?Donde est¨¢ el frente?
Los dos bandos cuentan un conflicto que los periodistas no logran ver ni en la frontera selv¨¢tica
ENVIADO ESPECIALNo hay ni un miserable cuerpo a tierra para la prensa en esta extra?a e invisible guerra peruano ecuatoriana donde los sucesivos' partes castrenses citan feroces combates cuerpo a cuerpo canoneos, fuego graneado con mortero de grueso calibre, masivas incursiones selv¨¢ticas con escuadrillas de cazas lanzamisiles y helic¨®pteros artillados, y hasta 200 bajas. Los dos bandos cuentan una guerra de la que los periodistas no consiguen ver nada, por mucho que se acerquen a la selv¨¢tica frontera.
Entretanto, el, presidente de Ecuador, Sixto Dur¨¢n-Ball¨¦n, y el de Per¨², Alberto Fujimori, es tudiaban ayer en Quito y Lima, respectivamente, un compromiso perge?ado horas antes en R¨ªo de Janeiro (Brasil) por los pa¨ªses garantes del ¨²ltimo acuerdo de fronteras.
Pasa a la p¨¢gina 4
M¨¢s informaci¨®n en la p¨¢gina 3
"?Alguien quiere chocolate?"
La guerra invisible
Luciano se mostr¨® nuevamente solemne: "Tenemos que montar guardias. El primero que oiga el ruido de los helic¨®pteros que avise. ?Alguien quiere chocolate?. La golosina convoco mas que las imaginarias porque al punto llegaron otros en su demanda.El caso es que en tomo a las cuatro de la madrugada, hora prevista para el desalojo del autob¨²s y el inmediato cuerpo a tierra de sus pasajeros, el ¨²nico ataque registrado en la zona fue el ejecutado por un asistente de la expedici¨®n cuyos pavorosos ronquidos provocaron reprobables maldiciones y blasfemias y numerosas bajas entre los esforzados durmientes.
Hubo quien intent¨® el escrutinio por libre y pudo haber acabado mal. Es el caso del corresponsal de una agencia internacional de noticias, quien desde Per¨² trat¨® de llegar a Ecuador adentr¨¢ndose en solitario, a pie y en pos de la noticia por una es pecie de maizal fronterizo. Con sigilo y tenacidad, ganaba terreno y br¨ªos. Pero el viaje temerario de este intr¨¦pido periodista ten¨ªa un l¨ªmite.
En un momento de la andadura pis¨® un obst¨¢culo blando y parlante. "?Qu¨¦ cojones hace usted por aqu¨ª!", vino a decir el impedimento, quien para asombro y desgracia del informador result¨® ser un centinela peruano tendido en el suelo. El periodista fue convenientemente expulsado de Per¨², seg¨²n relata un corresponsal conocedor de los entresijos del caso.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.