Paride Taban, el obispo errante

Paride Taban, el obispo errante de Sud¨¢n, no tiene pelos en la lengua. "El Gobierno fundamentalista isl¨¢mico de Jartum trata a todos los negros como rebeldes y considera que m¨¢s tarde, lo m¨¢s temprano deben morir". As¨ª se dirigi¨® a los delegados de una convenci¨®n de la guerrilla cristiana del Ej¨¦rcito Popular de Liberaci¨®n de Sud¨¢n (SPLA), en la que pidi¨® a las facciones guerrilleras, ferozmente enfrentadas entre s¨ª, que se unieran frente al enemigo com¨²n. Torit, la capital de su di¨®cesis, de 600.000 almas, en la provincia de Ecuatoria Oriental, al sur del Sud¨¢n, est¨¢ ocupada por el Gobierno de Jartum, y eso le obliga a viajar continuamente: "Voy con mi cantimplora y mi tienda de campa?a. Pero. puedo viajar hasta. 5.000 kil¨®metros (los que llevo recorridos en mi coche desde enero pasado) sin encontrarme con las tropas del Gobierno. Sigo el mandato de Jes¨²s, voy abriendo camino". En Narus, a unos 40 kil¨®metros de la frontera con Kenia, territorio liberado, como denominan al que est¨¢ bajo control de la guerrilla, tiene su sede provisional: tres edificios humildes, una huerta, un pozo y varios veh¨ªculos.Para el obispo -que bromea sobre su apellido: "Taban significa cansado en ¨¢rabe, por eso yo nunca puedo estar cansado" -es f¨¢cil ver la opresi¨®n en el sur de Sud¨¢n, "como Mois¨¦s la ve¨ªa bajo los egipcios". Sobre las denuncias de violaciones de los derechos humanos y de violencia inter¨¦tnica fomentada por los grupos guerrilleros, lanzadas por organizaciones como Anmistia Internacional, admite que ha. habido casos, que explica por el cansancio de una guerra de casi cuarenta a?os y por la habilidad del Gobierno para propiciar las escisiones entre la oposici¨®n armada. Pero la de Sud¨¢n es una guerra olvidada. "A la gente le gusta ver problemas que puede resolver, y Sud¨¢n es demasiado complicado. Sud¨¢n no tiene nada atractivo para el mundo".

.El obispo Taban, de 59 a?os, nacido en Opare, cerca de la frontera con Uganda, tiene claro qui¨¦n es el enemigo: "A finales de febrero pasado el Gobierno. volvi¨® a bombardear con aviones Antonov desde muy alto campos de desplazados. Les acusan de dar comida a los guerrilleros del SPLA. Lo ¨²nico que buscan es aterrorizar a la gente. Lo que hace el Gobierno isl¨¢mico. de Jartum s¨®lo tiene un nombre: terrorisfflo". Taban est¨¢ habituado a buscar protecci¨®n en los refugios antia¨¦reos excavados en el suelo para cuando el fuego viene del cielo. De Roma prefiere no hablar, pero se r¨ªe a mand¨ªbula batiente cuando se le pregunta qu¨¦ hace la jerarqu¨ªa vaticana por sus fieles sudaneses: "Rezan mucho por nosotros".