El ex comisario ?lvarez hizo un barrido de tel¨¦fonos a Rold¨¢n antes de su huida

XAVIER HORCAJO Luis Rold¨¢n, ex director general de la Guardia Civil, contrat¨® los servicios de Francisco ?lvarez -acusado de formar los GAL- una semana antes de huir de Espa?a. Rold¨¢n sospechaba entonces que alguien ten¨ªa pinchados sus tel¨¦fonos particulares y contrat¨® los servicios de la empresa de ?lvarez, Check-In, para que barriera sus l¨ªneas privadas. ?lvarez, que trabajaba por entonces para Javier de la Rosa y su abogado Juan Piqu¨¦ Vidal, fue el elegido por el jefe de la Guardia Civil para un trabajo de confianza en su domicilio de la calle de Plater¨ªas, n¨²mero 8, de Madrid.

Los hombres de ?lvarez llegaron al domicilio del ya ex director general de la Guardia Civil a avanzada hora de la noche con instrucciones de ser lo m¨¢s discretos posible. Buscaron interferencias telef¨®nicas o micr¨®fonos ocultos y se volvieron a Barcelona. Una semana despu¨¦s, el 29 de abril de 1994, Rold¨¢n desaparec¨ªa. El hecho de que Rold¨¢n recurriera a ?lvarez demuestra en esa ¨¦poca que ya no confiaba ni en sus famosos pata negra y que hizo uso de su antigua relaci¨®n con Francisco ?lvarez, G¨¢lvarez, con el que coincidi¨® en su ¨¦poca de delegado del Gobierno en Navarra. Por entonces, ?lvarez era jefe superior en Bilbao y, posteriormente, fue jefe del Mando ¨²nico Antiterrorista.Los hombres que limpiaron las l¨ªneas de Rold¨¢n aseguran que no encontraron micr¨®fonos en su domicilio habitual, un piso de lujo adquirido por 135 millones de pesetas y escriturado tan s¨®lo por la mitad e incluido como activo de la sociedad patrimonial Europe Capital, propiedad de Rold¨¢n.

Los servicios especiales de los hombres de Check-In a Rold¨¢n pudieron facilitar al equipo de inteligencia-seguridad de Javier de la Rosa informaci¨®n sobre los problemas por los que atravesaba Rold¨¢n en su declive, presionado por las denuncias period¨ªsticas. Por otra parte, el contacto de Rold¨¢n con Espa?a mientras fue pr¨®fugo de la justicia fue a trav¨¦s de otro amigo de ?lvarez, Francisco Paesa, investigado judicialmente como supuesto proveedor de armas de los GAL.

Francisco ?lvarez, ahora inculpado en el caso GAL, gozaba adem¨¢s de la confianza de Luis Rold¨¢n por la relaci¨®n com¨²n de ambos con el general Manuel Llaneras, mano derecha de Rold¨¢n como ex jefe del Servicio de Acuartelamiento (obras) de la Guardia Civil y ex alto mando en Catalu?a. El general Llaneras, imputado en el caso Rold¨¢n y separado de la Guardia Civil, manten¨ªa relaciones comerciales, como ?lvarez, con el abogado de Javier de la Rosa, Piqu¨¦ Vidal. El general encargado de adjudicar los contratos en el instituto armado y ex jefe de la escolta personal del general Franco, era socio de la empresa de autom¨®viles Futurauto, as¨ª como del constructor Jos¨¦ Salido, propietario de una empresa que obtuvo 2.000 millones de contratos de obras de la Guardia Civil.