Argel da por fracasado el di¨¢logo con los islamistas

El di¨¢logo del Gobierno de Argel con el Frente Isl¨¢mico de Salvaci¨®n (FIS) ha fracasado otra vez. Esto es lo que se desprende de un comunicado oficial emitido ayer por la presidencia de la Rep¨²blica, pr¨¢cticamente a la misma hora en que se conoc¨ªa el asesinato a tiros de un dirigente y fundador del FIS, el imam Abdelbaki Saharaui, perpetrado en una mezquita de Par¨ªs por supuestos militantes de la organizaci¨®n rival, Grupo Isl¨¢mico Armado (GIA).

La nota oficial de la presidencia de la Rep¨²blica asegura que los contactos entre el Gobierno argelino y el dirigente del FIS, Abassi Madani, culminaron con un principio de acuerdo, pero que posteriormente ¨¦stos fueron rechazados por el resto de los dirigentes islamistas, tras un mes de debates internos, entre el n¨²mero uno de la organizaci¨®n islamista y otros seis de sus compa?eros.El acuerdo de principio, redactado por el propio n¨²mero uno del FIS, establec¨ªa un calendario para pacificar el pa¨ªs, que se iniciaba con un llamamiento del propio Madani a los grupos armados para que cesaran la violencia, lo que equivale al establecimiento de una tregua. Como contrapartida, el Gobierno decretar¨ªa la libertad o el arresto domiciliario de los l¨ªderes del FIS encarcelados, Abasi Madani entre ellos. Una vez cumplida esta primera etapa, los grupos integrista depondr¨ªan las armas y el FIS volver¨ªa a la actividad pol¨ªtica bajo otra denominaci¨®n. El proceso culminar¨ªa con una serie de medidas de clemencia o gracia que otorgar¨ªa gradualmente la liberaci¨®n de todos los militantes islamistas detenidos.

Debate interno

Pero antes de rubricar el pacto, Madani pidi¨® consultar el acuerdo con otros seis dirigentes integristas, abriendo de esta manera dentro del FIS un debate interno que dur¨® pr¨¢cticamente un mes y finaliz¨® con el rechazo del pacto inicial, una nueva propuesta y la exigencia de que para continuar el di¨¢logo el Gobierno deb¨ªa previamente otorgar la libertad de los l¨ªderes isl¨¢micos. Esta contraoferta fue consideraba inaceptable por los representantes de la presidencia, quienes abrieron un plazo de reflexi¨®n, que dieron por acabado el pasado lunes 10 de julio.

El comunicado de la presidencia de la Rep¨²blica atribuye al FIS el fracaso, pero deja abierta una puerta a la esperanza, como sucedi¨® en una situaci¨®n similar el pasado octubre. La nota oficial hace referencia as¨ª al mensaje que el propio presidente Liamin Zerual pronunci¨® el pasado 5 de julio, en el que se comprometi¨® a combatir el terrorismo hasta el final, pero insisti¨® tambi¨¦n en la necesidad de mantener un di¨¢logo con aquellas fuerzas que rechacen la violencia.

Pocos minutos despu¨¦s de difundida la nota en Argel, se conoc¨ªa el asesinato del dirigente y fundador del FIS Abdelbaki Saharaui y de su guardaespaldas, perpetrado en una mezquita de Par¨ªs, del barrio XVIII, de la que ¨¦l era imam, desde que se exiliara de Argelia. Saharaui, un hombre moderado y defensor del di¨¢logo, muri¨® abatido de una bala en la cabeza, disparada por una ametralladora dotada de un silenciador.

Casualmente ayer, el peri¨®dico en lengua ¨¢rabe Al Hayat, editado en Londres, reproduc¨ªa en una de sus p¨¢ginas un comunicado del grupo radical GIA, en el que amenazaba de muerte a todos los dirigentes del partido FIS, a los que acusaba de infieles por intentar negociar con el r¨¦gimen de Argel. Saharaui ocupaba el n¨²mero siete de la lista de los condenados a muerte y ya apareci¨® en una lista difundida en mayo. El imam muerto era considerado como un puente de di¨¢logo entre Francia y los integristas isl¨¢micos.

Mientras, en Argelia, los grupos integristas armados, se muestran decididos a pasar a la ofensiva, tal y como se desprende de las acciones efectuadas en los ¨²ltimos d¨ªas y que parecen centrarse por ahora en las conducciones de gas para uso dom¨¦stico que abastecen la capital y el Gran Argel. En poco menos de un d¨ªa, los islamistas han actuado en dos ocasiones contra la red de distribuci¨®n del gas.

Gasoductos saboteados

El primera ataque se llev¨® a t¨¦rmino el pasado domingo por la noche, afectando a una planta de gas situada en Blida, a unos 50 kil¨®metros de la capital, mientras que la segunda tuvo como objetivo un gasoducto a su paso por el t¨¦rmino de Aomar, en la regi¨®n vecina de la Kabilia. En ning¨²n caso los ataques produjeron v¨ªctimas aunque causaron problemas en el suministro de gas dom¨¦stico.

Con estos dos atentados los grupos integristas armados parecen querer recuperar la estrategia utilizada en 1992, cuando se dedicaron a sabotear las instalaciones el¨¦ctricas y las redes telef¨®nicas argelinas. Desde entonces y de forma peri¨®dica estos comandos han venido destrozando gran n¨²mero de puentes, escuelas, f¨¢bricas, as¨ª como otros edificios y bienes propiedad del Estado. S¨®lo en 1994 se contabilizaron cerca de 3.000 actos de sabotaje contra empresas e instalaciones en todo el pa¨ªs, seg¨²n un recuento oficial, causando m¨¢s de 2.000 millones de d¨®lares en p¨¦rdidas (240.000 millones de pesetas).