Echeverr¨ªa gana el Anagrama con un ensayo sobre los cosmopolitas dom¨¦sticos
Javier Echevarr¨ªa (Pamplona, 1948), autor de Tel¨¦polis (1994), fue proclamado ayer ganador del Premio Anagrama de ensayo, dotado con un mill¨®n de pesetas, por la obra Cosmopolitas dom¨¦sticos. Seg¨²n manifest¨® Echevarr¨ªa, "la obra es como la otra cara de Tel¨¦polis, ya que trata de las consecuencias de la creaci¨®n de una ciudad global en el ¨¢mbito dom¨¦stico, del nacimiento de los llamados cosmopolitas dom¨¦sticos".
A la actual edici¨®n del premio se hab¨ªan presentado 54 originales, de los que siete pasaron a la final. Seg¨²n Jorge Herralde, editor de Anagrama y miembro del jurado, Echevarr¨ªa result¨® ganador porque present¨® "una obra llena de imaginaci¨®n que se inscribe en el marco de los pensadores que reflexionan sobre lo contempor¨¢neo".Cosmopolitas dom¨¦sticos se centra en el tema de las consecuencias del progreso en el ¨¢mbito privado. "El libro trata del impacto de la sociedad de la informaci¨®n en las casas", explic¨® Echevarr¨ªa.
Adelantos como el tel¨¦fono, la televisi¨®n, las redes telem¨¢ticas del tipo Intemet o el llamado teledinero alteran, seg¨²n Javier Echeverr¨ªa, un ¨¢mbito que hasta ahora se consideraba privado. Es en esta distorsi¨®n donde se centra la obra Cosmopolitas dom¨¦sticos.
"El libro est¨¢ dividido en las distintas estancias de una casa, es como un recorrido por la telecasa, y muestra c¨®mo ha cambiado el ¨¢mbito dom¨¦stico en los ¨²ltimos tiempos", explic¨® Echeverr¨ªa.
Intimidad invadida
La invasi¨®n de la intimidad es uno de los temas centrales del libro de Echeverr¨ªa, que sostiene que en el futuro habr¨¢ una inversi¨®n de papeles y se tender¨¢ a producir y a comprar desde casa y a convertir las calles en un lugar de diversi¨®n.
"Lo que est¨¢ apareciendo", explic¨® Javier Echevarr¨ªa, "es una forma de cosmopolitismo moderno, un cosmopolita que se hace en casa a trav¨¦s de los avances tecnol¨®gicos".
El peligro de las nuevas redes de informaci¨®n ser¨ªa, seg¨²n el autor del ensayo ganador, que alguien pudiera llegar a controlarlas. "Si esto fuera un imperio con un mando ¨²nico, ir¨ªamos inevitablemente hacia el 1984 de Orwell", dijo Echevarr¨ªa, "pero' por suerte hay un pluralismo democr¨¢tico y la red de Internet, por ejemplo, es estrictamente federalista. Los riesgos de formas dictatoriales son grandes, pero hay una voluntad de actuar democr¨¢ticamente. Las dos fuerzas est¨¢n en acci¨®n y la batalla est¨¢ por librarse todav¨ªa".
"En el tema del teledinero", coment¨® Echevarr¨ªa, "se indica en el libro que aquellos tiempos en los que se guardaba el dinero bajo el colch¨®n o bajo un ladrillo han cambiado radicalmente y se ha pasado a las tarjetas electr¨®nicas, con lo que tambi¨¦n se ha alterado el ¨¢mbito privado".
La urbanizaci¨®n del tiempo del hombre contempor¨¢neo, consecuencia en parte de la programaci¨®n televisiva, es tambi¨¦n objeto de an¨¢lisis en el libro, que se centra asimismo en la distorsi¨®n de la memoria que comportan los adelantos tecnol¨®gicos.
"El territorio se transforma y vamos hacia las casas abiertas", apunt¨® Echevarr¨ªa, "que es algo que ya aparece en Popper como un avance hacia la sociedad abierta".
Santiago Alba Rico fue finalista del premio con la obra Cuerpo y mercanc¨ªa. Santiago Alba Rico (Madrid, 1960) hab¨ªa publicado anteriormente Viva el mal, viva el capital (1992) y, en colaboraci¨®n con Carlos Fern¨¢ndez Liria, Dejar de pensar (1988) y Volver a pensar. Una propuesta socr¨¢tica a los intelectuales espa?oles (1989).
El jurado del Premio Anagrama de ensayo estaba compuesto este a?o por Salvador Clotas, Rom¨¢n Gubern, Xavier Rubert de Vent¨®s, Fernando Savater y Jorge Herralde.
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