La izquierda francesa da la espalda a Jospin
ENRIC GONZ?LEZ La campa?a electoral para la presidencia de Francia comenz¨® ayer oficialmente. Y, a falta de 15 d¨ªas para la primera vuelta, la izquierda segu¨ªa amenazada de una desastrosa muerte s¨²bita en la votaci¨®n del 23 de abril, s¨®lo comparable al desastre de 1969. El candidato socialista Lionel Jospin no logra despegarse de ?douard Balladur, lanzado a un fren¨¦tico carrusel de desplazamientos y m¨ªtines, y sus llamamientos al voto ¨²til son deso¨ªdos por comunistas, ecologistas y extrema izquierda. El propio Jacques Delors, presidente del comit¨¦ de apoyo a Jospin, critica a su supuesto ahijado pol¨ªtico: "Debe, lograr que los franceses le conozcan mejor", dijo el ex presidente de la Comisi¨®n Europea.
La izquierda le da la espalda a Lionel Jospin. Ni la oferta de participaci¨®n en el Gobierno, en caso de victoria, ni los dram¨¢ticos llamamientos para una uni¨®n de la izquierda antes de la primera vuelta han convencido al candidato comunista Robert Hue. Los comunistas quieren salir de la marginalidad en que les encerr¨® Fran?ois Mitterrand, y sus perspectivas son relativamente satisfactorias: la falta de empuje de Jospin les ha permitido subir en los sondeos, desde el 7% a finales de enero al 9,5% en la actualidad. Su an¨¢lisis es sencillo: Jospin no. puede ganar, aunque pase a la segunda vuelta. ?Para qu¨¦, entonces, echarse en sus brazos? Mejor. reunir un capitalito de votos que les permita negociar, desde una posici¨®n de fuerza, candidaturas ¨²nicas con los socialistas para las municipales de Junio.Lo mismo piensan la candidata de Los Verdes, Dominique Voynet (a quien la retirada de los otros dos aspirantes ecologistas -el conservador Brice Lalonde y el independiente Antoine Waechter- ha permitido subir del 1% al 2,5%), y la de Lucha Obrera, la trotskista Arlette Laguiller, que sue?a con alcanzar el 5%. "Si Lionel Jospin necesita todos los votos de Robert Hue, Arlette Laguiller y los ecologistas, s¨®lo para aspirar a quedar por delante de uno de los dos conservadores [Chirac y Balladur] en la primera vuelta, lo tiene francamente mal para conseguir el 50% de los votos m¨¢s uno en la segunda vuelta", dijo Voynet el jueves en un mitin.
El distanciamiento de la izquierda respecto a Jospin se ha introducido en el propio Partido Socialista (PS). Y no s¨®lo entre sus viejos enemigos, como Laurent Fabius, Henri Emmanuelli y Jack Lang. El propio Jacques Delors, que preside el comit¨¦ de apoyo del candidato y, supuestamente, deber¨ªa respaldarle sin condiciones, ha roto un largo y revelador silencio para mostrar la tibieza de sus sentimientos respecto a Jospin. Admiti¨® p¨²blicamente, en una entrevista televisada el jueves por la noche, que el principal candidato de la izquierda no lograba darse a conocer ni transmitir su programa.
Y, sobre todo, el sabio de Bruselas repiti¨® el an¨¢lisis que le llev¨® a renunciar a su propia candidatura, seg¨²n el cual la izquierda ser¨ªa incapaz de conseguir una mayor¨ªa parlamentaria aunque obtuviera la presidencia. "Lionel Jospin piensa que la campa?a presidencial es ina ocasi¨®n ¨²nica para unir fuerzas m¨¢s alla del PS. Mi opini¨®n no es ¨¦sa", afirm¨® Delors. El mensaje qued¨® di¨¢fano. Si un peso pesado como Jacques Delors no ten¨ªa posibilidades de ejercer un poder real frente a la derecha hegem¨®nica, ?c¨®mo, pod¨ªa tenerlas un peso medio como Lionel Jospin? Los sondeos son claros respecto a la cabeza de la clasificaci¨®n, que sigue ocupando Jacques Chirac. Pero son confusos respecto al segundo y decisivo lugar, ya que unos sit¨²an a Josp¨ªn y otros a ?douard Balladur. El primer ministro candidato ha protagonizado una notable recuperaci¨®n. y encara una fren¨¦tica recta final. Se dice convenido de enfrentarse a Jacques Chirac en la segunda vuelta, en un duelo puramente personal, sin apenas diferencias pol¨ªticas, que desgarrar¨¢ forzosamente a la derecha y conceder¨¢ la preeminencia a una de sus dos grandes formaciones: al gaullismo populista y nacionalista si gana Chirac o al conservadurismo europe¨ªsta y tecnocr¨¢tico si gana Balladur. Este ¨²ltimo viaj¨® ayer a Clermont-Ferrand, la capital de la regi¨®n de Auvergne, feudo del ex presidente Val¨¦ry Giscard d'Estaing, y se entrevist¨® con ¨¦l. Giscard ha sido durante casi veinte a?os el m¨¢s feroz enemigo de Chirac, pero ahora simpatiza con su candidatura.
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