"Gil y Gil es el ser m¨¢s tierno que he conocido"
Cantante, pianista, arist¨®crata, inteligente, fue buscavidas, luchador de catch, taxista, sabe beber una copa de La Romann¨¦ Conti, el vino mundial de Borgo?a... ?Y, en pocas palabras?: "Soy algo que pasa por la vida sin dejar rastro. Nadie deja rastro". ?Qu¨¦ bellas son las met¨¢foras inciertas!
Pregunta. Don Jaime, ?con qu¨¦ canci¨®n, al piano, comenzamos este di¨¢logo?
Respuesta. Hojas muertas.
P. ?Y con qu¨¦ verso seguimos?
R. "Volver¨¢n las oscuras golondrinas...".
P. ?Con qu¨¦ brindamos?
R. Con Rioja.
P. ?Por qu¨¦ personaje mundial chocamos nuestras copas?
R. Por C¨¦sar G. Ruano.
P. Don Jaime de Mora, arist¨®crata: ?c¨®mo se reconoce arist¨®crata hoy?
R. Me da la risa cacia vez que me dicen arist¨®crata; soy popular -y no famoso- por la barba, por mi coraz¨®n...
P. Por eso, entonces, una rubia joven, fulgurante y bella, acaba de regalarle ante mis ojos ese repollo y esos tomates.
R. S¨ª, el repollo es una obra de arte: por lo redondo, el color, la forma de las hojas...
P. Don Jaime de Mora, jefe de Protocolo de la Delegaci¨®n de Turismo del Ayuntamiento de Marbella: ?c¨®mo debo tratarle?
R. Como Jaime y sin protocolo.
P. ?Qu¨¦ profesi¨®n am¨® m¨¢s?
R. La de pianista.
P. Sus relaciones con su coraz¨®n han sido ¨ªntimas: ?qu¨¦ le parece la vida?
R. Es como el repollo: redonda, bonita, un poco agria a veces, entra?able; pero, como el repollo, no alimenta, hay que tomarla con algo.
P. ?Habl¨® ya con la muerte?
R. S¨ª, y me he visto muerto.
P. ?C¨®mo se encontr¨®?
R. No muy mal, porque era verano y estaba moreno.
P. ?Pujol es socialista?
R. Es bajito m¨¢s bien.
P. ?Gonz¨¢lez es socialista?
R. No.
P. ?La Faraona era la pandereta de Espa?a?
R. Era gran amiga m¨ªa y dijo que si viviera en una isla desierta se llevar¨ªa "un par de casta?uelas y a Jaime de Mora.
P. ?Almod¨®var es el mejor?
R. No voy nunca al cine. Ni al teatro.
P. ?Qui¨¦n invent¨® Marbella?
R. La gente de Marbella.
P. ?De Gil y Gil puede decir algo nuevo?
R. S¨ª, es el ser m¨¢s tierno que he conocido.
P. ?Cu¨¢ntos relojes de pulsera tiene?
R. Me robaron 13 en un banco y ahora me quedan tres.
P. ?Ha sido usted virgen alguna vez?
R. De ni?o ya fui mam¨®n.
P. ?Hablamos de su maravillosa esposa Margitte?
R. Siiiiii¨ª... Es mi bast¨®n, mis muletas, mi raz¨®n de existir; es todo lo que le deseo a quien est¨¦ casado.
P. ?Decimos el nombre de su hermana?
R. Compre un sello belga y ver¨¢.
P. ?Le env¨ªa una recomendaci¨®n a Indur¨¢in?
R. Soy enemigo personal del deporte.
P. ?La vida es una broma?
R. Es una s¨¢tira.
P. ?La vida es su amor?
R. Yo soy el amor de mi vida.
P. ?El celibato de los curas es de carne o de hueso?
R. Yo creo que es de hueso.
P. Jaime, si se le contempla de frente es usted un poema: ?qu¨¦ dice su bigote?
R. ?Si pudiese hablar!
P. ?A qui¨¦n habla su perilla?
R. Es el acompa?amiento de mi palabra.
P. ?Y qu¨¦ explica la cadena de su chaleco?
R. Es poder¨ªo.
P. ?Qu¨¦ es su elegancia?
R. No creo en los genes.
P. Cuando monta en moto Harley Davidson, ?qu¨¦ nota?
R. Un poder enorme entre las piernas.
P. ?Qu¨¦ odia?
R. La hipocres¨ªa y la envidia.
P. ?S¨ª? ?Y por qu¨¦ es espa?ol?
R. ?Lo soy?
P. ?C¨®mo se lleva con el dinero?
R. Muy bien.
P. ?De qu¨¦ sabe m¨¢s usted?
R. De dinero.
P. ?Qu¨¦ es el verano?
R. Algo espantoso, porque no sudo.
P. ?Qu¨¦ le gustar¨ªa que fuera el oto?o?
R. No la antesala del invierno.
P. La verdad, para que sea verdad, hay que inventarla. Si est¨¢ de acuerdo, Jaime, invente una verdad, se lo ruego.
R. Soy totalmente feliz.
P. ?Frecuenta prostitutas?
R. ?Eso con qu¨¦ se come?
P. ?Manda m¨¢s en Marbella usted, el pr¨ªncipe de Hohenlohe, Gil y Gil o los jeques?
R. Poderoso caballero es Don Dinero.
P. ?Quiere dibujar con palabras a Gunilla von Bismark?
R. Es la mejor relaciones p¨²blicas que ha tenido Marbella.
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