Yeltsin: "Estoy en contra de la ampliaci¨®n acelerada"

En una entrevista concedida en el Kremlin a siete peri¨®dicos, uno de cada pa¨ªs miembro del Grupo de los Siete, cuya cumbre de Halifax (Canad¨¢) se celebrar¨¢ en junio, y de un diario egipcio, el presidente ruso, Bor¨ªs Yeltsin, repas¨® el jueves los principales asuntos que preocupan en su pa¨ªs. El m¨¢s importante, la posible ampliaci¨®n inmediata de la Alianza Atl¨¢ntica. "Estamos contra la ampliaci¨®n inmediata, excesiva y acelerada de la, OTAN", asegur¨® el presidente ruso. "Acabamos de poner fin al sistema de los bloques militares. Si los pa¨ªses de Europa central y oriental se adhieren a la OTAN, la organizaci¨®n atl¨¢ntica llegar¨¢ hasta las fronteras de Rusia. Eso ser¨ªa el retorno a la Europa de los bloques".Yeltsin eludi¨® despu¨¦s una pregunta que pretend¨ªa conocer si, para Rusia existe una clasificaci¨®n de pa¨ªses aceptables en su eventual incorporaci¨®n en la Alianza Atl¨¢ntica en funci¨®n de si ¨¦stos poseen o no fronteras comunes con Rusia.

Este tema ser¨¢ uno de los asuntos centrales de su posible reuni¨®n con el presidente norteamericano, Bill Clinton, en la capital sovi¨¦tica, a¨²n no confirmada. Este encuentro tendr¨ªa como marco los actos conmemorativos del 500 aniversario del fin de la II Guerra Mundial.

"El presidente Clinton quiere venir", dijo Yeltsin, tratando de obviar los problemas existentes con la visita. "Chechenia no es un obst¨¢culo [para la visita de Clinton]. ?l est¨¢ preocupado por el escenario, pero no habr¨¢ desfiles de armamentos modernos en la Plaza Roja... Ser¨¢ una parada militar de soldados y viejos combatientes. (...) No hay riesgo de que pueda encontrarse inc¨®modo al ser fotografiado delante de armas de destrucci¨®n masiva".

Entre los asuntos bilaterales pendientes con Estados Unidos, Yeltsin record¨® la ratificaci¨®n del Tratado Salt II, que debe ser confirmado tanto por el Congreso estadounidense corno por la Duma rusa. Se mostr¨® partidario Yeltsin de abrir r¨¢pidamente una nueva ronda de negociaciones para alcanzar un nuevo tratado de reducci¨®n de armas.

Le Monde / EL PA?S.