Testigos en la sombra
EL JUICIO seguido estos d¨ªas contra varios presuntos miembros de los GRAPO y el celebrado, ayer, en L¨¦rida por la muerte de. un joven en una discoteca han puesto a prueba, por primera vez, la viabilidad procesal de la recientemente promulgada Ley Org¨¢nica de Protecci¨®n de Testigos y Peritos en causas criminales. Varios testigos contra los que podr¨ªan temerse represalias han prestado su testimonio ocultos a la vista del p¨²blico, aunque plenamente identificados ante el tribunal y las partes.La nueva normativa responde a una necesidad largamente sentida en la experiencia diaria de los tribunales: garantizar la seguridad de los testigos y peritos comparecientes ante eventuales amenazas de] procesado o de. su entorno. Una seguridad que, obviamente, se encuentra m¨¢s en peligro en supuestos de delincuencia organizada, sea terrorista o de otro tipo, pero que tambi¨¦n puede verse cuestionada en casos delictivos de fuerte impacto social, como las agresiones sexuales. La normativa puesta en vigor en Espa?a, muy parecida a la existente en otros pa¨ªses, deja en manos de los jueces la decisi¨®n de otorgar o no esa protecci¨®n. Y tambi¨¦n la de acompasar las medidas protectoras a los principos b¨¢sicos de] proceso penal, muy especialmente a los de publicidad e informaci¨®n.
Si la pr¨¢ctica judicial no desvirt¨²a sus objetivos, esta ley supondr¨¢ un paso sin precedentes en Espa?a para acabar con la impunidad en muchos ¨¢mbitos delictivos. Ello es responsabilidad, en primer lugar, de los jueces. De ellos depender¨¢ que se aplique sin que sufran las garant¨ªas del proceso. Pero tambi¨¦n es responsabilidad de los abogados de la defensa no desvelar en ning¨²n caso la identidad de los testigos y peritos amenazados. ?Estar¨¢n dispuestos a cumplir este deber de reserva algunos de los defensores que act¨²an en las causas por terrorismo o narcotr¨¢fico? Si no fuera as¨ª, esta ley servir¨ªa de poco. Y lo mismo si, por falta de medios -frecuente en el ¨¢mbito de la justicia-, la protecci¨®n acordada se queda en el papel y no se aplica con eficacia.
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