar las jornadas de convivencia: s¨®lo tres d¨ªas, desde la conclusi¨®n del partido de Copa, vuelta, ante Las Palmas (hoy,21.00), hasta el viaje a Valencia para el encuentro liguero del domingo. "Quiero realizar un reciclaje mental para serenar los ¨¢nimos y descargar responsabilidades", justific¨® D'Alessandro, el ide¨®logo de la medida.
El objetivo es devolver al Atl¨¦tico el poso de equipo de f¨²tbol. Los ¨²ltimos acontecimientos le hab¨ªan alejado completamente de ese formato: declaraciones cruzadas entre futbolistas, entrenador y presidente, protestas contra las actuaciones arbitrales ... No hab¨ªa ambiente de f¨²tbol. Eso es lo que pretende recuperar D'Alessandro. "Hablaremos", indic¨® el preparador, "de lo que es un equipo de f¨²tbol por dentro. Haremos un repaso t¨¢ctico total. Veremos v¨ªdeos y corregiremos defectos. Y, sobre todo, buscamos elevar el ¨¢nimo de la plantilla y acabar con el. estado de nerviosismo que los ¨²ltimos resultados hab¨ªan generado".
Los futbolistas suelen ser enemigos de las concentraciones, pero en esta ocasi¨®n no se han quejado. Saben que el equipo no funciona, que necesitan abstraerse de todo lo que pueda alterar su concentraci¨®n y, adem¨¢s, no est¨¢n para rechazar las sugerencias reparadoras que van apareciendo. El Atl¨¦tico lo ha intentado ya casi todo, y sin ¨¦xito, por la v¨ªa terrenal. ?Por qu¨¦ no intentarlo por la espiritual?
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