Gracias, Felipe

THE ECONOMIST( ... ) Medio siglo despu¨¦s de una sangrienta guerra civil y 15 a?os despu¨¦s de un frustrado golpe de Estado, Espa?a goza de una democracia s¨®lida y de una econom¨ªa que, con una valiente labor de poda, puede resistir los desaf¨ªos que se avecinan. Y el presidente Felipe Gonz¨¢lez es, en buena parte, responsable de ello. Felipe Gonz¨¢lez ha perdido la confianza de los espa?oles, no porque lo crean culpable personalmente, sino por aparecer ante los ciudadanos como negligente con la corrupci¨®n de sus subordinados. Los muchos logros de Gonz¨¢lez se han visto crecientemente ensombrecidos por su fracaso en llevar a cabo los profundos cambios estructurales que necesita la econom¨ªa espa?ola.(...) Hoy, Gonz¨¢lez y su Gobierno parecen vac¨ªos de ideas. (...) La derecha se dispone a arrebatarle el poder a un debilitado partido socialista porque ya no inspira temor. En los ¨²ltimos a?os, mientras el partido socialista se auto destru¨ªa, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar ha ocultado con astucia sus cartas econ¨®micas. Pero si Aznar ha de tener ¨¦xito como presidente, no podr¨¢ carecer de la fortaleza necesaria para impulsar reformas que, al menos a corto plazo, ser¨¢n incluso m¨¢s dolorosas que las hasta ahora llevadas a cabo. Y si Aznar y Espa?a pueden hacerlo, si el tejido social espa?ol, ya en tensi¨®n por el paro y la incertidumbre econ¨®mica, puede aguantarlo, ( ... ) de nuevo habr¨¢ que agradec¨¦rselo en buena medida a Felipe Gonz¨¢lez.

Londres, 23 de febrero