'Me gustar¨ªa que el 'homo zappiens' fuera 'homo selectivus'

Dirige y presenta en Onda Cero el magazine La radio de Julia (premio Ondas 1994) y es una de las estrellas de la radio vespertina. El concurso Tres por cuatro y los programas La Luna y La ronda instauraron durante los ochenta su largo idilio con la televisi¨®n p¨²blica. El pasado mi¨¦rcoles su programa de entrevistas Un paseo por el tiempo (TVE-1) consigui¨® la m¨¢xima audiencia del d¨ªa. El pr¨®ximo 27 de julio se despedir¨¢ de los telespectadores.Pregunta. La han definido como una comunicadora con buena imagen y mucho morbo. Un status-symbol de la Espa?a socialista. ?Se siente a gusto en este traje?

Respuesta. La imagen p¨²blica de cualquier persona es normalmente un traje hecho. Sin tomar medidas. En algunos lugares encaja y en otros aprieta o queda ancho. La fama, como dec¨ªa Rilke, es el conjunto de los malos entendidos que se vierten sobre un nombre.

P. ?Qu¨¦ hallazgos ha trasvasado de la radio a la televisi¨®n y viceversa?

R. En la comunicaci¨®n, lo que se trasvasa es la vida. El buen comunicador traza vasos comunicantes entre los medios donde trabaja, lo que le rodea y la gente que lo ve o escucha.

P. Un paseo por el tiempo (Un tomb per la vida) tuvo su ¨¦xito en TV-3 con Joaquim Maria Puyal. ?Ha mejorado la f¨®rmula?

R. El formato que cre¨® Puyal es tan acertado que permite ajustarse a otra personalidad. S¨®lo los buenos programas admiten versiones, y ¨¦stas no tienen por qu¨¦ ser mejores o peores. Son distintas.

P. Poderes f¨¢cticos, artistas y far¨¢ndula o gente corriente. ?Cu¨¢l de estos terrenos le resulta m¨¢s c¨®modo y nutritivo?

R. Para m¨ª lo nutritivo es hablar con personas que encuentran sus razones y, palabras en la cabeza o en el coraz¨®n. No en la consigna o la estrategia y desde la esclavitud de mantener una imagen p¨²blica.

P. ?A qui¨¦n se arrepiente de haber entrevistado?

R. No puedo arrepentirme porque nunca he partido de un prop¨®sito innoble. Que haya resultado mejor o peor despu¨¦s es anecd¨®tico.

P. ?En qu¨¦ plaza ha querido y no ha podido torear?

R. En las arenas de La Moncloa. Felipe Gonz¨¢lez nunca ha aceptado mi invitaci¨®n, pero le prometo que hay cosas que me hacen m¨¢s infeliz.

P. Es usted una resistente nata a las tentaciones de la televisi¨®n privada. ?Cu¨¢l es su papel actual en la televisi¨®n p¨²blica?

R. Lo de resistente me suena a terminolog¨ªa b¨¦lica. No es eso. Mi papel en este momento es hacer un programa semanal con el mayor mimo, entusiasmo y rigor posible.

P. ?Cu¨¢ntas veces le han pedido que hiciera "circo de la materiasensible"? ?Por qu¨¦ ha rechazado el telemorbo?

R. No me siento mejor o peor que otros. Sencillamente desconozco ese idioma, y puestos a aprender.... ?tengo tanto donde escoger!

P. ?Lo mejor suyo es la capacidad de comunicaci¨®n o su erotono de voz?

R. No s¨¦. Creo que lo que sabemos de nosotros mismos es una mezcla de lo que nos dicen que somos y lo que en realidad somos. Si fuera una funcionaria de Correos, probablemente -nadie hablar¨ªa de mi erotono...

P. ?Ad¨®nde van a parar los ramos de flores y las 600 cartas y llamadas de amor y admiraci¨®n que recibe de su audiencia?

R. A una memoria agradecida que sabe los buenos servicios que presta en los momentos dif¨ªciles.

P. ?Qu¨¦ opina del tratamiento informativo que los medios dieron a la tragedia de la familia Flores?

R. Seis d¨ªas antes del Paseo por el tiempo que est¨¢bamos elaborando con Antonio Flores muri¨® su madre. Obviamente se suspendi¨® el programa. Cre¨ª que no lo har¨ªamos porque no estaba dispuesta a intentar convencerle. Fue ¨¦l quien decidi¨® llamar pasados unos d¨ªas para decimos que mantendr¨ªa sus compromisos previos. ?Sabe cu¨¢l fue mi respuesta? Que har¨ªamos el Paseo... s¨®lo si se sent¨ªa libre para hacerlo, no por compromiso moral con nuestro equipo.

P. ?C¨®mo son y a qu¨¦ se parecen los consejos de redacci¨®n de sus programas?

R. Le dir¨¦ una m¨¢xima de trabajo que me gusta: "Ir rigurosamente preparada para poder ir improvisando".

P. ?Qui¨¦n tiene m¨¢s poder: los programadores, los comunicadores o el homo zappiens con el mando-dial en la mano?

R. Aqu¨ª y ahora, el poder es el de los ¨ªndices de audiencia. Sin embargo, lo que verdaderamente tiene poder es aquello que atraviesa el tiempo y permanece en la memoria de la gente.

P. ?Qu¨¦ opina del homo zappiens?

R. Me gustar¨ªa que fuera el predecesor del homo selectivus, Y ¨¦se, el que escoge, si tiene donde escoger, claro, es el homo sapiens.