"Tanto mamoneo es demasiado"

El sufrimiento se prolonga. El Sevilla FC, SAD, tendr¨¢ que esperar unos d¨ªas m¨¢s para conocer en qu¨¦ divisi¨®n jugar¨¢. La ambigua decisi¨®n del Consejo Superior de Deporte (CSD), lejos de tranquilizar a la afici¨®n, ha contribuido a incrementar la incertidumbre de la hinchada y (le los jugadores, quienes ayer se encontraban al borde de un ataque de nervios. Juli¨¢n Mart¨ªnez, un veterano seguidor del equipo, resum¨ªa ayer indignado la situaci¨®n esquizofr¨¦nica en que vive el club de sus amores: "El mamoneo que se est¨¢n montando es demasiao".El aficionado sevillista acudi¨® junto a otros 1.000 seguidores al estadio Ram¨®n S¨¢nchez Pizju¨¢n. Como los dem¨¢s, quer¨ªa conocer en directo la resoluci¨®n que iba a dictar el CSI) por boca de Rafael Cort¨¦s Elvira.Eran lo! momentos previos a la intervenci¨®n. Los gritos de "Sevilla Sevilla", surg¨ªan espor¨¢dicamente. Otros en contra del Albacete eran jaleados con igual agrado., Pero las voces- no estaban bien afinadas. Una pena les carcom¨ªa por dentro. Jes¨²s, un miembro de la pe?a Biri-Biri, dejaba de flamear la bandera del equipo y le confesaba a su compa?ero: "Quillo, estoy cagao".

Los aficionados de mayor edad marcaban la pauta de los comentarios. Y, visiblemente indignados, no escatimaron sus cr¨ªticas hacia todo lo que significara un peligro. Cuando por la radio se escuchaban declaraciones de alg¨²n directivo del Valladolid, acto seguido llegaba la r¨¦plica. "Y un moj¨®n para t¨ª, desgraciao, que te vas a pasar m¨¢s a?os en Segunda que el Lute en la c¨¢rcel". La mayor¨ªa permanec¨ªa en silencio. Encasquetados los auriculares de la radio, resoplaban una y otra vez.

"?Oye, qu¨¦ dicen por tu emisora?", interrogaba un se?or otro. "Aqu¨ª s¨®lo, ponen m¨²sica respond¨ªa ¨¦ste. "Pues cambia a Canal Sur", le suger¨ªa el primero. "Que no, que ah¨ª est¨¢n hablando de GAL ese". Todo un galimat¨ªas radiof¨®nico que acab¨® a las 18.45. Por fin hablaba Cort¨¦s Elvira y el silencio se hizo sepulcral. Sin embargo, r¨¢pidamente surgi¨® el descontento .Esta larga introducci¨®n del secretario de Estado, antes de entrar en la faena de la sentencia del CSI), alter¨® hasta a los m¨¢s pac¨ªficos.

La cosa se complic¨® a los diez minutos de la intervenci¨®n de Cort¨¦s Elvira. Afirm¨® que la "legalidad y la demagogia no pueden ir juntas". Y, como movidos por un resorte, cientos de aficionados saltaron de sus asientos con los brazos levantados. "Y luego nos vienen con el cuento de que esto no es pol¨ªtica. ?Dimite ya, que es lo que tienes que ha cer! ?In¨²til!". Las quejas no cesa ban: "No va a largar n¨¢". Pero fue entonces cuando, por fin, el secretario habl¨® claro y anunci¨® que el CSD aconsejaba a la Liga la conveniencia de admitir 22 equipos en Primera. Fue como una oleada de aire fresco. "Los ves, que estamos en Primera, Manolo", grit¨® un seguidor. " "Ya te lo dec¨ªa yo, que no tienen huevos para descendernos", apostillaba satisfecho.

En Vigo-parecido. "Es muy dif¨ªcil seguir soportando esta presi¨®n siete d¨ªas m¨¢s y tener que entrenar todos los d¨ªas". Las palabras de Gudelj resumen el sentir general de los jugadores del Celta, que comienzan a experimentar la sensaci¨®n de vivir un secuestro. A las agujetas de todas las pretemporadas se une ahora la preocupaci¨®n de irse cada noche a la cama sin saber si son jugadores de Primera Divisi¨®n.

La plantilla conoci¨® la ambigua resoluci¨®n del CSD mientras se dirig¨ªan en autob¨²s a Santiago para disputar un partido amisto so frente al Compostela. Cuando conocieron el fallo a trav¨¦s de la radio, los jugadores no daban cr¨¦dito. Un silencio sepulcral se hizo due?o del autob¨²s durante el trayecto. Pero al llegar a San tiago, la presencia de los periodistas hizo que los jugadores recobrasen su imagen habitual e n estos d¨ªas. Los m¨¢s veteranos se encargaron de propagar la consigna oficial: "No pasa nada. Estamos en Primera".

Sin embargo, la sangre caliente de alg¨²n jugador acab¨® ganando. "Yo soy capaz de hacer cualquier cosa porque tengo bronca dentro", exclam¨® el argentino Desio, a quien la misma dureza de sus palabras le hizo volver a la cordura: "Ahora hay que mantener la mente: fr¨ªa. Pero si dentro de una semana la decisi¨®n que se toma es mala, entonces b¨²squenme, porque tendr¨¦ algo que decir".

Carlos Aimar, el entrenador del equipo, es el mayor responsable de la actitud de sus jugadores. "Ven¨ªamos en el autob¨²s y en vez de pensar en el partido todos pensaban en lo que dec¨ªa Cort¨¦s Elvira. Parece que es m¨¢simportante que Romario y Stoichkov".

Aunque el Celta perdi¨® su primer partido de la pretemporada (0-1), los jugadores no dejaron de recibir, muestras de cari?o. Un grupo de celtarras les acompa?¨® con sus gritos de ¨¢nimo durante el partido del Compostela no dejaron de tranquilizarles: "Tranquilos, que. est¨¢is en Primera".