La fiesta del fuera de juego
Mal comienzo. El Compostela empez¨® mal, esperando al Bar?a para contraatacar. Concedi¨® a su rival terreno y optimismo y se expuso a lo que le ocurri¨®: tres ocasiones de gol, una de ellas convertida, en ocho minutos.Gol y cambio. Un gol suele dar prudencia al que lo marca y arrojo al que lo recibe. El Compostela cambi¨® con el gol. Presion¨® arriba y desnud¨® las deficiencias del Bar?a. Adem¨¢s, utiliz¨® bien la trampa del fuera de juego, con la que anul¨® los intentos del Barca de sacudirse la presi¨®n con pelotazos locos. Durante m¨¢s de media hora, el Compostela desarm¨® por completo al Bar?a en su misma casa.
Coraje y Hagi. El Bar?a cambi¨® la situaci¨®n en la segunda mitad por disposici¨®n y coraje para hacer lo mismo que el Compostela: presionar arriba, esforzarse. Ayud¨® no poco al cambio la actitud de Hagi, que compareci¨® por Kodro y se esforz¨® como un novel. Al Bar?a le dur¨® el aire para media hora, pero tuvo la suerte de que justo cuando se le estaba acabando, el Compostela se qued¨® con 10.
Nacho. Saca nota en todos los ex¨¢menes. Lleg¨® al fondo no s¨®lo con velocidad, sino con buen juego. Atr¨¢s fue una pesadilla para Figo, que acab¨® buscando asilo en la otra banda.
Suspenso general. A los hombres de arriba del Bar?a. Nunca fueron capaces de aguantar la paciencia para arrancar, de sincronizar bien la carrera con el momento del pase. La defensa del Compostela les dej¨® una y otra vez en evidencia. El partido de anoche fue la fiesta del fuera de juego.
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