El Sevilla pone en aprietos al Racing

El Sevilla dej¨® al Racing con cuatro negativos y en muy delicada posici¨®n. Los andaluces merecieron la victoria ante un cuadro santanderino que s¨®lo se aproxim¨® al ¨¦xito en los diez primeros minutos de la segun da parte.El Sevilla, con un balompi¨¦ tranquilo y organizado, esperando la efectividad del contragolpe, se adelant¨® en el marcador en el ¨²ltimo segundo de. la primera mitad. Merecieron los andaluces la diana porque. durante todo ese periodo ellos impusieron el ritmo y crearon el peligro ante la porter¨ªa rival.

El Racing se present¨® con s¨®lo 13 profesionales de su plantilla, y dos de ellos medio lesionados, en condiciones de hacer frente al compromiso. La baja de Radchenko pareci¨® pesar m¨¢s en las filas locales que las de Dumitrescu y Suker en las de Sevilla. Las ausencias fueron suplidas con acierto por los sevillistas y no por los norte?os. El p¨²blico de Santander no olvid¨® la presunta persecuci¨®n arbitral y a las primeras de cambio, en el minuto 6, obsequi¨® al ¨¢rbitro con una pa?uelada general por un penalti inexistente de Martag¨®na Christiansen. Las quejas, acompa?adas por m¨¢s de me dia docena de pancartas contra S¨¢nchez Arminio, hombre de la tierra c¨¢ntabra y responsa ble de los ¨¢rbitros.

En el Racing s¨®lo Mutiu, robando balones y saliendo al contragolpe, cre¨® algo. En el Sevilla, Moacir mand¨® con seriedad y autoridad bien secundado por su l¨ªnea media. En contrapartida, Torre y Seti¨¦n, otrora creadores e imaginativos, estuvieron torpones y lanzando constantes pedradas a sus delanteros.

Antes del gol, al borde ya del descanso, las oportunidades fueron siempre andaluzas. Tevenet, en los minutos 10, 32 y 41 se erigi¨® en el delantero que hac¨ªa olvidar a Suker en todo menos en la consecuci¨®n de goles. Moya, solo ante Ceballos, tampoco fue capaz de batirle. En la porter¨ªa andaluza apenas hubo m¨¢s que lanzamientos desde larga distancia e incapacidad general.

Hist¨®ricamente el Racing era el verdugo del Sevilla, apelativo con el que se le conoci¨® en la primera mitad del siglo. Sin embargo, ayer el verdugo del Racing fue el conjunto andaluz.