A la espera del "c¨²mplase"

Pendiente la reacci¨®n de Manuel Contreras a su apresamiento para el cumplimiento de una sentencia de siete a?os de c¨¢rcel, su aplicaci¨®n puede demorar entre cuatro y doce d¨ªas, seg¨²n fuentes judiciales. El expediente del fallo vuelve ahora al juez de primera instancia, Adolfo Ba?ados, quien deber¨¢ ordenar el "c¨²mplase" y las medidas pertinentes para ejecutar la resoluci¨®n emitida por la Cuarta Sala de la Corte Suprema.En principio ser¨¢ la Polic¨ªa de Investigaciones el cuerpo encargado de cumplir las instrucciones del magistrado, pero no se descarta que en atenci¨®n a las dificultades del caso que se acepte su sustituci¨®n por una dotaci¨®n militar. No hay nada definitivo y la prioridad del Gobierno es lograr un cambio de actitud por parte del desafiante condenado, decidido a no pisar la c¨¢rcel. "Nadie sabe cu¨¢les son sus planes, pero una resistencia a tiros, aunque tendr¨ªa gente que le acompa?e, parece descabellada", dijeron las fuentes consultadas. Hasta ahora no se ha informado sobre la presencia de grupos armados dispuestos a la lucha en el interior del Viejo Roble. No se descarta tampoco que trate de ingresar en un hospital militar, internamiento que dificultar¨ªa su encarcelamiento. Con un c¨¢ncer de est¨®mago desde 1985, Contreras, 66 a?os, parace haberse recuperado, seg¨²n inform¨® su hijo, Manuel Contreras Valdebenito.

La tramitaci¨®n m¨¢s probable del expediente es que sea entregado a los abogados de Manuel Contreras y Pedro Espinoza, militar en activo en un departamento de comunicaciones del Ej¨¦rcito.

Otra de las posibilidades legales es citar a los dos reos a la Comandancia de Guarnici¨®n, a la Corte de Apelaciones o ante la presencia del juez Ba?ados, o hacerles entrega personal de la orden de ingreso en la c¨¢rcel en sus domicilios. Espinoza, en Santiago, se declar¨® dispuesto al acatamiento. Si Contreras se niega a la observancia del fallo, los mensajeros del juez pueden dejar la citaci¨®n en la puerta de su finca de Frisia, al sur de Chile. Y en ¨²ltimo caso, si el general jubilado se opone a la entrada de personal policial en sus tierras, el magistrado de primera instancia puede emitir una orden de allanamiento y proceder el cuerpo de Carabineros o Investigaciones a su detenci¨®n por la fuerza.