Armas y derechos humanos
La prevencion es una de las facetas cada vez m¨¢s esenciales en la acci¨®n por los derechos humanos. Resulta dif¨ªcil justificar un discurso de cr¨ªtica de los abusos si a la vez r¨ªo se atiende, a las causas o circunstancias que los provocan o facilitan. Entre ellas se encuentra, sin duda, el comercio de armamento. Amnist¨ªa Internacional (Al) considera que deben prohibirse las transferencias de materiales militares, de seguridad o policiales a menos que existan garant¨ªas de que no contribuir¨¢n a la comisi¨®n de homicidios pol¨ªticos, -desapariciones, torturas, malos tratos u otras violaciones incluidas en su mandato. Para ello es esencial que exista control parlamentario, que las transferencias se hagan p¨²blicas antes de realizarse, y que se tenga en cuenta la situaci¨®n de derechos humanos en el pa¨ªs de destino final.La situaci¨®n en Espa?a, como en la mayor¨ªa de los pa¨ªses, impide ese control. Las exportaciones de armamento en Espa?a figuran como "materia clasificada" por un acuerdo del Consejo de Ministros de noviembre de 1986. Las actas de la Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Material de Defensa (JIMDDU) son secretas. La Ley de Secretos Oficiales s¨®lo permite que, tres diputados, designados al inici¨® de cada legislatura puedan dar publicidad de la informaci¨®n que reciben a nivel confidencial.
Amnist¨ªa Internacional lleva a cabo una campa?a conjunta con Greenpeac el M¨¦dicos sin Fronteras e Interm¨®n pata conseguir que las. actas de la JIMDDU se hagan p¨²blicas trimestralmente con el fin de que la sociedad, el Parlamento y las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) puedan ejercer el necesario deber de control sobre el uso final de las armas producidas en Espa?a.
Espa?a ha exportado durante los ¨²ltimos ocho a?os armamento por valor de unos 480.000 millones de pesetas, la mayor¨ªa a pa¨ªses donde se violan con asiduidad los derechos humanos.
El Gobierno espa?ol emiti¨® recientemente un informe en respuesta a la campa?a, pero es un informe incompleto, ya que, entre otras cosas, no indica los pa¨ªses receptores del armamento vendido por Espa?a.
Al ha realizado recientemente peticiones a otros pa¨ªses. Por ejemplo, solicit¨® al Congreso d¨¦ EE UU que garantizase que las armas, y la formaci¨®n proporcionada, por ese pa¨ªs no se utilizasen para aumentar la capacidad represiva de los reg¨ªmenes que violan los derechos humanos.
La organizaci¨®n apoya as¨ª mismo el C¨®digo de Conducta sobre transferencias militares, elaborado, por varias ONG internacionales, que da criterios para regular la venta de armas. El c¨®digo ha sido presentado al Parlamento Europeo y a diversos parlamentos nacionales.
M¨¢s recientemente, Al ha emitido un llamamiento con motivo de la Conferencia Euromediterr¨¢nea de Barcelona, en el que se recuerda que uno de los principales, objetivos ser¨¢ el garantizar la paz y la seguridad en la regi¨®n mediante un conjunto de medidas para la consolidaci¨®n de la confianza.
Para asegurar que las transferencias militares, de seguridad y policiales no se usan para cometer violaciones, graves de los derechos humanos u homicidios indiscriminados en la regi¨®n mediterr¨¢nea, Amnist¨ªa Internacional, insta a los Gobiernos a revelar p¨²blicamente esas transferencias por adelantado. Los Estados deben, comprometerse, a proporcionar la informaci¨®n solicitada por el Registro de Armas Convencionales de la ONU, as¨ª como a facilitar descripciones mas exhaustivas y detalladas de las armas registradas. Asimismo, deben ejercer presiones conjuntas para la inclusi¨®n de las armas peque?as y ligeras -las m¨¢s utilizadas en la comisi¨®n de violaciones de derechos humanos- en el registro de la ONU.
Puede solicitar m¨¢s informaci¨®n sobre la campa?a por la transparencia, en el comercio de armas en la Secci¨®n Espa?ola de A. I. (C/ Barquillo, 17, 6? B. 28014 Madrid. Fax 5317114, Tel¨¦fono 531 25 09).
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