Alonso de Santos, Plauto y El Brujo hacen juegos de cama en un mercado
El director define as¨ª 'La dulce C¨¢sina', que estrena el mi¨¦rcoles en el Festival de M¨¦rida
"Es una comedia con lenguaje realista, fuerte y escatol¨®gico, que roza lo er¨®tico. Es un juego de cama en un mercado, con humor cercano al que utilizamos Rafa y yo, siempre rozando lo prohibido den tro del peque?o mundo del teatro". As¨ª define el autor y director Alonso de Santos La dulce C¨¢sina, obra de Plauto, producida por Pentaci¨®n, que se estrena el mi¨¦rcoles, d¨ªa 26, en el Festival de Teatro de M¨¦rida, con reparto encabezado por Rafael ?lvarez, El Brujo.
En esta ocasi¨®n, el popular actor no estar¨¢ solo, como es habitual en ¨¦l, en el escenario. Adem¨¢s de una orquesta de cinco m¨²sicos, hay actores como Fernando Chinarro, Berta Labarga, Alfonso Asenjo, Jes¨²s Fuente y Andoni Gracia, entre otros. El Brujo reconoce que para ¨¦l es un aliciente: "Adem¨¢s me conviene, porque, solo, te vas secando, y los compa?eros que tengo en este montaje me arropan no s¨®lo en el sentido esc¨¦nico; se ha creado un ambiente y una forma de trabajar que me recuerdan mucho a nuestras a?oradas ¨¦pocas del teatro independiente". El trabajo de Alonso de Santos a la hora de hacer la versi¨®n ha sido grande, ya que los textos del cl¨¢sico latino, y en especial La dulce C¨¢sina, han llegado muy incompletos a nuestra ¨¦poca debido a que los principales traductores del lat¨ªn estaban en monasterios y mostraban una gran inclinaci¨®n a censurar al irreverente Plauto: "No hay que olvidar", afirma el director, "que los textos de Plauto eran comedias de mercado, de carros, de gente de a pie. Las cr¨ªticas de la ¨¦poca le trataban mal, por lo poco refinado de su esp¨ªritu".
La debilidad de Alonso de Santos por Plauto viene de antiguo y,- de hecho, ¨¦sta es su tercera adaptaci¨®n y direcci¨®n del cl¨¢sico latino: "Desde que le descubr¨ª siendo joven, he tenido la agradable sensaci¨®n de hablar con un amigo cercano, pese a los muchos siglos que nos separan", dice el director.
Seg¨²n Alonso de Santos, ¨¦l a?ade un grano de arena a la obra: "A pesar de que uno siempre tiene la sensaci¨®n, cuando est¨¢ montando, de que ha introducido cosas sorprendentes que luego el p¨²blico las ve como muy normales, creo que ahora van a ver peque?as transgresiones a la cultura, al gran monumento de M¨¦rida, al teatro". Para Alonso, las palabras transgresi¨®n y disidencia est¨¢n muy manidas: "Pero la verdad es que nosotros siempre venimos rozando estos l¨ªmites y m¨¢rgenes de lo que se considera culto, y nos gusta movernos en estos terrenos".
El primer atractivo que encontr¨® el Alonso en El sorteo de C¨¢sina, nombre original del texto, radica en el total desconocimiento que hay sobre esta obra: "Adem¨¢s es una comedia que roza lo er¨®tico, el sexo, un juego de cama en un mercado. Me parece divertido que haya eliminado todo elemento de biblioteca y erudici¨®n, lo que convierte esta obra en simp¨¢tica, muy cercana al tipo de humor que utilizamos Rafa y yo, siempre rozando lo prohibido dentro del peque?o mundo del teatro".
El original ha sufrido una seria adaptaci¨®n: "O nada seria, seg¨²n se mire", a?ade Alonso. No s¨®lo hay fragmentos que nunca han llegado a nuestros d¨ªas, sino que la protagonista de la obra no aparec¨ªa en ning¨²n momento, mientras que aqu¨ª hay un significativo papel que interpreta Mar¨ªa Jos¨¦ Norte. "Como Plauto me dio autorizaci¨®n para ello, yo hago lo que me da la gana", dice. El Brujo, uno de los actores m¨¢s populares de nuestro pa¨ªs, ha logrado hace escasos d¨ªas uno de los r¨¦cords m¨¢s insospechados de la historia del teatro espa?ol: 800 representaciones dedos mon¨®logos, Lazarillo y La sombra del Tenorio, realizados en las salas m¨¢s humildes y en los teatros m¨¢s sagrados de dentro y fuera de Espa?a. "Son espect¨¢culos que podr¨ªa hacer toda mi vida. Para m¨ª son una terapia y me lo paso bomba", dice.
Babelia
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