'El abuelo' presidente
Con una vitalidad envidiable y una agilidad mental sorprendentes para su edad, Alfonso Solans Serrano, de 72 a?os, preside el club de moda del f¨²tbol espa?ol. Es un empresario hecho a s¨ª mismo, que fragu¨® su fortuna a partir de un peque?o taller con tres empleados. En la ¨²ltima etapa de su vida ha encontrado en el f¨²tbol el reconocimiento social que nunca tuvo pese a dirigir una de las diez primeras empresas radicadas en Arag¨®n.Solanas es el propietario ¨²nico de la f¨¢brica de colchones Pikol¨ªn y un personaje inaccesible para los periodistas. Comenz¨® a trabajar, rondando la veintena, en un taller de metal. Los muelles le llevaron a los colchones y poco a poco fue viendo crecer la peque?a empresa familiar, hasta que en los a?os sesenta dio el salto. Comenz¨® a instalar f¨¢bricas en los cinco continentes, hasta conseguir que sus colchones se vendan hoy en todo el mundo.
Poseedor de una de las tres primeras fortunas de Arag¨®n, ha invertido algo, m¨¢s de 400 millones de pesetas para hacerse con el control del Zaragoza. Esta cifra le permite poseer dos terceras partes de las acciones de la sociedad, que comparte con su hijo, del mismo nombre. Tuvo que valerse, sin embargo, de sus buenas relaciones con el ex presidente Jos¨¦ ?ngel Zalba para conseguirlo, ya que otro grupo empresarial present¨® una oferta id¨¦ntica a la suya.
Obsesionado por la seguridad desde que la polic¨ªa descubri¨® hace a?os un plan de los GRAPO para secuestrarle, sigue dirigiendo a diario la f¨¢brica de colchones, desde su sede central en la carretera que une la capital aragonesa con Logro?o. Jam¨¢s concede entrevistas y sus apariciones p¨²blicas se producen de a?o en a?o. Se vincul¨® al deporte hace algo m¨¢s de dos d¨¦cadas, patrocinando las camisetas del Zaragoza.
Tanta cautela qued¨® hecha a?icos cuando se incorpor¨® al Zaragoza. Entonces Solans abri¨® las puertas de su casa a las c¨¢maras de televisi¨®n, comenz¨® a aparecer por el palco de La Romareda y hasta decidi¨® seguir en determinados partidos al equipo. Con los ¨¦xitos tambi¨¦n se sum¨® al delirio colectivo. Su compostura y discreci¨®n tradicionales dieron paso a un hombre que se pone la camiseta del equipo en el palco o responde a los v¨ªtores de los aficionados dando saltos. Tanto respeto hab¨ªa por sus costumbres que tuvo que aparecer por iniciativa propia, tras la eliminaci¨®n del Feyenoord, por la sala de prensa. Ante las miradas at¨®nitas de los periodistas, anunci¨® que todos los beneficios de esta campa?a se dedicar¨¢n a fichajes. De paso, lanz¨® un aviso al Madrid y al Bar?a.
El Abuelo, como cari?osamente le llama la plantilla desde que dijera que V¨ªctor Fern¨¢ndez era para ¨¦l como un hijo, no ha, interferido en la planificaci¨®n del club m¨¢s que para fijar la necesidad de sanear sus arcas, objetivo que ya ha conseguido, y proponer la construcci¨®n de un equipo grande, "que lleve el nombre de Arag¨®n por el mundo".
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