Estados Unidos logra el alto al fuego en L¨ªbano

Un acuerdo inspirado por Francia, pero fatigosamente logrado por EE UU, puso ayer formalmente fin a 16 d¨ªas de violencia entre Israel y la milicia pro iran¨ª de Hezbol¨¢ en el sur de L¨ªbano y abri¨® repentinamente las perspectivas para una reanudaci¨®n de las conversaciones de paz entre el Estado jud¨ªo y los ¨²nicos dos vecinos ¨¢rabes con los que! se mantiene t¨¦cnicamente en estado de guerra. Fijado el cese del fuego a partir de las cuatro de la madrugada de hoy (tres en la Espa?a peninsular), un documento de cuatro puntos contiene esta vez por escrito los objetivos comunes de Israel y L¨ªbano: suspensi¨®n de ataques guerrilleros contra el territorio israel¨ª; compromiso israel¨ª de abstenerse de bombardear ¨¢reas libanesas pobladas; compromiso de la guerrilla de no utilizar aldeas para lanzar sus operaciones, y creaci¨®n de un grupo de vigilancia que controle el cumplimiento.

Denominado oficialmente como un "entendimiento", el acuerdo anunciado simult¨¢neamente ayer por la tarde en Jerusal¨¦n y Beirut es esencialmente una versi¨®n actualizada del pacto verbal que en julio de 1993 consigui¨® parar una miniguerra similar entre Israel y Hezbol¨¢.El texto se empe?a en destacar el papel jugado por EE UU hasta extremos que le asemejan a un simple dictado de Washington: "Estados Unidos considera que despu¨¦s de las discusiones con los Gobiernos de Israel y L¨ªbano, y tras consultas con Siria, L¨ªbano e Israel, entrar¨¢n en vigor las siguientes disposiciones", reza la primera frase del acuerdo.

En otro p¨¢rrafo se resalta que: "Estados Unidos afirma la importancia de la realizaci¨®n de una paz global en la regi¨®n. Para ello, propone la reanudaci¨®n de las negociaciones entre Siria e Israel y entre L¨ªbano e Israel en una fecha que deber¨¢ ser acordada, con el objetivo de alcanzar una paz duradera". Y contin¨²a. "Estados Unidos considera que es deseable que estas negociaciones se desarrollen en un clima de estabilidad y tranquilidad".

Fuentes libanesas se?alan que en esas palabras queda "claramente"` establecido" que tarde o temprano Israel tendr¨¢ que sentarse con L¨ªbano a negociar la retirada de su Ej¨¦rcito de la franja que ocupa en el sur de este pa¨ªs desde 1978. El primer ministro israel¨ª, Sim¨®n Peres, dio a entender que su Gobierno no tiene objeciones pero que primero debe constatar que el Ej¨¦rcito liban¨¦s elimina toda posibilidad de amenaza de Hezbol¨¢. "No tenemos ambiciones territoriales sobre el L¨ªbano", dijo reiterando que su pa¨ªs est¨¢ dispuesto a entrar inmediatamente en negociaciones con el Gobierno de Beirut.

Peres, que hizo el anuncio acompa?ado del secretario de Estado norteamericano, Warren Christopher, estaba visiblemente aliviado por la conclusi¨®n de las intensas negociaciones que hab¨ªan sido pr¨¢cticamente desahuciadas el jueves a causa de "diferencias considerables" con los sirios.

"Una idea francesa"

Seg¨²n varias fuentes diplom¨¢ticas, los sirios, en una demostraci¨®n de pleno apoyo a L¨ªbano, rechazaron todas las demandas israel¨ªes para ampliar el alto al fuego a la zona de seguridad, la franja ocupada por Israel donde la guerrilla libra su "guerra de liberaci¨®n" as¨ª como el desarme total del Hezbol¨¢. Esa postura fue defendida por Francia, cuya misi¨®n mediadora emprendida por el ministro de Exteriores, Herv¨¦ de Charette, ha sido decisiva para lograr el acuerdo. "El acuerdo es fundamentalmente una idea francesa pero en un envoltorio norteamericano", coment¨® ayer un diplom¨¢tico liban¨¦s que, como muchos analistas en la zona, asignan decisiva influencia francesa en la resoluci¨®n de la crisis.?sta, por supuesto, puede ser solaente temporal. El acuerdo contiene ambig¨¹edades que s¨®lo se van a ir aclarando sobre el te rreno. No est¨¢ del todo claro, por ejemplo, cu¨¢l va a ser la actitud del ej¨¦rcito israel¨ª si es ataca do dentro de L¨ªbano. Te¨®rica mente, el comit¨¦ de observadores tiene que vigilar que los guerrilleros no operen desde las aldeas pero la cl¨¢usula del acuerdo que incluye el "uso de infraestructura para acciones guerrilleras" implica que Israel puede bombardear las carreteras y caminos utilizados por Hezbol¨¢.

De momento, en L¨ªbano predomina sobre todo una sensaci¨®n de alivio. La implacable operaci¨®n Uvas de la Ira, lanzada el pasado 11 de abril, ha causado 164 muertos, 351 heridos, el ¨¦xodo de 400.000 civiles del sur y da?os materiales por valor de cientos de millones de d¨®lares. "Esperamos que se cicatricen nuestras heridas pronto" declar¨® ayer el primer ministro liban¨¦s, Rafic Hariri. "Lo dijimos desde el primer d¨ªa, en este conflicto no puede haber una soluci¨®n militar. Se impone una soluci¨®n pol¨ªtica para poner fin a la ocupaci¨®n militar israel¨ª y para que podamos vivir en paz", manifest¨®. Seg¨²n Hariri, Hezbol¨¢ "tiene el derecho de combatir en el territorio liban¨¦s ocupado, pero no tiene derecho para utilizar las aldeas, ni derecho en absoluto a disparar el m¨¢s m¨ªnimo cohete en direcci¨®n hacia el territorio israel¨ª".

Pero anoche resultaba demasiado prematuro predecir- cu¨¢les van a ser los primeros pasos que Siria y L¨ªbano van a tomar para evitar que Hezbol¨¢ vuelva a la carga contra objetivos dentro de Israel. Esa posibilidad, sin embargo, parec¨ªa remota tras la declaraci¨®n que el secretario general de Hezbol¨¢, el jeque Has¨¢n Nasral¨¢, hizo en Damasco. Nasral¨¢ dijo que los combatientes del Partido de Dios van a respetar el acuerdo y suspender¨¢n sus ataques con cohetes Katyusha sobre Israel.

Grandes inc¨®gnitas

Una de las grandes inc¨®gnitas es si los ap¨¦ndices secretos del acuerdo aprobado ayer contienen el compromiso sirio para dejar de actuar como intermediario entre Ir¨¢n y Hezbol¨¢ para la transferencia de armas a los guerrilleros. Tampoco est¨¢ claro si el Ej¨¦rcito liban¨¦s, que se ha mantenido en actitud pasiva a lo largo del conflicto, va a adoptar una actitud mas rigurosa en el sur a fin de limitar los movimientos del Hezbol¨¢ y eliminar oportunidades de fricci¨®n.El acuerdo especifica la creaci¨®n del grupo de vigilancia, "formado por EE UU, Francia y Siria as¨ª como las partes, L¨ªbano e Israel". Se le atribuye la misi¨®n de "vigilar la aplicaci¨®n" del anunciado texto y destaca que "en caso de alegarse violaci¨®n del acuerdo, las partes deber¨¢n presentar la queja en 24 horas".

Finalmente, el texto hace referencia a la necesidad de ayudar a L¨ªbano a reparar los da?os causados por la operaci¨®n Uvas de la Ira. En contra de lo que pretend¨ªa Beirut de que Israel pagase plenamente la factura, se indica que Washington "organizar¨¢ igualmente un grupo consultivo, formado por Francia, la Uni¨®n Europea, Rusia y otras partes interesadas con el objetivo de proveer a las necesidades de reconstrucci¨®n de L¨ªbano".