Gracias, Caminero
De menos a m¨¢s. El partido. El primer tiempo fue p¨¦simo. Los dos equipos se echaron atr¨¢s, a dejarle hacer al otro. Poca gente arriba y mucha atr¨¢s. Pocos espacios y pocas ganas de ingeni¨¢rselas para abrirlos. Y de correr hacia hipot¨¦ticos huecos en apoyo del compa?ero. Al Atl¨¦tico empieza a tentarle el demonio de la pereza, ahora que est¨¢ arriba. El Zaragoza debi¨® de pensar que ya ha cubierto el trimestre con la eliminaci¨®n hace unos d¨ªas del Brujas.Caminero. Con ¨¦l cambi¨® todo. Cuando sali¨® se anim¨® la fiesta. Corri¨®, se ofreci¨®, traslad¨® el bal¨®n, anim¨® a sus compa?eros y gracias a todo eso el Zaragoza se vio tambi¨¦n arrastrado al partido. Lo que parec¨ªa un poco menos que t¨¢citamente pactado dio paso a un segundo tiempo abierto y ofensivo... gracias exclusivamente a Caminero,
Penev. No est¨¢ para nadie. Desde su ¨²ltimo viaje con la selecci¨®n de su pa¨ªs -donde se convirti¨® en banquero, por cierto- no ha vuelto a ser el del comienzo de temporada. Entre eso y que el Atl¨¦tico apenas tiene desborde por las bandas se ve muy limitado en el ataque cuando, como ayer, no est¨¢ fino.
Morientes y Dani. El primero arriba del todo, el segundo llegando desde atr¨¢s, tienen posibilidades de convertirse en una pareja seria, como la que forman Pier y Alfonso. Pero en partidos como el de ayer dejan algo que desear.
Molina-Santi. Dos m¨¦ritos m¨¢s de Antic. Molina, portero sin gran pedigr¨ª, se va convirtiendo poco a poco en lo que su entrenador quiere. Santi nunca admite objeciones.
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