El Tenerife volvi¨® a sufrir para ganar

El Tenerife tuvo que sufrir un domingo m¨¢s en su campo para ganar ante un Real Valladolid que tambi¨¦n se sum¨® a la mala calidad del partido El equipo castellano, que llegaba a la isla con el que fuera entrenador tinerfe?ista la pasada temporada, el chileno Vicente Cantatore, dispuso un esquema de contenci¨®n que se le atragant¨® al Tenerife durante todo el partido, salvo en la parte final, cuando Aguilera ocup¨® el carril derecho del ataque blanquiazul. Esa disposici¨®n semiconservadora no le impidi¨®, sin embargo, acercarse a la meta de Ojeda y por dos veces estuvo a punto de empatar.Todos los pron¨®sticos apuntaban a que el Tenerife tendr¨ªa muchas dificultades en marcar, algo que no ocurri¨® puesto que en el m. 4 una gran jugada entre Pinilla, Pizzi y Juanele acab¨® en el gol. Sin embargo, ese buen comienzo del Tenerife no tuvo continuidad a lo largo de la primera mitad, puesto que las imprecisiones empezaron a aparecer y el Valladolid se fue poco a poco hacia arriba en busca del empate.

A pesar del gol, el equipo vallisoletano no vari¨® su esquema de contenci¨®n defensiva pero, a partir del cuarto de hora, se aprovech¨® del descontrol canario y se prodig¨® en la zona de ataque, con internadas por la izquierda de Fernando, cuyos centros no encontraban el remate preciso. Tambi¨¦n utilizaron las paredes en el borde del ¨¢rea con las que Benjam¨ªn se hac¨ªa un hueco en la defensa tinerfe?a. Una de esas jugadas estuvo a punto de fructificar cuando el citado jugador se plant¨® solo ante Ojeda al filo del descanso aunque su disparo poco colocado fue desviado por el guardameta argentino.

En la segunda mitad, el Tenerife no cambi¨® de imagen. Su presencia atacante era pr¨¢cticamente nulo y s¨®lo en el minuto 60 envi¨® su segundo bal¨®n entre los tres palos, con un disparo formidable de Vivar Dorado, que rechaz¨® de forma espectacular C¨¦sar. El Valladolid, mientras tanto, aprovechaba las imprecisiones de su rival para acercarse al ¨¢rea de Ojeda con jugadas que, en su mayor parte, eran protagonizadas por Benjam¨ªn y Peternac.

Con el Tenerife y su p¨²blico desesperados por la ineficacia ofensiva, todo hac¨ªa presagiar otro final de sufrimiento. Esa angustia se hizo real cuando en el minuto 83, en una jugada de Benjam¨ªn que aprovech¨® un fallo defensivo del Tenerife, acab¨® con un centro al ¨¢rea chica al que no lleg¨® por mil¨ªmetros Peternac. Fue la oportunidad desaprovechada por el Valladolid.