EE UU considera apoyar las reformas econ¨®micas de Castro para evitar un cambio violento en Cuba

La Administraci¨®n norteamericana est¨¢ considerando la posibilidad de apoyar paulatinamente las reformas econ¨®micas introducidas por el r¨¦gimen de Fidel Castro como la¨²nica v¨ªa de evitar un estallido social en la isla que obligar¨ªa a una intervenci¨®n militar no deseada en Washington. Esa nueva pol¨ªtica, que comenz¨® a perfilarse este mes con un acuerdo migratorio con La Habana y quefue apuntada esta semana por funcionarios del Departamento de Estado ante el Congreso, situar¨ªa en el futuro las relaciones con Cuba en un plano similar al de V¨ªetnam y algo inferior al de China.

Los principales argumentos en favor de esa pol¨ªtica, que modificar¨ªa m¨¢s de treinta a?os de f¨¦rrea hostilidad hacia el r¨¦gimen nacido de la revoluci¨®n, fueron suministrados en marzo pasado por un informe secreto del Pent¨¢gono que ahora ha sido dado a conocer.Oficialmente, portavoces estadounidenses niegan que se haya producido todav¨ªa un cambio de la pol¨ªtica tradicional, simbolizada en el embargo econ¨®mico, pero varios funcionarios han hablado en privado de la necesidad de abrir un di¨¢logo constructivo con La Habana para negociar una transici¨®n aceptable para ambas partes.

El viernes, el secretario de, Estado, Warren Christopher, reconoci¨® por primera vez que se est¨¢n produciendo en Cuba "ligeros movimientos en direcci¨®n la econom¨ªa de. rnercado". Y vicesecretario de Estado, Peter Tarnoff, reconoci¨® que la Administraci¨®n est¨¢ "explorando v¨ªas compatibles con el Acta para la Democracia en Cuba, que permitan impulsar a las fuerzas que trabajan por el cambio". La Administraci¨®n de Bill Clinton rompi¨® ya, como consecuencia del acuerdo migratorio, su dependencia del exilio derechista de Miami, lo que imped¨ªa antes cualquier tipo de aproximaci¨®n a Castro.

Escenarios del cambio.

Esta nueva visi¨®n de las relaciones con Cuba ha sido principalmente provocada por las conclusiones de un informe del Pent¨¢gono que predice, como escenario m¨¢s probable, una peque?a mejora de las condiciones econ¨®micas en la isla y la consolidaci¨®n de Castro en el poder con controlables manifestaciones de protesta.

El peor escenario imaginable en el informe del Pent¨¢gono es la imposici¨®n de un Gobierno formado por el exilio cubano, que encontrar¨ªa resistencia militar en la isla y "requerir¨ªa un extenso apoyo del Ej¨¦rcito de Estados Unidos".

Los autores del informe, profesores norteamericanos y rusos dirigidos por N¨¦stor S¨¢nchez, un. antiguo agente de la CIA que trabaj¨® en el Pent¨¢gono durante la Administraci¨®n de Ronald Reagan, consideran que existe un 40% de probabilidades de que el escenario de los pr¨®ximos dos a cuatro a?os sea el siguiente:

- Continuaci¨®n de la liberalizaci¨®n econ¨®mica.

- Disminuci¨®n del descontento hacia Fidel Castro.

- Incremento de la influencia de Ra¨²l Castro y de las Fuerzas Armadas.

- Peque?os disturbios populares y emigraci¨®n ?legal.

En todos los dem¨¢s escenarios contemplados, con o sin F?del Castro -desde la radicalizaci¨®n de las reformas econ¨®micas hasta el fracaso de ¨¦stas, la lucha interna para sustituir a Fidel o la guerra civil-, Cuba se convertir¨ªa en una preocupaci¨®n prioritaria de Estados Unidos hasta el grado de que podr¨ªa hacerse necesaria una intervenci¨®n militar.

Por tanto, del informe se desprende la conveniencia de que el Gobierno norteamericano respalde las reformas actualmente en marcha -pese a que eso suponga la consolidaci¨®n de Castro-, no s¨®lo porque es la salida m¨¢s probable, sino tambi¨¦n la que menos sacrificios exigir¨ªa a Estados Unidos.

En todo caso, aun si la Administraci¨®n norteamericana se mantiene inactiva en relaci¨®n a Cuba, Fidel Castro tiene posibilidades de salir adelante. "Si demuestra visi¨®n y capacidad para afrontar los desaf¨ªos econ¨®micos, puede continuar en el poder en los dos a cuatro a?os que analiza este estudio", asegura el informe. "A menos que se produzca un desastre natural", a?ade el documento, las condiciones generales mejorar¨¢n en Cuba. Pero no mucho. Y no sin la necesidad de tomar otras medidas para atraer la inversi¨®n extranjera y aumentar la producci¨®n nacional. En t¨¦rminos relativos, la mayor¨ªa de los cubanos estar¨¢n m¨¢s esperanzados sobre su futuro, sobre todo si se compara con los oscuros d¨ªas de 1993-1994".

El informe advierte que una radicalizaci¨®n inmediata de las reformas econ¨®micas, como la privatizaci¨®n de las empresas p¨²blicas o la cancelaci¨®n de los subsidios, provocar¨ªa graves tensiones pol¨ªticas en el liderazgo de Cuba y obligar¨ªa a Estados Unidos a prestar "atenci¨®n especial" a la isla.