Millera pone al Taugr¨¦s con un pie en la final
Jordi Millera jugaba en el Vino de Toro de la divisi¨®n de plata espa?ola. Serguei Bazarevich jugaba en Atlanta Flawks de la NBA. El aprendiz de base se revolvi¨® contra el maestro y dict¨® con puntos y comas una tesis sobre baloncesto que mereci¨® la calificaci¨®n de Cum Laude. Sobre esa base construyo el Taugr¨¦s su victoria ante el Dinamo de Mosc¨² y cubri¨® el primer trayecto de la semifinal con un triunfo psicol¨®gico. No s¨®lo gan¨® sino que manifest¨® a su oponente, en su terreno, los fundamentos de su superioridad.Millera confundi¨® al cerebro de Bazarevich y eso permiti¨® un dominio de principio a fin del conjunto vitoriano en la cancha y en el marcador. El equipo ruso se limit¨® a oscilar en el luminoso gracias a algunos excesos de espectacularidad del Taugres y a sus t¨ªmidos intentos de presi¨®n que sorprendieron ocasionalmente al equipo dirigido por Comas.
Pero cada atrevimiento de los rusos lo respond¨ªa Perasovic con tina efectividad que en la segunda parte borde¨® el cien por cien, o Marcelo Nicola, infalible en los momentos determinantes. Por si hab¨ªa, que arreglar alg¨²n estropicio, Ram¨®n Rivas trabajaba cient¨ªficamente a sus rivales hasta sentarlos progresivamente en el banquillo uno tras otro.
De no ser por algunas frivolidades amparadas por el convenc¨ªmiento de su superioridad, el Taugr¨¦s hubiera firmado un partido perfecto. Desde el inicio, el equipo vitoriano imprimi¨® car¨¢cter al partido. Le impuso disciplina y v¨¦rtigo mientras el Dinamo pretend¨ªa jugar al ritmo cansino de Bazarevich. Cuando reaccion¨® ten¨ªa siete puntos de desventaja y el cerebro omnubilado por la presi¨®n. El t¨¦cnico ruso lo intent¨® todo para frenar el ¨ªmpetu de Ram¨®n Rivas pero el portorrique?o aprovech¨® los metros que le ced¨ªa el gigante Nosov para anotar canastas a media distancia. A pesar de que Perasovic sufr¨ªa el marcaje de Chakuline, la efectividad del resto permit¨ªa volver al vestuario con una ventaja de siete puntos.
La reanudaci¨®n observ¨® dos resurrecciones. Del lado ruso, Daineko recuper¨® su mu?eca para martillear el aro del Taugr¨¦s, pero a cambio Perasovic resolv¨ªa las opciones alavesistas con un cat¨¢logo de tiros que reprim¨ªa cada intento de progresi¨®n del Dinamo.
A partir de entonces, el Dinamo abandon¨® las estrategias y dispuso una presi¨®n generalizada que le permiti¨® acercarse a nueve puntos del Taugr¨¦s a falta de un par de minutos para el final. Era el ¨²ltimo suspiro pero Marcelo Nicola, con un lanzamiento triple, hel¨® el pabell¨®n moscovita y recondujo la situaci¨®n para normalidad de todo el encuentro.
El taugr¨¦s dispondr¨¢ ahora de dos oportunidades para obtener una victoria que lo coloque en la final de la Copa de Europa por tercera vez. Este a?o la final se disputar¨¢ en Vitoria y su rival parece que ser¨¢ el Paok. de Sal¨®nica griego, que ayer gan¨® ya en la cancha del Zalguiris lituano por 83-76.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.