Vuelve el 'glamour' a las pasarelas espa?olas

Armand Bassi, flamenco, y Antoni¨® Mir¨®, sofisticado, presentaron sus colecciones oto?o-invierno 1995-1996 en la pasarela Gaud¨ª-Barcelona. Leticia Herrera, musa de Armani y explosi¨®n morena en Nueva York, cautiv¨® en la inauguraci¨®n de la pasarela catalana con poses defina seducci¨®n y notas de guitarra flamenca. Juste de Nin, el hombre que dise?a Armand Bassi, apuesta por una ropa de corte flamenco con el punto como base y la piel de complemento. Con la colecci¨®n presentada en el Real Club Polo de Barcelona volvi¨® el color a la pasarela. Los tonos fuertes, rojo clavel, verde pino y amarillo lim¨®n. La modelo mexicana supo sacar partido a unas prendas inventadas a partir del mundo m¨¢gico de Federico Garc¨ªa Lorca.El p¨²blico vivi¨® un momento de excepci¨®n cuando la voz del cantaor Joan Cort¨¦s Duquende rompi¨® el silencio de la noche entonando una sole¨¢ acompa?ado por La Tolea, bailaora de raza y cuerpo menudo. Bassi propone texturas y materiales de apariencia sedosa, rayas verticales cercanas al pantal¨®n de rejoneo, bordados surgidos del mant¨®n de Manila y diversos s¨ªmbolos de aut¨¦ntica imagen campera en un paseo sobre la arena por el que tambi¨¦n se deslizaron el fant¨¢stico Markus Schenkenberg, Judith Masc¨® y Ver¨®nica Blume.

Despu¨¦s del ¨¦xito cosechado en Par¨ªs, Mir¨® present¨® un desfile glamouroso, lleno de personajes populares entre los que destac¨® Lloll Bertran, entallada en negro y en dos esperadas salidas. Como ya es habitual en el dise?ador, insiste en presentar su colecci¨®n en un marco donde el car¨¢cter de su ropa armonice con la arquitectura del entorno. Mir¨® piensa en un invierno de l¨ªneas esbeltas y sofisticadas con gran profusi¨®n de terciopelos, panas, sargas esmeriladas y sedas tornasoladas.

Como sastre, contin¨²a su investigaci¨®n en torno al doble juego de la prenda. Los abrigos cortos y las chaquetas largas, los jerseis y las camisas tambi¨¦n muy cortas con cuellos largos, y los pantalones rectos, anchos o estrechos.

Si el hombre de Ton? Mir¨® define su indumentaria con un aire en el que mezcla el esp¨ªritu dandi con el ambiente de los setenta, la mujer viste glamourosa prendas muy precisas, trajes sastre y vestidos rectos, chaquetas entalladas con cuello velazquiano y largas faldas tubo con tendencia a terminar su recorrido cerca de los tobillos.

Esta edici¨®n del Gaud¨ª viene cargada de desfiles colectivos, pero sigue necesitada de nombres propios. La celebraci¨®n de Intimoda y la puesta en escena de una docena de espect¨¢culos con modelos en ropa interior fortalecen esta convocatoria. Los desfiles de La Peral y Vives Vidal, presentes por primera vez en el marco de Intimoda, apuestan por el glamour para el futuro. Las tendencias que se perfilan son a la vez suaves y provocadoras en tejidos de encaje o algod¨®n, y formas flexibles para una fiesta de seducci¨®n que empieza en el interior de cada mujer y acaba por manifestarse a plena luz. La lencer¨ªa est¨¢ tomando el pulso a la calle y no va a ser dif¨ªcil ver encajes y puntillas por encima de esos deliciosos escotes pronunciados por la exuberancia del sistema Bra.